Mentiras y Terror.
“¡Es increíble!” gritó Chansook mientras azotaba la puerta y se dirigía a la cocina para terminar su almuerzo. “Le pedí que se comportara esta noche, y prometió que lo haría, pero segundos después de que llegaron ya está sobre appa” Jaejoong rió suavemente.
“No debería preocuparme por eso, su padre solo esta jugando con ella.”
“Todos lo sabemos” gruñó Chansook, su lindo rostro iluminado con molestia “¡Pero Seulgi no sabe como tomar un no por respuesta!”
Obviamente las ultimas semanas de compartir un departamento con la otra chica le había hecho ver la naturaleza y egoísmo de Seulgi “¿Cómo van las cosas?” Jaejoong preguntó casualmente.
“Oh, tu sabes” Chansook se volteó “Nos llevamos bien juntas.”
Sabía que Chansook se sentía mal de que su padre había probado su punto con respecto a la otra chica y no quería agregar sal a la herida.
Para cuando regresaron a la sala Chinhae y su novia Choonhee habían llegado con el amigo de Chansook Hyunki y junto con ellos apareció otro hombre llamado Daedae quien parecía ser la cita de Seulgi, aunque ciertamente no parecía el mismo hombre que había salido antes de la habitación de Seulgi.
Jaejoong estaba seguro de que Yunho se sentía fuera de lugar junto a los seis chicos, incluso el mismo se estaba sintiendo incómodo.
El timbre de la puerta sonó de nuevo poco después de las ocho y Chansook se levantó a responder.
El sentido de premonición de Jaejoong le había advertido de quien podría estar llegando tarde hasta que Heechul llegó a la habitación en al que estaban al lado de Chansook. Jaejoong miró con plegaria a Yunho, sabiendo que estaba muy tenso y podría incluso hasta correrlo.
Entonces Yunho vio los ojos plegantes de Jaejoong y algo de frialdad se esfumó mientras veía el rostro emocionado de Chansook. Su hija los quería a ambos allí, y si alguno de los dos se fuera sabía que eso molestaría a Chansook.
Yunho se relajó lentamente aunque sus ojos permanecieron peligrosamente entrecerrados.
“¡Miren quien esta aquí!” Chansook rió. “Pobre tío Chul, su cita tuvo migraña y no pudo venir” Agregó simpáticamente, su brazo al rededor del mayor.
“¿Y no pudiste venir con un remplazo?” Le dijo Yunho, la dureza en sus ojos diciéndole que su intención era lastimarlo “Me decepcionas Heechul” finalizó.
Heechul lo retó con su mirada “Pensé que con todos los hombres y bellas mujeres que has tenido no te importaría compartir”
Jaejoong los miró a ambos. Heechul estaba molesto por la conducta de Yunho, y tenía derecho a estarlo, pero la situación se estaba saliendo de control. Sorpresivamente fue Chansook quien cortó la tensa atmósfera.
“Puedes sentarte junto a mi, Tío Chul,” le dijo ligeramente.
“¡En ese caso será mejor que dejes de llamarme Tío!”
Hyunki colocó sus brazos posesivamente sobre los hombros de Chansook. “Ella solo dijo que podías sentare a su lado” Le sonrió.
Chansook se sonrojó por el obvio comportamiento.
Jaejoong posó sus ojos en Yunho, aliviado de ver que había cierto humor en ellos. Sabiendo lo posesivo que era de Chansook, Jaejoong temía de su reacción con el otro hombre. Pero Chansook sabía que no había que temer. Alto y Moreno, ojos color chocolate cálido, estaba estudiando para convertirse en un profesor de historia y a Yunho obviamente le agradaba.
Jaejoong observó a Yunho ahora que se sentó a su lado pasando un brazo por la cintura de Jaejoong y colocando su mano posesivamente en su bebé.
“Debiste haber encontrado un reemplazo, Heechul” Volvió a decirle “Ninguno de nosotros esta dispuesto a compartir” Miró al otro hombre desafiante.
“A Daedae no le importa.” Seulgi le dio a Heechul una sonrisa brillante mientras se presionaba contra el.
A Daedae no le importaba, era evidente. Era un joven callado, obviamente sorprendido por la vivacidad de su cita, y pronto fue evidente que Seulgi lo invitó por no ser la única sin acompañante. Ahora que Heechul había llegado solo Seulgi estaba ignorando por completo a Daedae.
Jaejoong hizo su mejor intento por mantener a Daedae en la conversación, sintiendo necesidad de seguir hablando ya que la mayor parte del tiempo Yunho se mantenía en silencio.
