“Escuché los gemidos frustrados de tu Joongie por el teléfono, eso es todo.”
Por detrás del estante, Jaejoong no quitaba la vista del muchacho que estaba a unos pasos de él, el pequeño Choi Minho quien estaba ocupado contando monedas del cajero automático, tarareando una melodía y borrando la sonrisa que volvía a aparecer en sus labios. Ciertamente había algo diferente en la forma con la que golpeaba repetidamente sus dedos contra la mesa y movía la cabeza de adelante hacia atrás. Jaejoong no podía evitar sentir una leve sospecha de que esto tenía algo que ver con Changmin.
¿¿Habría pasado algo después que volvieran del puesto de comida rápida??
Jaejoong examinó cada centímetro de tela y accesorio que cubría el cuerpo del muchacho. Bueno, nada podría indicar que no hubiera vuelto a casa anoche. Al chico le encantaba estar impecable y a la moda, pero de ningún modo podía poner tanto esfuerzo en vestirse como hoy si acababa de tener una pijamada sorpresa.
De cualquier forma, Jaejoong decidió abandonar las sospechas y concentrarse en cómo encarar a un monstruo aprovechado llamado Shim Changmin, aquél ante el cual no podía evitar sentirse un poco cauteloso. El más joven lo había cogido in fraganti comportándose como una adolescente.
Admito que ayer todo estuvo mal.
Después del embarazoso incidente Jaejoong se fue a casa como espástico, su mente volaba a ninguna parte, ni siquiera se percató cuando la lluvia empezó a caer con fuerza hasta que un ebrio asalariado le palmeó la espalda y le dijo, “Debes estar enamorado.” (A lo cual Jaejoong chilló, “¡¡Suficiente, viejo!!”) Esa misma noche, Jaejoong prendió casi toda su colección de velas aromáticas, practicó Yoga vía DVD por cerca de 20 minutos, se engrió a sí mismo con un baño tibio y un té de manzanilla caliente, y sí, ahí venía la tan añorada paz en su mente.
…Pero a decir verdad, se asomó a ver el celular de Changmin por una última vez antes de dormir y recordó una cosa.
No había ninguna foto de Yunho y él abrazándose el uno al otro, aquella que Changmin tomó la primera vez que visitó su apartamento. ¿Por qué Changmin borraría la foto de Yunho y Jaejoong abrazándose, mientras conservaba la claramente más embarazosa foto del beso?
Estaba a punto de ‘gelatinizarse’ pero se abstuvo de esto sacudiendo su cabeza, apretando los dientes y poniendo una firme y, peligrosa cara en su lugar.
Ese niñato libidinoso, ¿cómo se atreve a aprovecharse de mí así después de ignorarme por días, tratándome como una especie de germen? Tan creído de sí mismo, ¡¿piensa que me he enamorado de él?! Eso fue acoso sexual, ¡por Dios santo! ¡Acoso sexual! Si acaso hace lo mismo otra vez juro que le sacaría la mierda a patadas, le daría un puñetazo que nunca olvidaría y lo estamparía duro contra la pared, arrasaría ese esbelto cuello sin ninguna contemplación de modo que no pueda librarse de esas marcas rojas un día después, abusaría de la pecaminosa humedad de su boca y lo dejaría sin aliento y solo tomaría aire tanto como para que balbuceara mi nombre mientras clavo mis uña—“
“Hyung, ¿por qué estás sonriendo?”
¿Lo estoy?
“No lo estoy. Hay una ampolla en mi encía.”
Un sereno tú, exacto lo que un adulto necesita ser. Así se hace, Kim Jaejoong.
En realidad su cuerpo se sentía terrible en esos momentos, gracias a la lluvia mencionada anteriormente se levantó con dolor de cabeza y todo dándole vueltas. Maldita sea la botella vacía de analgésicos, pensó. Para empeorar las cosas, su garganta comenzaba a arder y doler, si no fuera debido a su extraordinario espíritu de trabajo y al temor de que el Changminho lo hiciera bajo la mesa del cajero mientras Jaejoong estaba fuera, no habría venido.
“¿Ampolla? Mmm deberías probar esa medicina china, se llama...¡¡Oh Changmin Hyung!!" El pequeño Minho saludó alegremente con dirección a la entrada como si la estrella del día abriera la puerta de cristal.
“Buen día Min-ah…“ El moreno le devolvió el saludo.
El aliento de Jaejoong se detuvo cuando Minho corrió hacia Changmin y se abalanzó sobre él para ser cariñosamente despeinado por el mayor. Cómo desearía ser un despreocupado adolescente una vez más, solo para llamar a la versión adaptada de modelo 'hyung' y actuar aegyo sin echar su orgullo por la borda.
"¡Feliz Cumpleaños, Hyung!"
Jaejoong maldijo como no tenía ni pista acerca de esto. No era de extrañar que Minho se viera tan alegre ese día.
"¡Lo recordaste!" Changmin exclamó felizmente.
"¡Por supuesto! ¡Y tú me debes un cheesecake!"
Incluso el genuinamente inocente tono de Minho empezaba a molestar a Jaejoong, por lo que decidió tomar una considerable distancia de la melosa pareja. Eriko llamó a Minho no mucho después de eso, dejándolos solos a Changmin y a él lado a lado, sin nada que hacer porque ni un cliente se había asomado siquiera para echar un vistazo.
Jaejoong ya suponía que el más alto simplemente lo ignoraría de nuevo, pero ¿qué podía hacer? De repente ¿quejarse por el incidente de la palmada en el trasero como una virgen amargada?
"Oye." Jaejoong nerviosamente agarró un trapo y trató de regalar una sonrisa sincera mientras decía, "Feliz cumpleaños."
Apoyando su cadera en el estante, Changmin cruzó los brazos sobre su pecho y examinó al más bajo de la cabeza a los pies con el ceño fruncido. "Gracias." contestó y se alejó.
