Nameless cap 10

Permanecí en silencio sin moverme, con la mirada clavada en el suelo

-...todo...es mi culpa...- escuche la voz de Chunie muy débil y frágil, pero no quería acercarme, lo que me había dicho antes me lastimó demasiado, claro que no tenía la fuerza suficiente para enfrentarme a el, yo tenía claro mi lugar en su vida.

-...Chunie... tu...no deberías estar de este lado de la puerta...si no con Su...- traté de sonreírle

-¿Jae? – apenas susurró

-Siempre lo supe Chunie...que no soy nada para ti...siempre supe que Su era todo para ti y...-hice una pausa para retomar el timbre firme de mi voz porque se estaba comenzando a quebrar – nunca entendí por qué jugabas con la persona que amabas... - fije la mirada en sus ojos, levante mi mano hacia mi pecho y continué diciendo – yo no soy alguien a quien puedas tomar en serio... - le vi avanzar lentamente hasta quedar cerca de mi, levanto su mano y se posó delicadamente en mi mejilla, donde la acaricio con dulzura.

- Eso no es cierto Jae... soy yo quien no toma enserio nada...es mi culpa que pasará esto, Junsu tiene razón...todo fue por mi maldito egoísmo...lo tenía todo pero no fue suficiente, quería más...y ahora...- su roce casi se detuvo por completo y clavó su mirada en aquella puerta -...ahora no tengo nada...-

Me sentí culpable... si yo no le hubiera dejado llegar tan lejos, esto no habría pasado nunca, era claro que el egoísta era yo, no había miembro más egoísta que yo, Kim Jaejoong.

-Las nueve quince de la noche – por décima ocasión mis ojos se posaban sobre aquel maldito reloj, había intentado en vano seguirle al libro que tenía en mis manos, pero ni una sola frase lograba comprender, así que frustrado lo cierro con fuerza y lo lanzo por allá en la esquina de aquel rincón.

Yoochun y Junsu llevaban una hora exacta en recámaras separadas, Chunie había salido a fumar por un segundo y ni siquiera me había mirado, y Junsu al baño por una única ocasión, yo en realidad ya no sabía qué hacer, en mi cabeza no encontraba la solución, teníamos este problema aquí entre nosotros tres y el del grupo… en verdad ya no sabía si odiar o seguir apreciando a Yunho y Changmin, antes hubiera creído que por lo menos podía apoyarme en todos para salir adelante, pero estaba cayendo en cuenta de la verdadera realidad, había comenzado con nada, y estaba por terminar con nada…

Es entonces que en mi rostro se pinta una sonrisa débil –el único idiota que sigue manteniendo la fe en fantasías soy yo- mis ojos se posan en el perchero al lado de la puerta, veo con atención mi chaqueta, estoy pensando…

…si salgo no conseguiré nada, pero si me quedo será igual…

¿La diferencia?

Mi consciencia presente o ausente…

Me levanto pesadamente de mi lugar, avanzo lento hasta el perchero, tomo la chaqueta color tinto, las llaves colgadas, mis lentes oscuros para ocultar mis ojeras y avanzo directo a la puerta, mi mano temblorosa se acerca al picaporte, me detengo un segundo a meditar pues mis ojos se han clavado en las marcas del suero en mis manos, hechas días antes en el hospital, ¿Jae realmente quieres hacer esto?, ¿a dónde vas?... no quiero terminar de nueva cuenta tirado en alguna banqueta perdido de mí.

Toc toc toc escuchó tres veces, seguido de una voz firme -¿puedo pasar? –

Mis ojos se abren por la sorpresa, ¿quién podría ser a esa hora?, no porque fuera tarde, más bien porque por lo menos YO no esperaba a nadie, me paralice y me entro temor, la última vez que alguien toco esa puerta fue para llevarse a dos de nuestros miembros….

Toc toc toc nuevamente tres veces…y de nuevo la voz…-¿puedo pasar?-

Por fin fui capaz de reaccionar y por inercia pude abrir la puerta, entonces mis ojos se encontraron en la oscuridad de la noche con los de el…. ¡EL!

-Lamento no avisar con tiempo que vendría pero…- sus ojos se desviaron de mi para observar algo que podría llamarle la atención en mi vestuario, luego suspiró y continuó – ¿acaso llego en mal momento? ¿Vas a salir? - ¡La chaqueta! Pensé de inmediato

-amm…no…en realidad no… solo me la puse porque tenía frío, pero pasa –

No respondió a nada y siguió mi indicación de que podía pasar, pude percibir el olor tan característico que emanaba de el, no era dulce, pero tampoco era fuerte, por un instante me perdí en su aroma.