Jaejoong sabía que estaba enojado con Heechul aquí, pero por la seguridad de Chansook estaba intentando de no decir nada al respecto. Solo esperaba que Yunho no pensara que sabía que Heechul iba a estar presente; porque no lo sabía, nunca se habría puesto en una situación tan estresante como esa. El doctor estaba complacido con su embarazo hasta el momento, aunque su presión sanguínea le causaba algo de preocupaciones. Y estaba seguro de que esta noche no haría mucho por aliviar esa situación.
Lo triste era que el y Yunho habían avanzado mucho desde las primeras semanas de matrimonio. Había verdadera amistad entre ellos ahora, algo que compartir, algo que nunca antes habían tenido. No quería perder todo eso solo porque ahora estaban forzados a pasar una tarde en compañía de Heechul.
“Lo siento.”
Jaejoong miró a Heechul cuestionante mientras se sentaba a su lado en el sofá durante el tiempo en que Yunho se había levantado por un vaso de jugo de naranja, volteó a ver si Yunho lo estaba observando ahora. Heechul se levantó del sofá.
Heechul suspiró “No debí haber venido aquí” Sacudió su cabeza “No iba a venir porque sabía que tu y Yunho estarían aquí, pero Chansook fue muy insistente.”
Jaejoong sonrió con simpatía “¿Cómo has estado?”
“Bien,” Heechul asintió “Y tu estas resplandeciente obviamente”
“Si,”
Heechul lo miró con persistencia “¿Cómo estas en realidad, Jaejoong?” le preguntó “He estado preocupado por ti desde ese día en el restaurante, pero no volviste a llamarme”
“No había necesidad,” Jaejoong respondió.
“¿Entonces Yunho y tu están bien ahora?” Heechul continuó.
Jaejoong sonrió “Tan bien como podríamos estarlo, creo” asintió.
“¿Y estás feliz?”
Si, estaba feliz. Al fin Yunho y el se entendían y las ultimas semanas habían estado llenas de tranquilidad.
Jaejoong miró a través de la habitación en donde se dio cuenta del porque Yunho estaba tardando; estaba en una profunda conversación con Park Hyunki, sin darse cuenta de que Heechul estaba con el.
“Si” le aseguró a Heechul.
“Hm. ¿En ese caso, te importa si hablo sobre las sospechas que tiene Yunho de nosotros dos?” Heechul lucía preocupado.
“Si tienes algo nuevo que decirme estaré encantando de escuchar.”
Heechul frunció las cejas “Bueno, la idea vino a mi cuando vi a Yunho en el restaurante aquél día. Lo noté un par de veces cuando salimos mientras estábamos juntos, unas cuentas indirectas de el podrían…”
“¿De quién?” Jaejoong demandó impaciente.
“El asistente de Yunho. ¿Cual es su nombre? Choi” Heechul recordó “Lo noté un par de veces cuando salimos juntos en el mismo restaurante. Pensé que era coincidencia, pero dijiste que Yunho te había acusado de habernos visto juntos, y supongo que ese chico ha estado espiándonos.”
“¿Por qué haría eso?” Jaejoong preguntó en sorpresa.
“No lo sé,” Heechul sacudió su cabeza “Pero es el único que creo que nos ha visto juntos.”
¿Choi Siwon? a Jaejoong nunca le había gustado ese hombre, pero incluso…
¿A menos que Yunho le halla pedido al otro hombre que los siguiera? Lo había hecho una vez en la boda, ¿Entonces por qué no? Seguro que no era demasiada coincidencia.
“¿Crees que le haya dicho a Yunho sobre nosotros?” Jaejoong dijo débilmente, sabiendo que Heechul también pensaba lo mismo, que Yunho le había pedido a su asistente que los vigilara.
“¿No lo crees?” Heechul dijo gentilmente.
“Si” Jaejoong volteó a otro lado, parpadeando de vuelta sus lágrimas, la confianza que Yunho y el habían construido en las semanas recientes estaban cimentadas en una mentira. Dios, se sentía enfermo de pensar en las veces que había querido preguntarle a Yunho si su matrimonio era real.
“Lo siento, Jaejoong,” Heechul tomó las manos de Jaejoong entre las suyas, “Solo pensé que era algo que deberías saber.”
Estaba contento de que lo hiciera; Oh, que tonto había sido en esas ultimas semanas. Yunho no quería una amistad con el, solo había tomado los consejos del doctor de ‘Una madre feliz y contenta tendrá un niño saludable’. ¿Y luego todo esto? ¿Volverían a la frialdad y la indiferencia?
“Aquí tienes, Jaejoong.” Yunho apareció detrás con su bebida después de haberlo dejado deliberadamente solo con Heechul, se sentía seguro; “Cariño, estas muy pálido” agregó preocupado.
Cariño. Y la preocupación. Todo era falso. “Creo que me gustaría ir a casa ahora, si no te molesta” Jaejoong dijo despacio.
Yunho miró a Heechul con los ojos afilados “Por supuesto” aceptó automáticamente “Le diré a Chansook que nos vamos.”
