Soy tu fan Capítulo 4

El reloj marcaba las diez de la mañana.

Después de otra terrible noche más, donde había dormido muy poco tras haber estado tranquilizando a Jaejoong cuando sus nervios se alteraron de sobremanera al hablar con su ex terapeuta, Junsu estaba con grandes círculos alrededor de sus ojos sentado a la mesa en compañía de Yoochun y Changmin.

Por fin las almas de los dos amigos podían estar tranquilas, el examen al que tanto habían temido ya había pasado… ahora, solo quedaba esperar por los resultados, pero por eso se preocuparían después. Por el momento lo que más importaba es que al fin tendrían sus anheladas vacaciones, aunque ambos tenían trabajos de medio turno, eso no les quitaba la sonrisa de sus rostros.

[Punto de vista Park Yoochun]

Llevábamos ya un buen rato sentados a la mesa ingiriendo nuestros alimentos y Junsu no había dicho ni una sola palabra, solo veía a la nada pensativo y de vez en cuando mordía su pan tostado des ganadamente… Su rostro reflejaba cansancio y sus ojos de panda se acoplaban perfectamente a la sus demás características.

-¿Por qué Jaejoong no ha venido a desayunar?-Le pregunté curioso. Ya era algo tarde como para que aún no se hubiese despertado, a lo mejor le sucedía algo y esa era la razón del ausentismo de Junsu.

-Él salió desde muy temprano… hoy es su primer día de trabajo.- sonrió, aunque más que sonreír parecía que solo había estirado los labios un poco, ya que no se veía nada feliz… Hay algo en él que me intriga, desde la primera vez que lo vi… a veces se muestra animado y con ese entusiasmo en su voz que parece el de un niño, pero luego, aparece de nuevo esa aura de tristeza…

-¿¡Ya consiguió empleo!?-Junsu asintió débilmente con la cabeza ante la pregunta de Changmin.- Woow en verdad es mi ídolo… además cocina tan delicioso.-Los ojos de Changmin, al igual que siempre, tomaron un brillo especial cuando mencionó la comida… contrastando con los de Junsu, quien pareció aún más triste con el halago de Changmin.

-Como que ya es mucha idolatría hacia él, ¿no crees?- Le dije lo más serio que pude (aunque con el es difícil que sea así), porque si el hablar de Jaejoong hacía que Junsu se pusiera peor lo mejor era cambiar de tema.

-Es que es un caso único… es atractivo, amable, educado, bueno en los estudios y, lo más importante, ¡sabe cocinar!...- Tal vez sea mi imaginación pero, por un momento me pareció que divisar en Junsu una mueca de enojo al escuchar a Changmin, quien no captó mi indirecta y siguió hablando de Jaejoong. ¿Acaso está celoso?...

-Que interesante que pienses así… tal vez si le cuento a Minho lo maravilloso que te parece nuestro nuevo compañero de departamento…- Changmin palideció al escuchar mi amenaza… jaja eso siempre funciona, la única debilidad de Changmin recientemente, después de la comida, es su nueva conquista.

-¡No, no puedes hacer eso!-el grito que pegó Changmin hizo que Junsu, quien estaba sentado a un lado de él, saltara en su asiento y lo viera algo temeroso.-Sabes lo mucho que me costó que aceptara salir conmigo…-decía poniendo sus ojos de niño bueno, suplicando por compasión de mi parte… mi intención no era molestarlo, (bueno sí jaja, pero esa no era la razón principal) si no más bien que dejara el tema de Jaejoong.

-Esta bien… pero serás mi esclavo por una semana…- ¡Jaja, en tu cara Shim Changmin! Aprovecharé la ocasión para vengarme por haber despreciado mi comida.

-¡Qué! ¿Estás loco?...- Esto ya se había salido de control… lo que empezó con un intento de cambiar la conversación terminó en una de nuestras comunes y ruidosas discusiones… quizás era el momento de parar pero, cuando vi en el rostro de Junsu una pequeña sonrisa por nuestro comportamiento me impulsó a seguir con ésta odisea…

-Tal vez lo esté… pero mira,- saqué mi teléfono móvil y empecé a oprimir unas cuantas teclas hasta que encontré lo que buscaba.- justamente aquí tengo el numero de Minho… veamos si él piensa lo mismo…-le mostré la pantalla para que viera que hablaba en serio.

-¡NOOOO!...-Changmin trataba de alcanzar el móvil y arrebatármelo, pero yo lo defendía con todas mis fuerzas (que no son muchas comparadas con las de él, pero al escuchar una risita de la otra persona presente, mis fuerzas se multiplicaron). - Ashh, tu ganas… pero este chantaje tan ruin no quedará en el olvido.

-Esperaré tu venganza con ansias…- le dije como si no me importara, en un tono sarcástico- Pero hablando de cosas más importantes…Junsu, ¿tú no piensas buscar trabajo?

-¿Tienes idea de lo ruda que se escuchó eso?- Me pregunta Changmin con el seño fruncido a causa de haber perdido una de nuestras típicas peleas.