-Jae – escuche mi nombre salir de su boca y al mirar la fuente del que provenía solo me topé con su espalda –te soy sincero – hizo una breve pausa antes de dejar salir un suspiro, supuse que estaba nervioso puesto que jugaba con las llaves que traía en las manos – en realidad no tengo idea de qué hago aquí – amaba su honestidad

Aun así, aun cuando lo extrañaba pude decir con firmeza –Es extraño que vengas a visitarnos- y cruce mis brazos en un intento por transmitirle indiferencia

-Tan sarcástico como siempre ¿no?, eso nunca se te quitará…- lo vi de nueva cuenta suspirar y ese gesto tan característico suyo de inflar sus cachetes mientras deja salir el aire –en fin, veo que no soy bien recibido, ¡me largo! Pasa buena noche – aunque ya solo había poca luz noté que se colocaba unos lentes oscuros para luego avanzar en dirección a la puerta, pasó a mi lado y….

-¡¡Espera Changmin!! – la angustia en mi pecho apareció, y me había hecho reaccionar de forma impulsiva, mis brazos se habían aferrado a su cintura por la parte trasera y mis dedos se clavaban como agujas en su chaqueta de cuero negro, no podía ver su cara, pero si podía imaginar su expresión de disgusto, porque…odiaba el tacto con otros hombres…. Y yo sabía cuánto odiaba específicamente el mío…

El silencio me pareció eterno, me sorprendí un poco cuando sentí sus fríos dedos enredándose entre los míos, pero eso pronto cambió cuando su tacto se volvió violento, levanto mis manos, las separó de su cuerpo y se alejó de mi agresivamente, me miro con esos ojos llenos de ira y me sentí mal, Changmin no tenía idea de cómo me lastimaba su trato…

…este Changmin era el que ahora existía…

-En verdad me enojas Jae… ¡me enoja saber que NUNCA vas a cambiar!...- aunque ya no me atrevía a mirar sus ojos, podía notar como presionaba su puño, sólo trataba de mantener la calma y no decir nada que lo irritará más, era lo único que podía hacer.

-¿A qué has venido Changmin?- me sentía débil y cansado, preguntar ya era desgastante pero tenía que hacerlo, el suspiró y pareció bajar la guardia, lo vi relajar su cuerpo.

-Dije que no sabía qué hacía aquí….pero… - sus pasos resonaron en mi cabeza y cerré los ojos, es que con el no sabía qué hacer, pero presentí lo peligrosos de su acercamiento

Dejé salir una pequeña queja de dolor cuando impacte contra la pared, abrí mis ojos al mismo tiempo que Min golpeaba la puerta a mi costado -¡¡ ¿por qué tenías que hacer eso Jae?!!...simplemente no dejo de pensar en ello… ¡es que no entiendo!....-

Realmente no tenía claro qué pasaba, qué era lo que tanto me reclamaba, pero era testigo de su frustración, mire su rostro envuelto en sombras, presionaba los dientes y cerraba los ojos tan fuerte, como si tuviera una herida verdaderamente profunda, un inmenso dolor, y me preocupe…¿qué había hecho yo para lastimarlo de ese modo?

-¿C-Changmin?... ¿qué tienes?....dime – estire mi mano temblorosa hasta su rostro, pero el de inmediato se defendió lanzándola para evitar el contacto

-esa noche…- hizo una pausa y me dio la espalda…había olvidado que los últimos días siempre me topaba con su espalda –la noche en la que llegaste al departamento… ¿la recuerdas no?...-

¿Qué si la recordaba? Por supuesto, era una de las noches más patéticas en mi vida y deseaba no haberlo hecho nunca, ¿qué podía responderle? -n-no sé de qué hablas…pero me estas asustando- sentía claramente como el sudor recorría mi espalda y los latidos de mi corazón.