¿¡Por qué demonios pone esa actitud!?
Sintiéndose herido y molesto, Jaejoong abandonó la determinación de establecer una constructiva interacción con el más joven. El joven pasó el resto de sus horas de trabajo en silencio a lo que Changmin respondía con igualdad de trato. Ni siquiera dijo nada cuando Changmin compró para Minho y Eriko una caja de cheesecakes a la hora del almuerzo mientras no le ofrecía nada a él. Solo se sentía como un extraño, eso era todo.
Finalmente eran las 3pm-el final de su turno. Inmediatamente después que los empleados del siguiente turno vinieran, una Limousine negra paró justo en frente de la tienda, de la que salía una silueta con camisa blanca Hugo Boss y bolso de mano LV. Si Jaejoong no estuviera loco por todo lo que fuera de marca, no prestaría atención al tipo antes de que entrara a la tienda. Desafortunadamente lo estaba, por lo que se sintió menos sorprendido de que dicho tipo fuera Junsu.
"Aish." Fue la única reacción de Changmin al ver a su ex-jefe darle una visita.
Jaejoong pretendió estar ocupado con su trabajo pero sus oídos estaban atentos.
¿Por qué demonios estoy celoso de Minho otra vez? Aquí viene la reina.
"Me dieron ganas de una lubina caribeña en salsa de langosta. Conozco el lugar perfecto." Junsu caminó hacia Changmin, haciendo caso omiso de los cuchicheos y miradas de los otros clientes ante su notable presencia y escandalosa voz. Changmin rodó los ojos y siguió haciendo su trabajo que consistía en escribir algo. "¿Y?” Preguntó retóricamente.
“Y tú me acompañarás ya que es tu cumpleaños.”, demandó el Ricky Ricón. Changmin gimió pero no pareció rechazar la petición, ya que tomó una billetera entre sus manos y contó el efectivo en su interior.
“No, no…yo pagaré.” Junsu le dio un leve manotazo a la billetera. “Ves cuán considerado soy hacia tu bajo salario.”
“Conociéndote, hay algo detrás de esto.” Changmin entrecerró sus ojos sospechosamente.
“Bueno…” Junsu hizo una pausa por un momento mientras le echaba un vistazo a todo el establecimiento y finalmente sonrió cuando sus ojos se cruzaron con los de Jaejoong. Sin siquiera molestarse en decir hola, se dirigió hacia él apresurado y sin rastro de modales apresó el brazo de Jaejoong con el suyo como si el mayor no fuera un ser humano, causando que la mareada cabeza de Jaejoong diera vueltas incluso más rápido. “Él vendrá también.”
“¿Eh…? ¿Ah...?” En medio de su creciente fiebre Jaejoong no captó la situación realmente, pero se sintió incómodo cuando el desvergonzado rostro de Changmin mostró descontento.
“Entonces paso. Ve con él.” Changmin preparó su bolso, negándose a incluso dirigir su mirada en Jaejoong.
“No-no yo paso, No me siento bien de cualquier modo.” Jaejoong sostuvo con total naturalidad, pero ¿quién era Junsu para creer eso?
“Oh vamos imbécil no seas un idiota. ¿Qué hay de malo con que Joongie Hyung venga con nosotros?”
“Es peor que una patada en el culo.”
Bien. No solo su cabeza daba vueltas, ahora los ojos de Jaejoong comenzaban a actuar extraño.
¿Por qué tenía que decir eso?
“Oh vamos, ¡no hables como si fueras el tipo más agradable sobre la tierra!” Junsu insistió.
“Como sea, simplemente no lo soporto.”
“Au. Cuidado con esa boca podrida, ¡¡él es mi nuevo amigo!!”
“Como dije, puedes ser amigable con quien quieras, yo paso maldita sea.”
Jaejoong no se dio cuenta que la sonrisa se ampliaba en el rostro de Junsu a lo largo de la conversación, ya que su entorno desapareció gradualmente de su enfoque visual. La última cosa que sintió fue una mano sacudiendo su hombro y una voz llamándolo por su nombre.
Changmin, eres un tremendo bastardo…
*
*
Los ojos de Jaejoong se abrieron de mala gana ante los murmullos sordos que provenían de algún lugar no muy lejos de la cama en la que estaba acostado con la manta cubriéndolo hasta la barbilla. Con un gran esfuerzo ajustó la visión borrosa la cual pronto tomó la forma del escenario de su propia habitación de apartamento, la alta temperatura y el vértigo hacían su cabeza arder no dejándolo reaccionar como él pensaba que debiera. Se acurrucó un poco a su izquierda, luchando contra el punzante dolor penetrando su sien debido al pequeño movimiento, y vio una familiar espalda que pertenecía a un tal Changmin, susurrando cosas que no podía oír apropiadamente al teléfono.
Jaejoong alzó su mano para frotar sus ojos que escocían, los sonidos de la fricción de la sábana hicieron que el otro notara que estaba consciente y se diera la vuelta para sentarse en una silla justamente puesta junto a la cama.
"Está despierto. Te veo." Changmin colgó el teléfono.
Jaejoong quiso interrogarlo, cuánto tiempo había dormido y quién lo trajo allí, mas la seca y adolorida garganta no permitió que su voz saliera.
"Aquí tienes." El más joven le ofreció un vaso de agua, ayudándolo a beber sirviendo de apoyo para su nuca.
El flujo de agua tibia le hizo sentir que recuperaba la vida poco a poco. Habiendo Jaejoong terminado el contenido, el más joven puso el vaso sobre la cabecera de la cama. El enfermo dejó caer su cabeza de vuelta a la almohada y se retorció de dolor el que parecía atravesarle el cráneo. Incluso en el confuso escenario él todavía estaba arreglándoselas para percatarse que Changmin estaba observándolo, descansando la barbilla en la palma de su mano con el codo apoyándose en un punto cercano al hombro de Jaejoong.