-Te decía, JUNSU…- me loteé en dirección a Junsu, ignorando completamente a Changmin. Sé que después pagaría muy caro el estarlo tratando así pero por el momento resulta muy divertido.-Es que como habían dicho que ambos buscarían trabajo aquí y Jaejoong ya lo ha hecho…

-Oh, si... Iba a empezar a buscar ayer pero…- Al comienzo de su habla las cosas parecían bien pero, cuando mencionó el día de ayer la sombra que opacaba su rostro hace un momento apareció de nuevo…

No voy a engañarme a mi mismo, desde la primera vez que lo vi, pidiéndome perdón una y otra vez, me pareció la creatura más adorable sobre este planeta, pero a la vez tenía los ojos más melancólicos que jamás había visto… ¿Qué es lo que escondes Junsu? ¿Qué es lo que ensombrece tu mirada?...

- ¿Fue por tu dolor en la columna?-Pregunté ya que después de que interrumpió sus palabras no había continuado.

-Si, fue por eso…- Este chico no sabe mentir, su inocencia no se lo permite… desde ayer me di cuenta que lo de su columna era mentira, claro que había un dolor físico, pero definitivamente no era por eso.- ¡Pero hoy mismo pienso empezar a buscar por cada rincón de Seúl y no regresaré hasta que lo consiga!
Regresaba el animado Junsu, al que me he vuelto adicto en tan solo dos días. Nos deslumbraba con su radiante sonrisa y yo no podía evitar más que sonreír también, junto con el.

-Teniendo las mismas calificaciones de Jaejoong no lo dudo…- Changmin desatendió su valiosa comida por unos instantes para añadir uno de sus ‘importantes’ comentarios.

-Bueno yo, no soy tan listo como él…-esa mirada, de nuevo al hablar de Jaejoong… ¿Por qué?

Me quedo perdido un momento en esos ojos, no me había dado cuenta que los rasgos de sus ojos tan hermosamente peculiares y sus cejas que los enmarcan de manera idónea , de no ser por la melancolía ya mencionada serían aún más bellos.

¿Acaso si existen los flechazos?... ¿Es verdad entonces, que con solo ver a alguien una vez puedes llegar a sentir todo esto? Jamás lo hubiese pensado, nunca he sido del tipo romántico pero ahora no puedo dejar de pensar estas cosas… Muy bien podría faltar al trabajo el día de hoy e invertir todo mi día en hacer que la sonrisa de Junsu estuviese en su rostro lo más posible…

-¡¡ES VERDAD!!-¿Cómo pude olvidarlo? ¿En verdad el amor te vuelve tan distraído? ¿Es sensato llamar a éste sentimiento: ‘amor?’´… Junsu y Changmin me miraron extrañados de mi repentina exclamación.- En el sitio en que yo trabajo, recién están solicitando un nuevo jefe en el área administrativa.

Con las habilidades de Junsu y todos sus estudios en el extranjero no estaba muy seguro si sería de su interés trabajar en un lugar relativamente pequeño pero no perdía nada con intentarlo.

-¿De verdad?... ¡Eso sería perfecto para mi primer empleo!- Genial, esa era la respuesta que estaba esperando y era aún mejor acompañada de su bella sonrisa.

Entonces todo quedó pactado, después del desayuno hicimos una leve limpieza al apartamento y después comenzamos a prepararnos para partir a nuestros respectivos empleos.

Junsu y yo fuimos los primeros en usar la ducha, claro que por separado, ya que nosotros nos marcharíamos primero para poder hablar con el encargado acerca de la vacante de empleo para Junsu. Changmin no tenía tanta prisa así que se tomó un tiempo extra para hablar por teléfono con su reciente conquista, incluso cuando Junsu y yo salimos él aún seguía en el teléfono… ya veremos cuanto le dura el ‘amor’ esta vez.

De camino al trabajo el viaje fue trascendentalmente diferente a los días anteriores, y por imposible que parezca es todo a causa de esa persona a la que he conocido hace dos días: Kim Junsu… quién miraba con gran interés cada cosa que yo encontraba aburrida, como desde pequeño había vivido en América todo le llamaba la atención y hacía expresiones tiernos como “¡Woow, ¿ya viste eso?!” o “¡Ese lugar es tan lindo, espero poder venir un día de estos!”…

Ah… qué puede hacer un simple mortal como yo ante tanta ternura… si me lo pidiera yo lo llevaría a cada uno de los lugares que hubiera señalado, pero después de lo que le confesé ayer dudo mucho que aceptara mi invitación…

Llegamos sin ninguna complicación al lugar de destino habiendo pasados unos treinta minutos… El transporte nos dejaba una calle antes así que debíamos caminar un poco, desde ese lugar ya podía divisarse el gran letrero amarillo con el nombre del restaurante.

-¿Es ese lugar, Yoochun?-Me preguntó Junsu entusiasmado.

-Sip… ahí es donde trabajo.- Le respondía con una sonrisa, él volvió a mirar en dirección al establecimiento que cada vez quedaba más cerca de nosotros.