-entonces…después de todo…no eras consiente de tus actos…- su cuerpo poco a poco se alejó del mío, el tono de su voz disminuyo notoriamente…me atrevería a decir que…triste…

-escucha Changmin… si hay algo que hice esa noche que te lastimo de algún modo… y quieres hablarlo…estoy dispuesto a escucharte, aun cuando me odies…yo no podría nunca…- le había hablado con la verdad, fui sincero totalmente, no importaba cuanto me odiara o me ofendiera, no podría jamás enojarme con el… porque yo…

-Esa noche…- el comentario tan de la nada me había sacado abruptamente de mis pensamientos y ahora tenía toda mi atención puesta en el. –… ¿por qué me besaste? – sus brillantes ojos se clavaron en los míos… ¿qué podía responderle a eso si ni siquiera yo lo tenía claro?, ¡no lo sabía! Sabía que si respondía alguna incoherencia o algo que no le gustará se iría…así que el silencio en la habitación se hizo presente, no había ni un solo murmullo…nada que me rescatara de esta pesadez sobre mis hombros.

Entonces sonreí al recordar en el pasado, un suceso parecido –Changmin no sé por qué te extraña tanto… ¿recuerdas quién te dio tu primer beso? –traté de sonar lo más agraciado posible, al menos para destensar la situación, el sólo me siguió mirando ahora con confusión y yo proseguí al ver que no había reclamo alguno –bueno, el día que estabas dormido y yo llegue a perturbar tu sueño con un beso…la verdad es lo mismo, siempre te me has hecho muy atractivo y te lo digo y se lo digo a todo el mundo…entonces… no sé por qué te resulta tan raro en esta ocasión-

Lo vi cruzar sus brazos y mirar el suelo pensativamente, torció la boca, dio un suspiro y me miro con esa típica expresión suya de niño caprichoso - ¿sabes una cosa Jae? Siempre me pregunte ¿por qué este tipo es tan raro? Me respondí una y otra vez “es porque creció entre chicas” – en este momento de su comentario deje salir una risita molesta ¿qué estaba insinuando? Pero deje que continuara – y luego conforme pasaba el tiempo, vi que…ese eras tu…al principio me molestaba pero luego lo fui aceptando poco a poco, hasta lo veía natural viniendo de ti… y entonces note “eso” – me miro con la ceja arqueada y una media sonrisa, como esperando que YO dedujera que rayos era “eso”

-Changmin… ¿si estas esperando que yo adivine qué es “eso”?... entonces pierdes tu tiempo-

Y sonrió sarcásticamente como si dudara de mi inteligencia o algo así –Me lo imagine…bueno pues “eso” es “eso” precisamente… “eso” es…- hizo una pausa y entonces su dedo índice se posó en mi pecho

-¿estás diciendo que “eso” soy yo?-

-si…TU…contoneándote por los pasillo, besuqueándote con todos, engatusando a Yunho, a Yoochun…logrando que Junsu, el noble y torpe Junsu tenga que buscar una alternativa cobarde como lo hiciste ¡Tu!... si Jae ESO eres TU...creían que por ser el más joven no me daba cuenta de las cosas a mi alrededor, dudaron de mi inteligencia pero fui testigo de todo lo que hiciste con ellos… si el grupo está separado ahora no es por la compañía, o por Yunho o por mí, es por TI Kim Jaejoong…-

-¡¡YA BASTA!!- no había podido permitirle seguir, sencillamente ya no quería escucharlo, estaba al borde de la locura, y me había perdido de mi…para cuando reaccioné ya era demasiado tarde… el tiempo parecía haberse detenido bruscamente para luego reanudarse más rápido de lo normal…era testigo de cómo la nariz y el labio de Min sangraban, mi puño estaba levantado amenazadoramente frente a su cara…de inmediato retrocedí temblando…

…en ese momento hubiera deseado regresar el tiempo…

-Y-yo… Changmin…déjame curarte…- comencé a tener esa extraña sensación de frío recorriendo mi espalda, y aquel nudo en mi garganta, intente acercarme pero….no podía creer lo que había hecho… no tenía el valor de hacerlo…acababa de herir lo poco que quedaba entre Min y yo…el tenía razón… había terminado con la relación entre Chunie y Su…había abusado de la confianza de Yunho…y ahora… había agredido a Min en muchos sentidos… me había sentido seguro he intocable en medio de los cuatro, y no sabía porque había pensado estúpidamente que las cosas eran más sencillas y que nada cambiaria, que no importaba lo que hiciera siempre, SIEMPRE habría un perdón…y no es así… cuánto pesaba darse cuenta de lo joven e inmaduro que había sido…

En medio de la oscuridad lo vi enderezar su cara manchada y sus ojos abiertos por la sorpresa al mirar en sus dedos el líquido rojo saliendo de sus labios… de los labios que yo tanto deseaba tener… así es… Shim Changmin… estaba enamorado de ti… y estaba celoso de tu indiferencia para con las cosas… y estaba molesto conmigo mismo porque no quería darme cuenta…

-¿Jae estas bien? ¿Paso al…- Yoochun había salido por fin de la habitación aquella, era difícil para el imaginar lo que había ocurrido en esta habitación, pero no había escena peor.