"¿Tú me trajiste aquí...?" Jaejoong preguntó, su voz menuda y rasposa.
El más joven dio unas palmaditas en la cabeza de Jaejoong mientras se levantaba de su silla y volvía después de un rato con un termómetro. Insertó el instrumento en la boca de Jaejoong, algo a lo que el mayor estaba demasiado débil como para protestar.
"39. Hyung, Puedo cocer un huevo en tu boca." Changmin depositó el termómetro dentro de otro vaso y reposó sus brazos doblados sobre la cama mientras se inclinaba hacia adelante solo para cernirse sobre el casi desfallecido rostro del mayor, observándolo de más cerca. Jaejoong pensó que era debido a la fiebre el imaginar al pintor dibujando una dulce sonrisa en sus labios.
Shim Changmin y dulzura juntos eran iguales a todo el infierno desatado.
"¿Me desmayé?" Jaejoong preguntó lo obvio.
Changmin asintió, su barbilla seguía descansando en la palma de su mano. "Y hablaste dormido." añadió.
El sonrojo de Jaejoong no era evidente en su ya tez rojiza, gracias a la fiebre. "Ah."
"Mencionaste mi nombre." Una sonrisa se abrió paso por el rostro del pintor. "De una...forma realmente muy emocional."
Oh Dios.
No había forma que Jaejoong fuera capaz de negarlo todo empezando por esto. Sintiendo la enorme vergüenza arañando su cara, tiró de la cobija sobre su cabeza. El pintor se echo a reír ente tan extraña reacción y trató de echar abajo el improvisado muro pero Jaejoong la sostenía con fuerza.
"¿Qué dije?" su voz sonaba apagada por debajo de la manta.
"Dijiste que era un hijo de puta y que me querías muerto."
Oh.
La sonrisa de Changmin se hizo aún más amplia cuando la enrojecida cara de Jaejoong se deslizó fuera de la cobija y desvió la mirada, al ver un tazón de avena sobre el escritorio.
"Debes comer." Changmin sugirió.
El mayor sintió la resquebrajante sensación royendo su pecho por solo Dios sabe cuántas veces ya al mismo tiempo que Changmin le llevaba una cucharada a la boca. Separó sus carnosos labios tímidamente y dejó que la avena caliente se deslizara dentro de su boca, de una sola vez. "¿Tú lo hiciste?" preguntó con incredulidad.
"Hmm. Junsu me ayudó. Su tan esperada lubina fue cancelada, ya sabes.”
Jaejoong se sintió un poco incómodo. No dijo nada mientras algunas cucharadas eran llevadas a su boca una tras otra a un ritmo constante y persistente. De alguna manera no le sorprendería que en realidad fuera la fiebre la que le estaba jugando una broma, haciéndole creer que Shim Changmin le daba de comer. El mencionado chico incluso le dio a Jaejoong algunas pastillas después y se llevó el tazón a la cocina para lavarlo.
¿Es un sueño? ¿Estoy tan desesperado?
Cuando Changmin se paseó a su alrededor para sentarse a su lado, Jaejoong lo miraba inquisitivamente.
"¿Por qué estás haciendo esto?" preguntó.
"Es divertido verte miserable." Changmin apartó un dorado mechón de cabello de la frente de Jaejoong –este último podría jurar que el simple gesto incrementó su fiebre- miraba al par de ojos que nunca podría descifrar y los suyos poco a poco comenzaban a escocer al mismo tiempo que una lágrima se abrió paso por su mejilla.
Cómo deseaba huir de prisa y esconderse, pero no había forma que él pudiera hacer eso en ese momento.
" Hyung...¿lloras?" El dolor solo se hizo más fuerte cuando Changmin extendió la mano para tocar el rastro de la lágrima como si estuviera tratando de probar que era real. "¿Pasa algo malo?"
"Mi cabeza duele." Evitando discutir, trató de cubrirse con la cobija de nuevo pero Changmin atrapó su muñeca.
"¿Dónde…?"
"Mi cabeza."
"Muéstrame." El pintor entrelazó los afiebrados dedos con los suyos tan fríos y llevó su mano a la cabeza de Jaejoong, a fin de hacerlo señalar la localización exacta. El mayor quitó la mirada mientras señalaba cierto punto en su sien con vacilación.
"Aquí."
Sus latidos se detuvieron cuando Changmin se inclinó sobre él para estar más cerca y depositar un suave beso allí. "¿Dónde más...?"
Las lágrimas no hacían más que caer con mayor fuerza. Jaejoong cerró los ojos a fin de detenerse pero falló miserablemente. Sus hombros subían y bajaban nerviosos. "Aquí..." señaló a sus ojos.
Changmin besó los párpados cerrados de Jaejoong. "Sigues llorando." Comentó como algo muy natural, su expresión era ilegible.
Jaejoong retiró su mano, liberándola del agarre de Changmin y ocultándola bajo la manta. Contuvo la respiración, mordió sus labios, exhaló lentamente, pero el tibio líquido seguía emergiendo tan doloroso como agujas insistiendo en burbujear desde lo más hondo de su pecho. Pudo ser debido a la fiebre o al joven que ya estaba simple y sencillamente enfermo de todos esos misterios provenientes de un tal Shim Changmin que finalmente murmuró entrecortadamente "Mi pecho duele..."
"...Travieso." Una sonrisa creció en los labios del pintor mientras plantaba un beso en la parte más baja del pecho de Jaejoong. La suave presión y la forma impresa de sus labios fue suficiente para que las mariposas en su estómago revolotearan desenfrenadas, no importando cuánto separara la tela sus labios de la piel de Jaejoong. Solamente deseaba poder caer en la inconsciencia para dejar de mostrar más acciones que solo degradaban lo que le quedaba de dignidad.