-Es muy bonito…- dijo mientras mantenía su mirada fija en él. Es extraño, de todos los adjetivos que pensé que utilizaría fue en el que menos pensé, puede sonar algo infantil cuando lo dice con su tono de voz tan chillante, parecido al de un niño pequeño, pero para mí resultaba tan adorable…


JUNG CORPORATION

[Punto de vista Jung Yunho]

-Listo…- dijo aquél chico después de haber terminado de firmar los papeles del contrato. Me sonrió y me devolvió los documentos.

-Bueno, bienvenido a Jung Corporation...- Le dije un poco formal, pero sonriendo.- Como no tenía contemplado tener un asistente no tengo una oficina preparada para ti…

-Oh, eso no importa… puedo acomodarme en cualquier lugar.- Me respondió antes de que pudiera terminar la frase, de cierto modo me pone nervioso su elevado entusiasmo sobre este empleo y sobre todo que esté sonriendo todo el tiempo.

-No te voy a poner ‘en cualquier lugar’… te instalarás aquí junto conmigo en lo que encuentro un lugar adecuado.

-Ok… entonces, ¿podemos empezar ahora?-No sé si fue la forma en que lo dijo o en que me miró, pero si no estuviéramos en mi oficina y él no fuera mi empleado hubiera pensado tan mal.

-Amm… si. Aquí están los estados financieros de los últimos meses, además de una descripción detallada de los movimientos y estrategias que se han llevado a cavo en la empresa…- Estaba revisando las hojas antes de dárselas, pero sin darme cuenta él ya se encontraba de este lado de mi escritorio, inclinando su cuerpo para poder ver sobre mi hombro lo que le estaba describiendo momentos antes.

-Ya veo… con que los problemas iniciaron a principios del año pasado…- Leía la hoja que había quedado por encima de las demás en el momento que me quedé estático…Pasaba su dedo índice de la mano izquierda por el documento, como indicando la parte que estaba leyendo. Su otra mano estaba recargada en el respaldo de mi asiento, quedando demasiado cerca a mí…

¿Es mi imaginación o huele a vainilla? ¿Será su perfume? ¡Pero que rayos estoy pensando! No me puedo poner así de tenso por un chico, aunque no lo parezca lo es…

Mantuve mis ojos pegados en mi escritorio… de ninguna forma quería levantar la vista y encontrarme su rostro cerca, aunque por dentro la curiosidad me incitaba a descubrir si de cerca se su piel se veía igual de tersa que a la distancia.

-¿No han hecho un estudio de mercado?...-La voz del chico me hizo regresar a la realidad. Me había hablado, sería una descortesía responderle sin siquiera mirarlo.

-Claro que lo hicimos, cuando la empresa iba empezando…- Le dije casi ofendido. Si, estamos a un paso de la ruina, pero eso no quiere decir que no sepamos lo básico de la administración.

Al responderle me decidí a mirarlo… un error que pagué muy caro ya que él, no se por qué, encontró divertida mi respuesta y comenzó a reírse de un modo peculiar… llevando una mano hasta su boca cubriendo sus labios rojos.

Pero por lo menos ahora sé la respuesta a mi duda, si, su piel y su rostro en general se ven muchísimo mejor de cerca.

-Eso no solo se hace al principio, Yunho-shi ~… Si la empresa presenta problemas como los actuales debieron hacerlo de nuevo para ver en que están fallando.- ¿Cómo puede haber un chico así? Tal vez se trate de una de esas chicas que se hacen pasar por hombres para ser más reconocidas…

-No te rías de mí, niño…- Para ser mi ‘salvación’ parecía estar tomándoselo muy a la ligera, creo que se llevará muy bien con Heechul.- si lo consideré, pero pensé que sería un gran costo para la empresa.

-Pero debes verlo como una gran inversión, créeme…y ¡no me llames niño!- Me reclamó haciendo un gesto con los labios.

-La gente adulta no hace expresiones como esa…-Le dije señalando sus labios que seguían haciendo ese puchero tan simpático, mientras que sus mejillas estaban ligeramente infladas.

-De todos modos, no creo ser mucho más joven que tú…

-Pues la forma en que me llamas “Yunho-shi” todo el tiempo me hace sentir viejo.- ¿Qué no deberíamos estar hablando de los problemas de mi empresa? ¿Cómo es que llegamos a este tema tan trivial?...

Independientemente de su apariencia, algo en este chico me hacía sentir en confianza…como cuando hablo con Heechul, quizás es porque se parecen un poco, muy bonitos para ser hombres, pero Kim Jaejoong no parece ser igual de excéntrico como mi amigo… Incluso tiene un aire de inocencia que lo hace ver aún más joven.

Se quedó pensando por un memento llevando su dedo índice a la barbilla y mirando a la nada, estaba de pié junto a mí y yo lo esperaba expectante a la próxima respuesta que me fuera a dar.

-Bien, ya que usted no quiere sentirse tan viejo ni yo tan joven, ¿por qué no simplemente nos llamamos por nuestros nombres?...