“Puedo estar equivocado, Jaejoong,” Heechul le dijo una vez que estuvieron solos. “Como dijiste ¿Por qué Siwon querría hacer algo como eso?”
Ambos sabían porque ¡Porque Yunho se lo había pedido!
Jaejoong no recordaba haberse despedido y agradecer a Chansook, pero debió hacerlo, ya que no recibió miradas extrañas de los demás con su partida.
“Chansook parece tener idea de lo que es servir en una fiesta” El abrupto comentario de Yunho rompió el silencio.
La ensalada, seguida del pollo en salsa de vino blanco y luego unas deliciosas papas dulces habían estado muy bien. “Fue muy lindo” Jaejoong respondió cortante.
“¿Qué opines de Park Hyunki?”
“Parece muy agradable,” Jaejoong tembló.
“Si” Yunho completó irónicamente.
Jaejoong esperó tenso por la siguiente pregunta que esperaba que concerniera a Heechul.
Pero nunca llegó. Yunho una vez más cayó en silencio.
Jaejoong subió directamente las escaleras cuando llegaron a casa, dejando a Yunho cerrando. Jaejoong sintió su mirada en el mientras subía.
Jaejoong no estaba sorprendido de que tocara la puerta minutos después: probablemente lo haya estado esperando mientras se sentaba en la silla de su habitación, aún vistiendo su abrigo.
“Déjame ayudarte” Yunho lo paró para quitarle el abrigo, desabotonando su camisa y pantalones. Jaejoong no opuso resistencia, Yunho veía a Jaejoong y trataba de remover su ropa interior.
“¿Qué dijo Heechul para que te molestaras?” finalmente la pregunta que Jaejoong había estado esperando.
Jaejoong se quedó parado desnudo frente a el, y parecía no importar “Nada” dijo viendo al piso.
La boca de Yunho se torció “¡Debió haberte dicho algo, estabas muy bien hasta que habló contigo!”
“¿Lo estaba?” Jaejoong respondió.
“¡Si, maldita sea!” Yunho tomó sus brazos “¡Jaejoong , mírame!”
Jaejoong levantó sus párpados tan rápidamente que parecieran muy pesados. Yunho lo observó como siempre lo hacía, arrogantemente apuesto, totalmente al mando. Y por primera vez desde que lo conocía, lo había dejado frío.
“¡Jaejoong!” su voz llena de desesperación “Te quiero, Jaejoong,” lo sacudió ligeramente “¡Te quiero!”
“No te estoy deteniendo” Jaejoong le dijo sin interés.
“¡Dios!” Yunho gimió, su rostro con dolor. “¿Jaejoong?” Lo sacudió nuevamente, soltando un gemido mientras bajaba su rostro para clamar sus labios en un acto de impulso.
Emocionalmente Yunho no había sido capaz de alcanzarlo, pero mientras el beso continuaba, y su mano casi desesperada exploraba el cuerpo desnudo, Jaejoong sintió sus defensas comenzado a quebrarse, a desmoronarse y finalmente hasta estar completamente olvidado.
Jaejoong estaba disgustado con su debilidad aunque deseaba esto. Hacía mucho tiempo que no conocía el éxtasis de su toque, y su cuerpo lloró por el placer que solo este hombre podía darle.
Jaejoong pensó que colapsaría completamente mientras sentía su mano en su estómago en donde estaba su hijo, sintiéndolo responder por el toque de su padre. El bebé sabía, como Jaejoong, que estaban en posesión de este hombre, para hacer lo que quisiera; sabía que también lo quería.
El cuerpo de Yunho estaba duro y cálido mientras se movía sobre Jaejoong quien se recostaba en la cama, sus ropas tiradas en el piso, y Jaejoong gimió de placer cuando se volvieron uno, arqueando sus caderas.
Se vino en su propio estómago al mismo tiempo que Yunho dentro de el.
Finalmente encontró la fuerza de recostarse junto a Jaejoong, muy cuidadoso de su hijo “Ahora dime que dijo Heechul para molestarte,” le preguntó con su voz masculina.
Jaejoong sabía, que a pesar de haber hecho el amor, que esta pregunta solo había sido pospuesta, no olvidada. “¿Fue Choi Siwon quien te dijo que Heechul y yo nos estábamos viendo?”
Yunho frunció el entrecejo “¿Qué diferencia haría quien me lo dijo?”
“Importa para mi,” Jaejoong dijo. “¿Fue el?” Jaejoong se sentó.
“Yo…”
“¡Oh dios mío!” El mareó tomó a Jaejoong mientras veía la cama entre ellos, un rojo oscuro pinto las sábanas “Estoy sangrando Yunho” lo miró lleno de pánico “¡Estoy perdiendo a nuestro bebé!”
No, no, no... que Jae no pierda a su bebé!
ResponderEliminarGracias!!!