"Ahora duerme. Mañana no es nuestro turno."
"No te comprendo..." Jaejoong le dijo entre refrenados sollozos. "¿Por qué es tan difícil predecir tus acciones? ¿Qué hay dentro de tu cabeza?"
"Duerme, Hyung. No pienses demasiado." Changmin pasó sus dedos por el rubio cabello, sus pulgares masajeando el espacio entre los ojos de Jaejoong de forma tan embriagadora, parecía arrullarlo para que durmiera.
Puede ser que este sea solo un sueño después de todo…
*
*
Era ya de noche cuando Jaejoong se despertó por segunda vez con menor temperatura y la cabeza más ligera, tan ligera que casi saltó de su cama recordando lo que había sucedido.
Shim Changmin lo trajo hasta allí. Shim Changmin le dio de comer. Shim Changmin lo besó.
Sin aliento, dejó caer su cabeza de vuelta a la almohada, y se dio cuenta que dos cosas estaban puestas a su lado. Una de ellas era un pedazo de papel, otro era el conejo de peluche. más bien de trapo, Joongjoong. No sabía la razón por la cual su corazón latía desenfrenado al pensar que Changmin podía haber visto el peluche.
Escrito en el papel estaba un mensaje corto:
Recupérate pronto. Encontré a este pobrecito en el suelo, por cierto. Déjame conservarlo si estás pensando en tirarlo.
Jaejoong arrugó el papel, sintiendo la oleada de una inexplicable calidez y nostalgia por todo su cuerpo.
¿Le gustan los conejitos…? Insignificante coincidencia, pero aún así…
Ahora que pensaba en ello, una de las imágenes en el celular de Changmin era la de un conejito…
Espera. ¿¡Dónde está!?
Jaejoong se levantó de la cama y examinó cada rincón de su cuarto en pánico, solo para darse cuenta que Changmin no había traído su bolsa con él, mientras que el endemoniado celular estaba dentro. Ni siquiera pudo imaginar el caos que se haría si acaso Changmin encontrara el teléfono.
Le echó un vistazo al reloj -8.45 pm. Serían 15 minutos en taxi, tal vez llegara antes que los empleados cerraran la tienda. Se puso una camisa de lo más simple y un par de jeans antes de tomar algo de efectivo del velador y se fue.
*
*
Al ver que las luces de la tienda estaban encendidas, Jaejoong suspiró aliviado. Examinó la tienda en busca de Eriko o alguno de los empleados de diferente turno, pero no pudo encontrar a ningún otro que no fuera…
“¿Hyung…? ¿Por qué estás aquí? Sigues enfermo.”
Él, haciendo su previamente interrumpido trabajo en la mesa del cajero fuera de sus horas de trabajo. Cerca a sus brazos estaba el bolso de Jaejoong, pero el joven de cabellos rubios automáticamente posó su mirada en los menos importantes pero hermosos labios en lugar de a sus pertenencias.
Dale las gracias, toma tu bolso y vete, ni siquiera pienses en actuar extraño…
Jaejoong caminó hacia la mesa del cajero en silencio y se detuvo justo al lado de Changmin. Se aferró a su bolso como a un apoyo mental mientras sus rodillas se hacían más débiles solo por causa de su aroma.
Tan impulsivo como era, no pudo evitar que todo el contenido de su mente saliera en palabras. “T-tú lo sabías…” La declaración se deslizó de la boca de Jaejoong.
“¿Saber qué?”
“Que…que estaba jodido por tu causa...” Su voz temblaba. Era demasiado tarde para dar marcha atrás.
Changmin guardó su lapicero en el bolsillo de sus jeans y fingió una inocente expresión de sorpresa. “¿…es esa una nueva forma de declararse?”
Así es.
“¡No te hagas el gracioso! ¡¡Estoy harto de todos esos juegos conmigo!!” Jaejoong empujó a Changmin por el pecho con rudeza, soltando toda la furia que había estado guardando dentro. “¿¡Qué ganas mostrándome tu falsa amabilidad una vez, para luego tratarme como a un extraño!? ¿¡Qué quieres!?"
El menor ni siquiera se inmutó, la fuerza del convaleciente apenas lo afectaba. “Oye cálmate, piensa en tu fiebre…”
Jaejoong le lanzó un puñetazo a Changmin pero este lo bloqueó fácilmente.
“¡Odio ESA actitud tuya!”
“En serio Hyung, ¿estás seguro que gritar así no te noqueará de nuevo…?”
“¡¡¡YA BASTA CHANGMIN, POR FAVOR YA BASTA!!!” El freno ya no servía, Jaejoong estaba fuera de control. “Deja de escapar del tema, deja de enredarlo todo, ¡¡deja de jugar con mis sentimientos!! No soy un maldito juego, ¡¡¡YA BASTA!!!” Sacudió los hombros del más alto, sus ojos desafiantes suplicándole, desesperadamente. “Por favor…”
Changmin cogió las muñecas de Jaejoong y le devolvió su mirada retadora. Jaejoong bajó la suya, incapaz de mostrar al más alto su frustración. Enfadado trató de quitar sus manos pero Changmin las sostuvo por encima de sus hombros.
“Está bien está bien, ya basta…” Suspiró derrotado, liberando las manos de Jaejoong y envolviendo a Jaejoong entre sus brazos, presionándolo más cerca de su cuerpo. El más bajo languidecía y temblaba dentro del abrazo, irradiaba calor. Changmin sentía como si estuviera envolviendo una bomba de tiempo.
“Odio como siempre me humillas…”
"¿Qué más odias...?"
"Odio tus interruptores de personalidad...Odio tus bromas..."
"¿Qué más?"