Creo que esperaba una solución más elaborada de un niño prodigio que viene de una universidad tan afamada,… y el muy descarado tiene la desfachatez de pedirme que no lo trate como un niño…

-Umm … -El me veía impacientemente con sus grandes ojos, se había recargado en mi escritorio y se balanceaba de un lado a otro apoyando sus manos en el mismo.-Creo que está bien, solo no olvides que sigues siendo mi empleado…

-¡Si, señor!...Es decir…Si, Yunho… ¿hyung?-Agregó el ‘hyung’ algo dudoso al final, como preguntando si estaba bien.

-Creo que el ‘hyung’ le da un toque de autoridad… si, me parece bien, Jaejoong…- Extendí mi mano de modo fraternal y él la acepto regalándome una sonrisa.

“También es suave al tacto”…pensé inmediatamente que nuestras manos se tocaron, su piel es tan blanca y suave que parece algodón… este sujeto debe ser la envidia de muchas mujeres…

-Yunho-ah~… ¿ya revisaron los…-¿qué clase de amigo tengo que ni siquiera toca la puerta antes de entrar?

No es que estuviera haciendo algo malo, pero por si sola la situación parecía un poco rara viéndola desde otra perspectiva… El nuevo empleado recargado en el escritorio dándole la espalda a la puerta, yo sentado junto a él y los dos sosteniendo la mano del otro mientras nos sonreímos… ¡Dios me libre de la ‘reina’ de los dramas, Kim Heechul!

-Oh, ¿están ocupados?…-habló Heechul de nuevo, después de haberse recuperado de la impresión.

-No, para nada…- dije por fin soltando la mano del nuevo.-Pasa.

Heechul entró a la oficina aún lanzándonos miradas raras a mí y a Jaejoong. Después, como para darnos un poco de privacidad a mi amigo y a mí, Jaejoong salió de la oficina excusándose diciendo que tenía que pedirle algunos documentos a Yubin… aunque tenía ganas de detenerlo para que no se fuera, en este momento, estar solo con Heechul no era una buena idea.

-Ya te vi “señor no quiero ese tipo de cosas en mi empresa”…

-Deja ese tono sugestivo, Heechul. Solo le estaba dando la bienvenida formalmente.- El muy confianzudo de mi amigo llegó hasta la silla frente a mi escritorio y se sentó poniendo los pies en él.

-¿A eso llamas formalmente?... Él estaba invadiendo tu espacio personal, además, ¿fue mi imaginación o lo escuché llamarte Yunho-hyung?... Disculpa mi imprudencia mi querido amigo pero jamás había visto que trataras así a algún otro empleado.- Por eso temía quedarme solo con él, ya sabía que algo así iba a pasar.

-¿Estas insinuando que soy un mal jefe?...

-Claro que no, amigo. Eres amable con la gente y todo pero, esto fue más que amabilidad… hace mucho que no te veía sonreír así, ni siquiera con Sunye.- Suspiré hondo cuando escuché el nombre de ella.

-No me la recuerdes…

-¿Tan mal les fue en su cena romántica?- Giré mi silla en dirección a las grandes ventanas que estaban a mi izquierda, me quedé observando el exterior mientras los recuerdos de lo sucedido ayer regresaban a mí.

-Ella… volvió a comentar el tema del matrimonio…-

-Ah~… con que se trata de eso. Pero Yunho, tu ya sabías que eso iba a pasar… es decir, ¡la chica te ha estado esperando desde hace cinco años!... es lógico que te cuestione sobre matrimonio.

¿No se supone que un amigo se tiene que poner de tu lado y apoyarte cuando estás mal?... En vez de darle la razón a alguien más… El que me recuerde la terrible persona que soy al tener esperando a una chica tan buena como ella por tanto tiempo no me hace sentir mejor.

-No es el momento.

-Es lo que siempre dices… ¿No has pensado que podrían vivir en unión libre?- Con todo lo que ha esperado por mí jamás me atrevería siquiera a pensarlo.- Yo creo que ella estaría de acuerdo…

-Pero yo no… sabes lo tradicional que soy… si ella ha esperado por mí lo menos se merece es una ceremonia decente con nuestras familias reunidas.

Y así siguió nuestra conversación, hablando de mi novia y de sus cada vez más frecuentes reclamos acerca de mi seriedad ante nuestra relación. Aunque más que conversación parecía un monólogo ya que si Heechul llegaba a comentar algo era acerca de cosas que nada tenían que ver con el tema… Pero yo se que en el fondo él solo desea alivianar un poco mi carga con sus bromas.

Poco después de que terminara nuestra charla acerca de mis problemas personales, Jaejoong regresó muy contento con unos directorios para buscar al mejor candidato para que realizara nuestro nuevo estudio de mercado. También estuvimos tomando en cuenta unas probables renovaciones al diseño de los uniformes de nuestros empleados, una nueva campaña publicitaría, remodelaciones a las instalaciones… todas eran ideas de Jaejoong.

-Jaejoong, ¿qué parte de la frase ‘mi empresa está a punto de la quiebra’ no entiendes?... no podemos hacer tantos gastos.- Le dije empezando a sudar un poco al ver los presupuestos que él mismo iba haciendo.