-¡¿Changmin?!- Junsu salía detrás de Yoochun y corría alertado por la sangre, paso a mi lado rozando mi hombro, como si yo fuese un fantasma y sujetaba a Min por los hombros -¡Changmin! ¿Estás bien?...- yo también quería saberlo pero era peor su ausencia de palabras…

Quería gritar…quería gritarte lo mucho que lamentaba lo que estaba pasando, que te necesitaba Min, que eras el único que podía darme la fuerza para salir adelante porque, en toda mi vida nadie me había hecho ver mis errores como tu… eras alguien valioso e inteligente y la gente comenzaba a darse cuenta de ello, pero yo estaba celoso… yo solo era una sombra a tu lado…

Vi a Yoochun indicarle que levantara la cara para que la sangre de su nariz dejara de salir, Junsu despejaba el sillón y le ayudaba a recostarse, Min parecía estar en shock y yo no podía mover mi cuerpo, estaba paralizado.

-¡¡Jae!! ¿Qué estas esperando? ¡Trae una toalla mojada! – por primera vez escuche a Junsu levantarme el tono de su voz, pero le agradecí que lo hiciera, había funcionado para hacerme reaccionar, me apresure para ir al baño por lo que me habían pedido…

-¡Espera!- me detuve en seco dando la espalda y mire sobre mi hombro a Min, luego volví la vista al frente y espere unos minutos

-Jae…no es necesario que traigas nada… ¡ya sé que no soy bien recibido!...- lo escuche abrir la puerta y detener sus pasos en el marco - y no te preocupes que no te volveré a molestar, hoy a la media noche me voy de la ciudad… adiós hyungs – no había azotado la puerta, no había gritado, se había despedido como todo un hombre y yo solo… no me moví.

-¡¿JAE?! ¡¿Qué fue lo que le hiciste?!- Yoochun camino hasta quedar detrás de mí y yo levante mi mano hasta mi boca para acallar mi llanto, mis rodillas se fueron desforzando y caí en el suelo donde lo golpee y lo volví a golpear una y otra y otra vez y me escuche llorar en silencio, ahogadamente con todas mis fuerzas -¡Basta Jae! ¡Basta!- Yoochun se tiró al suelo y me abrazo para aprisionarme con fuerza, sentía que era un intento desesperado por impedir que me hundiera…

…pero ya estaba en el fondo…

Habían pasado las horas, me había tranquilizado porque Yoochun se había recostado en la cama, yo estaba sobre sus piernas y el acariciaba mi cabello y mi espalda para relajarme, aunque no hablará yo sabía que no estaba molesto conmigo, ni siquiera me había pedido una explicación.

-Jae…tal vez no es el momento pero… ¿puedes decirme qué es lo que paso? –

Había tragado saliva para no soltarme de nuevo en llanto, no podía responderle… -esta bien Jae… no es necesario que te esfuerces…solo quiero que tu estés bien… tengo algo para animarte –

Yo sabía lo mucho que se estaba esforzando por ayudarme…pero en este momento no había nada que pudiera animarme.

-Sigamos con nuestro proyecto Jae, hagamos un disco para relajar el alma y el corazón, que el mundo sepa que no estamos derrotados, que Kim Jaejoong es fuerte ¿qué te parece?- lo vi sonreír en medio de las sombras, me enderece para ver su iluminado rostro y pude sonreír

-¿pero y Junsu?-

-Junsu se fue con su familia un tiempo… el…necesita mucho eso… así que no te preocupes por el –

-Chunie pero… ¿Estarás bien con eso?... – lo vi tomar mi mano y regalarme esa sonrisa encantadora que tanto le gustaba a sus fans…y me perdí en ella.

Cuando escuche claramente como la perilla de la puerta de la recamara daba vuelta, al principio pensé que se trataba de Junsu pero…

-¡Jae! ¡¿Será que puedo pedirte que no vuelvas a tocar a Min?! ¡Aléjate de el! –

Yunho estaba parado frente a nosotros, respiraba con fiereza y estaba empapado por la lluvia, me miraba con tanta agresividad que tuve ganas de huir muy lejos… sencillamente no podía creer lo que me estaba pidiendo.

…no podía hacer lo que pedía… NO

Siguiente