"Odio tu melosa relación con Minho..."
Changmin lo estrechó más fuerte contra su pecho.
"Odio...como...siempre haces las cosas más difíciles para--"
"Tú también me dificultas las cosas, Hyung... ¿sabes lo sexy que eres cuando estás enojado?"
Jaejoong no podía creer lo que sucedió después. Shim Changmin, en sus cinco sentidos, colisionó su boca abierta contra la de él apasionadamente. Trató de liberarse, a fin de comprobar que Changmin no estaba bajo ninguna influencia, pero la curiosa lengua solo lo forzó para entrar más profundo, asentándose en cada rincón de la boca de Jaejoong. La suave y cálida punta hacía cosquillas en su paladar enviando una descarga eléctrica directo a sus pantalones, sin dejarlo evitar que su boca se abriera completamente, provocando un suave gemido el cual liberó al demonio dentro del más alto. Changmin succionó el labio inferior de Jaejoong, sonriendo satisfecho cuando los gemidos se hicieron incontrolables a medida que ronroneos y jadeos los interrumpían, haciendo parecer al mayor vulnerable y dejado sin aliento, volviéndolo loco. La mano de Changmin desesperadamente buscaba a tientas por debajo de la camisa de Jaejoong, dejando que toda la superficie de esta hiciera contacto con la tibia y sedosa piel de su cintura. La codiciosa e impaciente mano estaba dividida entre tironear del cinturón hasta quitarlo a fin de atormentar la delgada cintura o ascender para reclamar como suyas todas las curvas del torso de Jaejoong, de una vez. Finalmente se aferró a la tela en su espalda, mientras la otra jalaba un mechón de pelo rubio, inclinando la cabeza hacia atrás y revelando un cuello de pálida piel con la cual recrearse.
"Chang...min..." La voz de Jaejoong se hacía ronca entre cortas respiraciones al mismo tiempo que Changmin producía obscenos sonidos al besar su cuello."Nnh...A-alguien puede ver..."
"Buen punto."
Sin separar su boca de la tersa piel, Changmin gentilmente se llevó a Jaejoong al suelo de modo que ambos estuvieran ocultos bajo la mesa del cajero. Dejó que Jaejoong se sentara apoyando su espalda contra la pared, mientras sus delgadas piernas envolvían la cintura de Changmin, dándoles a ambas caderas el acceso para chocar una contra la otra.
Sensuales gemidos se liberaron cuando los dientes de Changmin se hundieron en la piel que cubría su pecho, seguido por un par de agrietados labios succionando un pezón ávidamente.
"Dios, Hyung...Es rosa..." Los ojos de Changmin eran los de un depredador hambriento.
"Nnh...Aah..." Jaejoong ni siquiera notó desde cuando su camisa estaba completamente desabotonada.
"La próxima vez usa una camiseta, será menos fácil desnudarte..."
"Tú bastardo..." Jaejoong se retorcía mientras un molesto dedo hacía lo propio con su descuidado pezón.
"Este bastardo te prende…" El mayor lanzó un pequeño grito cuando Changmin le desabotonó los pantalones y deslizó su mano, frotando su ya notorio deseo. "Quieres la boca de este bastardo aquí abajo, envolviendo todo esto..." pellizcó la punta de su duro miembro.
Eres hombre muerto, Shim Changmin…
Con todas sus fuerzas, Jaejoong empujó a Changmin, haciendo que el último cayera sobre su espalda. No queriendo perder la oportunidad, se movió hacia adelante, apresando la cadera de Changmin entre sus rodillas, sendas manos colocadas a cada lado del más alto.
Ambos jadeaban, sin decir palabra se miraban con ojos llenos de lujuria, ambos reconociendo iguales deseos.
"Golpéame, déjame, y mañana desapareceré totalmente de tu vida." Changmin rompió el silencio. Sus entrecerrados ojos clamaban obscenidades.
"¿Por qué?" La voz de Jaejoong era entrecortada y apenas audible.
"Es la mejor opción."
"¿...Podrías darme otra opción?"
"Quédate quieto, mantén tu lasciva boca abierta como hasta ahora y te tomaré justo aquí, justo ahora."
"...Elijo la tercera opción." Jaejoong se inclinó y estampó su boca contra la de Changmin ferozmente, a lo cual el último solo pudo gemir profundamente como respuesta. Ambos cerraron sus ojos con insoportable placer mientras sus lenguas batallaban una contra la otra por el dominio en un rudo y escandaloso beso. A Jaejoong ni siquiera le importó si Changmin quedaba sin aliento, la humedad era demasiado deliciosa como para ser abandonada. Rompió el beso después de rasgar sin piedad la camisa de Changmin, para pasar su boca por toda la salada y bronceada piel, succionando puntos al azar, dejando marcas rojas.
"Mmmm...Cuál es la tercera opción..." Los párpados cerrados de Changmin se estremecían, disfrutando de los carnosos labios torturándolo. Sus dedos acariciaron el suave cabello de Jaejoong mientras la otra mano clamaba por los rosados y tiernos pezones.
"Esta…" Jaejoong respondió.
"¿Violarme hasta que llore por mi mami...?"
Jaejoong solamente pudo estar de acuerdo mentalmente pero ni se molestó en dar una respuesta. Ver el perfecto cuerpo de Changmin requería demasiada energía ya.
Changmin se levantó un poco, usando sus codos para apoyarse y así poder ver la aterciopelada silueta color de nieve de hinchados y enrojecidos labios, de enrojecidas mejillas a lo máximo que daba su lujuria. Sonrió divertido. Más que un experto, Jaejoong parecía un niño el cual estaba impaciente por disfrutar de su nuevo juguete- sus movimientos eran descuidados, sin experiencia y movidos por el instinto. Changmin juraba que no podía recordar algo que lo pusiera así de duro. Lo entretenía cómo el mayor las veía negras para desabrocharle los jeans. Finalmente se levantó del todo y tomó a Jaejoong por la parte superior de sus brazos, evitando que siguiera violentando su cuerpo.