-Ya te dije que es una inversión, Yunho-hyung.... En el mundo de los negocios es innovar o morir.- Sinceramente, prefiero morir pero con algo de dinero.


YONGSAN MUNICIPAL LIBRARY
[Punto de vista Shim Changmin]

Otro agobiante y aburrido día en esta tonta biblioteca.

No se como me dejé convencer por Yoochun de trabajar aquí… oh si, ya recuerdo, él me dijo que aquí podrían venir chicos lindos intelectuales y podría aprovechar para conquistar alguno…

¡Patrañas! La única gente que viene aquí son viejitos interesados en libros aún más viejos que ellos y chicas hormonales deseosas de leer alguna novela romántica. Pero bueno, ya estoy aquí y no hay mucho que pueda hacer al respecto… por lo menos me dan un buen salario solo por estar aquí sentado en el mostrador.

No había mucha actividad hoy, no es que haya mucha clientela otros días pero hoy en definitiva es menor. Ahg… que aburrido. Me puse a ojear un libro de recetas de comida italiana que llamó mi atención, tal vez si lo lleve a casa Jaejoong quiera tratar alguno de esos platillos.

Jaejoong… ese chico encaja muy bien en las características de mi chico ideal: lindo, educado, sexy y su concina es… No, en este momento solo debo de concentrarme en esa otra persona… ya después veré si puedo hacer algo con mi nuevo compañero de departamento.

-Changmin…- distraje mi atención de las apetitosas fotos de aquel libro cuando alguien dijo tímidamente mi nombre.

-Oh, Minho… ¿qué haces aquí? ¿Acaso extrañabas a oppa? – sus mejillas se tiñeron de un ligero color rosa… Una de las razones por las cuales lo estuve siguiendo por tanto tiempo fue esa pureza que ya no se encuentra en cualquier lado…

-No… bueno si… pero esa no es la razón por la que vine. Necesito un libro para la clase de administración.- las clases acaban de terminar y es obvio que el libro no lo necesitará hasta dentro de un mes.

-Está bien, yo te mostraré donde están…- no iba a perder esta oportunidad, me muero por contarle a Yoochun sobre esto, si todo termina hoy no tendrá nada con que chantajearme más.

Salí del mostrador y tomé su mano gentilmente, sonriéndole dulcemente, bajó la mirada avergonzado. Yo lo guié hasta lo más profundo de la librería, en los estantes donde ya casi no llega a luz… Nunca lo había pensado, por lo aburrido que me resulta este lugar pero, tener acción en una librería parece algo muy tentador en estos momentos.

-¿Dónde están los libros, Changmin?- me preguntó nervioso, mirando a todos lados, dándose cuenta de la gran privacidad que ahora teníamos.

-Creo que lo he olvidado…- expresé actuando de una manera muy poco convincente.-pero… ya que estamos aquí podemos tener un momento romántico, ¿no crees?

-¿Qué?...- Antes de que me pudiera dar una respuesta negativa besé sus labios de manera gentil, solo porque se trataba del comienzo.

-Tranquilo, nadie nos verá…-Le susurré en el oído al ver que estaba muy tenso, acariciando con mi mano su mejilla.- eres tan lindo.

Bajé mi mano de su mejilla a su cuello, la iba deslizando despacio, luego más abajo… aún estaba actuando cautelosamente, ya que era la primera vez que teníamos un beso de este nivel (y me imagino que éste ha de ser el primero de su vida)… nunca antes había tenido tantas consideraciones con alguien, pero es que este chico era tan ‘especial’, que sentía que si hacía un movimiento en falso todos mis esfuerzos se vendrían abajo… y eso es inaceptable para Shim Changmin.

Los movimientos de sus labios eran algo torpes, pero su sabor era la misma gloria… mis manos temblaban un poco al acariciar su figura, debían ser las ganas contenidas de todos estos días. Dejé sus labios pare dirigirme a su cuello y al mismo tiempo, empecé a desabotonar su camisa despacio… todo despacio…

-Ahh…- Sentí escalofríos en mi espina dorsal al escuchar ese tierno pero tentador sonido salir de sus labios, no podía más… tenía que tenerlo ahí mismo.- Changmin…- dijo mi nombre de forma dificultosa y apoyó sus manos en mi pecho.- Changmin… ¡detente!

Me empujó con todas sus fuerzas… por lo extasiado que estaba no me había dado cuenta de las lágrimas que habían rodado por sus mejillas. Y así, llorando, me dio la espalda y salió corriendo del lugar dejándome sudoroso y con un gran problema en mis pantalones…


MISARANG IMSHIL CHEESE PIZZA
[Punto de vista Kim Junsu]

No podía creer cuando me dieron el sí en mi primer entrevista de trabajo… estaba tan emocionado, además de que estaría en un lugar en el que tenía a un conocido…bueno, más que conocido, creo que ya considero a Yoochun como a un amigo… el primero desde hace mucho tiempo.

Aunque no pude ver mucho a Yoochun ya que mientras yo estaba en una oficina y de vez en cuando atendía algunas dudas de los clientes, el trabajo de mi nuevo amigo era andar de aquí para allá haciendo las entregas a domicilio.

El lugar es muy bonito también, tiene un toque muy moderno y sofisticado a pesar de que se trata un restaurant de comida rápida… inmediatamente que cruzas la puerta de entrada puedes respirar el esquicito aroma de las pizzas cocinándose… ¡no pude encontrar mejor lugar para trabajar!

Con lo feliz que estaba, mi primer día se me pasó súper rápido, para cuando me di cuenta ya era hora de cerrar… le pedí a Yoochun de favor que nos fuéramos caminando de regreso a casa ya que quería observar todos los lugares que vi de camino acá con más detenimiento, después de todo el departamento no estaba muy lejos.

-Ahh…-escuché suspirar a Yoochun.- Que bien se siente respirar aire puro de vez en cuanto…

-¿Puro? … pero si estamos en la ciudad, creo que eso es imposible aquí…-Me sentí Jaejoong haciendo ese tipo de comentarios, pero es que lo que dijo Yoochun había sido muy ilógico.

-Jajá, si, lo sé… pero sabes a lo que me refiero: caminar sin preocupaciones, viendo los anuncios luminosos de las tiendas…

-Si… es muy relajante.- Yo no podía dejar de mirar todos los lugares por los que íbamos pasando, algunos ya los había visto en la mañana rápidamente… ¡pero de cerca todo lucen mucho mejor!

No hablamos por un momento… yo no sabía que decirle, no soy muy bueno iniciando conversaciones y es aún extraño para mí estar tanto con alguien que no sea Jaejoong… lo extraño mucho… ya van dos días seguidos en que solo lo veo en la mañana y seguramente lo veré más tarde con su deslumbrante sonrisa, feliz de haber pasado el día con su ídolo.

-Te has quedado muy serio.

-Oh, es que… extraño un poco a mis papás, ¿tú no extrañas a los tuyos estando aquí?- Cuando algo pasaba con Jaejoong, a veces, cuando las cosas eran más difíciles… aunque mi madre no sabía la razón de mi llanto siempre estaba ahí para consolarme y limpiar mis lágrimas… ahora, no se que voy hacer sin ella.

-Si… pero no creo que el sentimiento sea mutuo.

-De que hablas… ellos son tus padres, ¡seguro que te extrañan!- sonrió y vio al cielo pensativo.

Tal vez su familia es un tema del que no debí preguntar… aishh, siempre soy un fiasco para estas cosas. ¿Ahora que le digo? Di un respingo al sentir que alguien tomaba mi mano… bajé mi mirada y vi que se trataba de Yoochun, lo miré lo más calmado que pude esperando alguna respuesta, no estoy acostumbrado a esas cosas…

-Junsu… ya que eres mi amigo, quisiera contarte algo.

-Ehh… está bien, te escucho.- Su expresión era seria, y yo quería tomar las cosas del mismo modo pero sería imposible hasta que no me soltara… y no parecía que eso fuera a ser pronto.

Seguíamos avanzando, aunque un poco más lento… La calle por la que íbamos no era de una zona céntrica, así que no había ningún problema ya que solo había unos pares de personas esparcidas por ahí.

Mi mano tenía espasmos a veces por el nerviosismo… Jaejoong jamás toma mi mano de esta manera, tan gentilmente… me hace sentir especial, que soy importante para alguien.

-Mis padres me echaron de la casa…-Me quedé helado el oír eso, ¡Ah, soy un tonto! No debí preguntar, no debí.-… me echaron cuando se enteraron que era gay,,,

-¡Pero eso no tiene nada de malo!...- Exclamé consternado… tal vez me suene muy inhumano lo que me ha dicho porque en mi caso mis padres apoyaron mi decisión e incluso me ayudaron a no sentirme tan diferente…

-Lo sé… lo sé… - apretó mi mano un poco y yo hice lo mismo, sentía un nudo en la garganta al escucharlo y ver sus ojos cristalinos… se ve que es difícil para él contármelo, pero aún así sigue…-pero, para una familia tan conservadora como la mía, tener un hijo como yo no era algo que pudieran permitir…

Mamá siempre me decía, que a veces es mejor desahogarte… que el guardar el dolor adentro solo hace que sea peor… Así me pareció que era preciso dejar que Yoochun continuara.