"Eso es todo Hyung, el tiempo de jugar terminó." Tomó la barbilla de Jaejoong e hizo pequeños círculos con su pulgar a lo que este último solo atinó a quedarse congelado bajo su toque. De la forma más suave reclamó los labios de Jaejoong, solo por un instante antes que su lengua se deslizara seductoramente a lo largo del cuello de Jaejoong, descendiendo hasta su clavícula. "No hay forma en la que estés arriba." Sonrió victoriosamente antes de forzar a Jaejoong a recostarse. El mayor había perdido el poder para defenderse cuando Changmin apresó sus muñecas, clavándolas sobre su cabeza. Solamente podía retorcerse y sin ningún resultado, y ni siquiera movió sus manos incluso después que Changmin las liberara.
Changmin era 6 años más joven, pero su experiencia excedía claramente a la de Jaejoong. A diferencia de las descuidadas acciones de Jaejoong, la forma en la que liberó la endurecida longitud del mayor era la de un experto. Sin asomo de duda, lamió la base y ascendió hasta la punta, succionando la cabeza con impaciencia antes de introducirla por completo en lo profundo de su boca. Jaejoong se retorcía y gemía incoherentemente mientras Changmin balanceaba su cabeza a un ritmo despiadado, engulléndolo dentro del calor abrumador. La cadera de Jaejoong se agitaba hacia adelante, deseando que Changmin lo saboreara por completo. La mayoría de personas ya habría tenido arcadas y habría desistido pero el pintor lo tomaba como si no fuera nada, como si no fuera más que un algodón de azúcar.
“Sshhh…aahh…nnhh…Changmin…”
“Baby, me encantaría oír eso más fuerte, pero podríamos espantar a la gente que pase por…” Changmin selló la boca de Jaejoong con la propia, tornando los agudos gemidos en apagados al mismo tiempo que su mano se apoderaba de la erección, bombeando con ferocidad. El hormigueo de placer se acumulaba en la parte baja del vientre de Jaejoong, en lo más profundo de este, y ya hubiera derramado la pegajosa sustancia en toda la mano de Changmin si no fuera por el maldito tono arruinando la maldita intensidad.
“¿Aló…?”
Y no podía creer como el tipo en realidad cogía el maldito teléfono, descuidando su duro miembro.
“Oh, Junsu…”
Maldita sea. Maldita sea. Maldita sea. Maldita sea.
Al ver la patética necesidad de Jaejoong, Changmin tomó la previamente abandonada erección y comenzó a estrujarla a un ritmo más lento que antes, debido a la concentración dividida. El mayor mentalmente mencionó cada palabrota que había aprendido a lo largo de su vida –maldito, mierda, bastardo, puto, perro, zorra, etc, etc.
“¿Ah? No sé su número, ¿por qué lo necesitas de todos modos…?”
¿¡Cómo puede este puto hablar por el teléfono mientras está haciendo una paja!?
“Espera, le preguntaré. Está aquí.” Changmin formó con la boca la frase ‘tu número’ a Jaejoong, con sus manos aún estrujando su miembro. Este formó la frase ‘jódete’ como respuesta. Volteando los ojos, Changmin se inclinó hacia Jaejoong y susurró amenazadoramente en su oído, “Dime tu número o no iré más rápido…”
Sin tener elección, Jaejoong balbuceó algunos números de mala gana. El listo cerebro del más joven fácilmente memorizó los números y pasó la información por teléfono, antes de presionar más rápido como una forma de gratitud.
Jaejoong cubrió su boca con la palma de su mano muy fuerte para evitar que cualquier sonido saliera, al mismo tiempo que se venía, Changmin cortaba la llamada. Mientras el mayor tenía dificultades para ajustar su irregular respiración, el menor limpiaba su mano en un papel sin usar con total indiferencia, ni siquiera quitaba sus ojos de la pantalla del celular. “¿Por qué diablos Junsu preguntó tu número…?”. E incluso añadió más sal a la herida al manifestar su duda.
Jaejoong jadeaba exhausto, si solo le quedara un poco más de fuerza, cachetearía al bastardo y se iría.
O tal vez no, eso no aliviaría el dolor de todos modos.
Esto no es lo que quiero…
Ahora que la lujuria había aminorado, lo envolvía un vacío inmenso. Él quería a Changmin por entero, su atención, su verdadero ser, su corazón. Lo quería sinceramente como era, no como una herramienta para satisfacer sus hormonas.
Aún así sabía, que por las siguientes horas Changmin simplemente actuaría como si nada hubiera pasado, y eso sería lo más lejos que podría llegar.
“Lo siento…” La voz de Changmin flotaba en el aire al mismo tiempo que ambas respiraciones se calmaban...
Jaejoong cerró la cremallera de sus pantalones y trató de alisar un poco su arrugada camisa, sus piernas aún temblaban. La repentina declaración le sorprendió un poco. “…No lo hagas. Lo disfruté de todos modos.” Mintió.
“No..." Las palabras nunca fueron tan difíciles de pronunciar así por Changmin ni tan fácil de leer el dolor en el rostro del mayor. Sin embargo continuó. "No solo por eso...quiero decir…por la forma en la que te sientes, por todo..."
Jaejoong sintió que una gran hacha caía sobre su cabeza, partiendo su corazón en dos. Sabía de lo que estaba hablando el pintor.
Ambos sabían de lo que estaban hablando.
“Entiendo…” unas cuantas lágrimas encontraron su camino desde los ojos de Jaejoong mientras él desesperadamente trataba de apartar la mirada. “Bueno, al menos lo aclaraste finalmente…gracias.”