Escuché todo su relato, prestando un poco más de atención cuando en su narración apareció Jae… ahí empezó todo, su odio hacía él era más que nada por que él si podía demostrarlo, por la libertad de la que él gozaba y la cual sabría que nunca tendría con su familia. También me contó del bochorno que pasó al ser descubierto por su madre besando a su mejor amigo… cuando al decirles a sus padres la verdad su papá lo sacó de la casa y le aventaron sus pertenencias por la ventana… dejándolo totalmente en el abandono…

Pero…. Aunque había perdido a su familia, aunque ya no tenía a nadie más… en su interior sintió las ganas de superarse, de seguir adelante y llegar a ser alguien importante valiéndose por si mismo… buscó trabajo en cualquier lado, de lo que sea, pero honradamente… él quería, y esa sigue siendo su motivación… regresar algún día a su casa y demostrarle a sus padres lo que pudo hacer solo… para ver si así se les pasa un poco la vergüenza de tener un hijo homosexual…

Hace cerca de cuatro años que llegó a Seúl, con el dinero que había ahorrado… para poder asistir a una de las universidades más prestigiosas de Corea… todo, por cuenta suya… a base de su esfuerzo. Aquí conoció a Changmin, por unos anuncios en el que rentaban un departamento para estudiantes.

-No llores… no era mi intención que te pusieras así…- Siempre he sido muy sentimental y me sentía tan conmovido con la historia de Yoochun que no pude evitar derramar unas lagrimas.

-Perdón…

-¡Ya se!… te contaré una parte de la historia que seguro te causará gracia.-Sequé mis lágrimas y lo miré extrañado, no pensé que hubiese algo gracioso en una historia como esta.- Bueno, aunque te resulte difícil de creer… hubo un tiempo en que estuve enamorado de Changmin.

-¡¿Qué!?

-Jaja lo ves… incluso a mí me causa gracia ahora… En ese tiempo era tan ingenuo e inocente que caí vilmente ante las tácticas del conquistador de Shim Changmin.-No puede ser, jamás ni en un millón de años me lo hubiera imaginado.

-Changmin-shi… es de ese tipo de personas…-No fue pregunta pero es que aun estaba muy impactado, y dije lo primero que se me vina a la mente.

-Si, y no se le escapa nadie… creo que tú y Jaejoong deberían de tener cuidado… su debilidad son los chicos lindos.

No… no puede acercarse a Jaejoong… no es justoyo ya esperado tanto tiempo por ser el dueño de sus sonrisas, por poder tocar sus labios, su piel… por ser la persona que ama. Changmin no puede hacer eso, no puede… deseo con todas mis fuerzas que no lo haga ya que, no estoy seguro de que Jaejoong vaya a negarse.

-Yoochun… podrías… ¿podrías soltar mi mano?... es que me hace sentir raro.-Le dije a Yoochun tartamudeando un poco cuando me di cuenta que nuestras manos seguían unidas.

-Ah, si jeje... mira, ya hemos llegado.- soltó mi mano un poco apenado y después señaló al edificio que estaba a unos metros de nosotros.- ¿qué te parecería una competencia para ver quien llega primero al apartamento?

-¡No!~… yo aún no se muy bien cual es el nuestro… ¿y si me pierdo?

-No te perderás… solo tendrás que seguir mi espalda para saber dónde es.- Y diciendo esto empezó a correr.

-¡Hey! No seas tramposo ~


JUNG CORPORATION
[Punto de vista Kim Jaejoong]

Mágicas.

Esa es la palabra que usaría sin dudar para describir mis horas con Yunho. La suerte estaba totalmente de mi lado el día de hoy, ni si quiera yo había prevista la posibilidad de compartir oficina con Yunho y estar, literalmente, todo el día con él.

Lo mejor fueron la infinidad de veces que lo descubrí mirándome… encontraba tan divinas sus expresiones de vergüenza cada vez que me acercaba mucho a él… Lo estoy logrando, lo sé… Sé que está cayendo en mis redes.

¿Cómo no iba a hacerlo? Si todo yo… todo lo que soy, ha sido para lograr tener las cualidades que a él tanto le gustan… que no puede resistir.

Salí de la oficina pesadamente… si por mí fuera trabajaría día noche con tal de tenerlo a mi lado, de verlo deseándome… de acercarme cada vez más a mi venganza… pero desgraciadamente tenía que marcharme y esperar hasta que llegara un nuevo día… ahora, las noches serán eternas.

Cuando estaba en la puerta del edificio me detuve a propósito… fingiendo buscar algo en mi pequeño maletín… en realidad solo quería hacer tiempo para que Yunho me alcanzase y quizás, con la suerte que he tenido hoy, se ofrezca a llevarme a mi casa… aunque sé que ya estaría deseando mucho con eso, no pierdo nada con intentarlo.

-¿Perdiste tu billetera, niño?- Jaque mate… Era él, con su varonil voz y con su impecable traje de oficina, detuvo sus pasos justo a un lado de mí.

-¡Que no me llames así! … habíamos hecho un trato…-Le reproché tiernamente, endulzando mis palabras para que sonaran inocentes… al estilo Junsu pero un poco seductor a la vez.

-Ok, Jaejoong…- Despeinó mis cabellos, sonriéndome de esa manera que solo el sabe… de esa forma que hacía desmayar a montones de chicas en sus conciertos. No te das cuenta, Yunho… pero estás cayendo, ya has dado un paso en el primer día… cuando tomaste mi mano y no querías soltarla… ya no podrás escapar.

-¡Yunho!-Justo cuando pensé que mi plan de esperarlo despistadamente en la salida del edificio sería un éxito llegó ‘ella’.