"Hyung, no llores…” Como un acto reflejo, Changmin alzó su mano y trató de secar el tibio líquido, pero Jaejoong no lo dejó.
“P-Por favor…no me toques…no lo hagas más difícil para mí…”
“E...es mi culpa…”
“Ya basta. Está bien. Tú trataste de terminar con todo esto pero yo me empeciné en hacerme el puto, ¿recuerdas?"
“Hyung, me preocupo por ti, pero..."
Jaejoong se negó a oír el resto. Una razón para complicar la situación era lo menos que él necesitaba. Tomó su bolso y escapó, dejando todo revuelto exactamente como siempre hacía.
*
*
*
La primera imagen que saludó a Changmin en su cuarto de apartamento fue Junsu, lamiendo un chupetín/una piruleta.
Grandioso.
El más malo de todos los malos que ha tenido la humanidad no dijo nada mientras su (literalmente) compañero de cama azotaba la puerta, arrojaba su bolso, pateaba una lata vacía de Coca Cola, y dejaba caer su cuerpo sobre esta.
"Algo está molestándote." Comentó finalmente.
"Oh grandioso Trasero de Pato ahora puedes leer mentes, oh wow."
Junsu ignoró el sarcasmo y se sentó cerca al cuerpo sin vida. Una botella de licor y un vaso vacío estaban entre sus manos. "Tú estás más que sexualmente frustrado." Levantó la solapa de la chaqueta de Changmin para ver la parte de su camisa a la que le faltaban botones.
"Kim Junsu, por favor. Estoy cansado."
Junsu vertió el líquido marrón claro en el vaso. "Lo sé. Es difícil para ti. Así que vamos a hacer esto y ser honestos, ha pasado un tiempo."
Changmin produjo un alto gemido que mostraba total desacuerdo, pero se levantó y sin embargo se tragó el contenido del vaso de un sorbo.
[Después de 10 minutos]
"Así que, por lo que parece interrumpí una importante sesión de intercambio calorífico."
"Lees la mente un montón hoy día."
"Oí los gemidos frustrados de tu Joongie por el teléfono, eso es todo."
"Oh."
"¿Más bebida?"
[Después de 15 minutos]
"Conociéndote, una simple llamada telefónica no devolvería tus excitados pantalones a su lugar. ¿Qué pasó?"
"Cordura. Honestamente debería agradecerte por esto."
"¿Por qué?"
"Si tu llamada no me hubiera traído de vuelta a la realidad me lo habría tirado justo ahí. Duro. Seco."
"No comprendo."
"Es complicado."
"Aquí, bebe más."
[Después de 20 minutos]
"Ya veo. Así que al final le diste una paja sin corazón."
"No tuve elección ¡¿está bién? No podía dejarlo así, y aún así ¡no se suponía que debiera seguir el juego!"
"¿Por qué?"
"¡Porque sería un juego y eso es todo! ¡¡Él quiere más que eso!!"
"¿Y? No actúes tan puro como si esos chicos que te tiraste y luego botaste nunca hubieran existido. Ellos se hubieran sacado los ojos por tu amor y aún así no te importó. ¿Por qué Joongie es excepcional? No entien-"
"¡¡¡TE ODIO!!!"
"Cállate y bebe de esto."
[Después de 25 minutos]
"Déjame adivinar el meollo del asunto en esta novela rosa, tú eres un inútil y yo tengo sueño."
"Mmmm…, mmmm..."
"El típico. ‘¿Lo amo pero le temo al compromiso?'"
"¡¡Errorl!!"
"¿Al principio planeé tomar ventaja de él pero perdí la determinación a lo largo del camino?'
"¡¡Error!!" .
"Era una broma, ¿no sabía que lo afectaría de esa manera?"
"Más o-maaaaas o meeeeenos"
"Yo....Espera. No puedo pensar en nada más. Dios, solo bebe de la botella, ¿si? Abriré otra."
[Después de 30 minutos]
"¡¡¡NO PUDE DETENERME, JUNSUUUU!!! ¡¡NO PUDE CONTROLARME!! SOY ADICTO A SUS PUCHEROS, SU CARA MOLESTA, ERA IRRESISTIBLE, ¿¿¡¡Y QUÉ HICE!!?? LO COMPLIQUÉ, ¡¡Y TARAAAA!! ¡¡LO HICE LLORAR!! ¡¡¡ODIO VERLO LLORAR!!! ¡¡LO ODIO!! ¡¡LO ODIO!! ¡¡¡LO ODIO!!!
"DEJA DE PORTARTE COMO UN GATITO ASUSTADO Y TÍRATELO YA, ¿¡ESTÁ BIEN!?"
“…Eso solo lo herirá...Él quiere mi corazón, Yo no quiero más que un buen polvo."
"Oh por favor, no lo hiciste cuando la oportunidad estaba justo frente a tus narices, tú tomaste en cuenta sus...¿¿Qué es ese nuevo vocabulario?? ¿¿'SENTIMIENTOS'?? ¿Podrías deletrearlo para mí...? Lo amas más de lo que crees, ¡¡Imbécil!!"
"¡¡¡No tengo derecho a amar a nadie!!!"
"¡¡¡Estás siendo un idiota!!!"
"¡¡No puedo dejar de amar a Yoochun!! ¿¡Cómo puedo decirle a Joongie Hyung que lo amo cuando tengo a alguien más en mi corazón!?"
"Así que tienes miedo de hacerle daño."
"Sí pero ya lo hice de cualquier modo. No merezco su amor."
"AL DIABLO LAS LÍNEAS SACADAS DE NOVELAS PARA ADOLESCENTES, ¡¡¡NO TE VAN!!!"
[A los pocos minutos...]
"Idiota. Buscas la sombra de Yoochun y la de esa persona imaginaria en tus pinturas influenciadas por el ácido, mientras te niegas la verdadera oportunidad de ser feliz. Es tu culpa."