En el momento en que la vi supe que su presencia me traería problemas… la forma en que lo miraba, cuando se aproximó a él y tomó sus manos con tanta delicadeza… en ese momento sentí que en mis venas circulaba fuego y el sentimiento se tornó peor cuando él se inclinó levemente y rosó sus labios con los de ella… Por un momento pensé que no sería capaz de controlarme… apreté mi puño con fuerza y me recordé a mí mismo que no podía echar las cosas a perder… no ahora, si correría sangre… éste no era el momento.

-Oh, ¿quién es este muchacho tan lindo?-Le preguntó ella a mí Yunho. Díselo Yunho… dile quien soy y que recuerde bien mi nombre porque a partir de ahora seré el calvario de su relación.

-Es el chico del que te hablé ayer…Mi nuevo asistente: Kim Jaejoong.- Y futuro amante, te faltó agregar. Nunca antes me había costado tanto fingir una sonrisa, casi sentía que los músculos de mi cara se acalambraban.

-Pero no mencionaste que fuera tan bonito.- Si, y mucho más que tú, por si no lo habías notado.

-¿Cómo se supone que mencionaría algo así?... En fin, nos vemos mañana Jaejoong.- Se puso nervioso, lo sabe… sabe que en el fondo le parezco atractivo. Empezó a caminar llevándosela casi a rastras.

-Adiós Jejoong.shi… ¡a mi nombre es Sunye!- Amable… demasiado para su propio bien.

La muy tonta no se dio cuenta que Yunho ni siquiera se atrevió a presentármela… mala señal para ella buena para mí.

Después del trago amargo de conocer a ‘ella’… regresé solo al departamento. Pensando en mis próximas jugadas, planeando así como planee todos estos años. Aún había algo que debía hacer… que no tiene nada que ver con Yunho pero es igual de importante.

Estaba tranquilo, cosa que me es difícil de creer en mí después de haber conocido a mi rival… o tal ves sea eso, que la considero muy poca cosa para ser mi rival… Está aceptable, podría decirse que por arriba del promedio pero… Yunho se merece más que eso y confío en su inteligencia.

Llegué al departamento y las luces estaban apagadas, yo ya tenía mi llave así que no tuve que molestar a nadie al entrar. Me parece extraño que estén dormidos tan temprano, que personas tan más patéticas.
Entré a la cocina y tomé una manzana, no comí en la oficina… ¿a quién le da hambre teniendo a Jung Yunho a tu lado?... Después, fui al cuarto que comparto con Junsu e inmediatamente cuando crucé la puerta lo vi sentado en su cama, pretendiendo leer un libro… pero yo sé que solo estaba esperando por mí…Junsu, ¿por qué sigues permitiendo esto?

-Hola, ¿qué tal tu día?-Le pregunté casualmente, sentándome a su lado mientras le daba una mordida a mi manzana roja.

-¡Excelente! ¡Ya tengo empleo!...- ¿Y por eso tienes que gritar tanto?... Pudiste decirlo de una forma más silenciosa y aún pude haber captado el mensaje.

-Que bien.-No pregunté detalles, la verdad no me interesa.

-Y a ti… ¿qué tal te fue?- Exactamente la pregunta que estaba esperando… llegó la hora de fingir de nuevo.

-No muy bien… sabes, Yunho es una buena persona, ahora que he convivido con él me pregunto si debería de seguir con esto…- Junsu, si no caes en esto, a partir de ahora te tendré más respeto.

-¿De verdad?-Sabía que me creería… ¿cómo es posible que siga confiando en mis palabras?

-Si… además el tiene novia y parece muy amable…

-Entonces… ¿ya no piensas vengarte?...

-No lo sé, he planeado tanto tiempo mi venganza hacia esos que me hirieron que solo estaría tranquilo si puedo vengarme… incluso aunque uno sea del mismo Yunho.

-¿A qué te refieres?- sus pequeños ojos brillaban como nunca, esto es lo que buscaba.

Di otra mordida a mi manzana, de la manera más seductora que me fue posible… lamí mis labios y llevé una de mis manos a la cremallera de su pantalón… con solo ese per da acciones Junsu se estaba poniendo morado evitar respirar, para que no notara su agitación.

-A que, si no puedo vengarme de Yunho… con vengarme de Yoochun estaría más que satisfecho y regresaría a USA.- Lo recosté lentamente y él dejaba que o hiciera lo que quisiera, empecé a besar su cuello y pasé mi lengua muy cerca de sus labios.

-¿Qué quieres que haga?- Muy bien Junsu, muy bien… no esperaba menos de ti… mi mascota fiel. Sonreí y le mordí una vez más la manzana, arranando un pedazo grande… sosteniendo un extremo con mis dientes se lo ofrecí a Junsu, quien estando como hipnotizado acepto… se lo di de ese modo, cuidando que nuestros labios no se rozaran. Me senté sobre sus caderas y me incliné sobre él recargando mis manos en el colchón a ambos lados de su cuerpo.

-Quiero… que seduzcas a Park Yoochun