"Hmmm...*hip* ambos son unos bebés llorones y se enojan con facilidad...*hip*"
"¿....ah?"
"Y...Nnhh...ponen unas caras de concentración preciosas...*hip*"
"¿¡Quién y quién!?"
"Joongie Hyung y...ese Hyung que olvidé..."
"Espera un minuto...¿Recuerdas?"
"¿Lo hice...?"
"Acabas de mencionar algo acerca de ese...¿Hyung?."
"Whoaahh...Lo hice...*hip* cuál es el nombre de esta maravilloozzza bebida que me has dado..."
"Cognac."
"Grrrraaandiooosso...."
"...Dios, quítate de encima, imbécil."
XD plz continuen prontito T^T debieron regalar al menos 4 capis por motivo navideño XD jaja ame al final el minnie boracho,raiios quiero lemonnn mass ¬w¬ pero puro lemon pie eh ¬w¬ y changmin gusta de conejitos k sera?XD y los conejos gustan de changmin tambn jojojo xD
ResponderEliminares enserio AMOOOOOOOOO ESTE FICCCCCCCCCCCCC <3333 me lo lei como 2 veces pero tenia que ver la traduccion <3 graxxxiasss!! larga vida a la traductora ^O^!
ResponderEliminaromg esra buenazo ahhh lo he leido 2 veces
ResponderEliminaramoel fico y sus personajes
oh changmin casi te lo tiras yo esperaba eso k haras
te daras cuenta por fin o sufriras ese amor
porfa racciona y olvida a yoochun
oh no puede cierto jae a mi baby jajaja a changmin no utilizes a jae se que lo amas y yoochun dejalo ir ya el te ama y el es tu jae de tus sueños ahhhhh si me emocione me encanto si junsu no marcaba jajaja
ResponderEliminarWiiiiiiiiii uno maaass uno maaas!!!!
ResponderEliminarEsto cada vez se pone mas interesante, gracias por la actualización, espero pronto suban los demás capis.
este fiic esta buenisimo *.* waaaa changmin por fin esta reaccionando waaaaaa cada vez va mas interesante este fic. grax a la persona q lo traduce y gracias por la actualizacion^^
ResponderEliminarawwwwwwwwwwwwwwww ke lindo enserio espero con ansias la continuacion en verdad llorre rei y no c ke mas senti jajajaja.... kyaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminaresta bn kawai tiene un gran contenidoo........lindoo lindo..
Jajajajajajajajajajaja cual es el nombre de esta maravillosa bebida???? sera cabron...
ResponderEliminarAishhhh pochito, parece que Jaejoong no parara de sufrir, en fin!!! ya no comento mas porque no se que dicir..vamos si.. espero pronto otro capo!!!
Gracias x traducirla y a la autora por hacerme reir ^^
estee fic estaaa cada vez mejor!
ResponderEliminaresta genialll!! me encantaaa!
porfaaa qierooo contii.. :D
estaree esperanndoo (:
graciaz a la traductoraa
por su excelente trabajoo! ^^
y a la autora por escribir un fic JAEMIN tan geniaL!!! *-*
Mish'ell c:
Me pregunto cuando lo continuaran... u_u
ResponderEliminarOHHHHHHHH niña no puedes hacernos esto.. estamos esperando ya 3 meses por el siguiente epi.. please ten compasion de nosotros.... publica la continuacion.. pleaseeee-...
ResponderEliminarY mil gracias por traducirlo este relato realment es genial.. :D
Plis, el siguiente capi...ya quiero saber q pasa...ten piedad de las fans de este fic T_T
ResponderEliminarjajajjajajjajajajajajj!! Lol!!1
ResponderEliminardios sme siento muy mal en estso momento s u////u
.....
Hola! no quiero molestar de vdd, pero me dieron ganas de leer este fic otra vez, y quise leerlo en español, simplemente porque... esta bien, no sé porque, pero queria leerlo en español, y creo que hay un pequeñisisisisismo error, al principio del capitulo dice "El pequeño Lee Minho" y creo que era Choi Minho no? xD es un error que cualquiera puede cometer xDD pero por un momento pense "Dios mio! siempre fue Lee Minho y yo imaginandome a Minho de Shinee" pero luego recorde los perfiles de personaje que una vez publico la autora, y recorde que habia una foto de Choi Minho, así que revise el pdf, y me di cuenta de que si era Choi xD
ResponderEliminarBueno, espero no haberte molestado, muchas gracias por traducir los maravillosos fanfics de Umeboshi_heart!
No podré morir en paz hasta que haya final para shimmering blue :/
Gracias! :D
OOH! (soy la misma del post de arriba) y vi que tmbn quieres traducir "Beautiful Dirty Rich" Dios! que hermoso! y "Scut hamsters" Q_Q
ResponderEliminarGRACIAS!
Ahi por Dioa esta a punto de recordar quien es su otro hyung xD Changmin eres la ley cuando estas bebido xD me llega como Junsu sabe darte en tus puntos débiles xD eso me a matado xD
ResponderEliminarwwooooooww Minnie deja entrar a Joongie en tu vida!!!!!!! q emcion esta recordandooooooooooooo kyaaaaaa *o*
ResponderEliminarmuero de risa con junsu!! junto a Min me hacen reir con sus ocurrencias (Y)
Es muy probable que la autora haya cometido el error y yo de maniática lo haya dejado así aunque sabía que estaba mal XD, no es por caída del palto y que me crea perfecta, porque de hecho aún hay muchas correcciones que hacer aquí ;o;, pero de un Lee a un Choi, bueno, de verdad debí haber estado bien volada o de plano Lee Minho se mete en mi cabeza *sal, fuchi fuchi, mucho coreano en mi cabeza*
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