KINGDOM TVXQ!

CLOSE 2U
Arualthings

Our Love is True cap 13

¿Día de campo?

− ¡Kim Jaejoong! ¡Date prisa o si no te dejaremos! –se escucho una chillona voz desde la calle de aquella pacifica colonia en la cual las personas sanas y normales aun dormían cómodamente.
−No es necesario que grites tanto, Junsu.
−Pero, hyung!! Los demás deben de estarnos esperando pero este niño seguramente se está preparando para verse lindo frente a su Yun… −Junsu corto sus palabras al pensar en lo que estaba diciendo. Su hermano aun no sabía que Jaejoong y el eran gays, de hecho no sabía que la mayor parte de los estudiantes de aquella escuela eran gays.
− ¿Para Yun? ¿Quiénes Yun?
− ¿Yun? ¿Yo dije Yun? no quise decir Yoona –sonríe tontamente. El otro gemelo solamente se le quedo viendo extrañado.
−No irá ninguna Yoona al viaje, Junsu…
−… −El menor ya no dijo nada, si decía una palabra más, sabía que lo echaría a perder.

Esperaron por cinco minutos más e incluso la señora Kim les había invitado a entrar para ofrecerles un poco de jugo recién hecho. Jaejoong bajo de su habitación vistiendo deportivamente, perfecto para el día de campo que tendrían, pero un poco exagerado en el arreglo a la vista de todas las personas que se encontraban allí. Y es que con las risas de Junsu, Junho y la señora Kim, los otros Kim habían terminado bajando para hacerles compañía a los jóvenes.

− ¿No dijiste que no irían chicas? –pregunta el señor Kim.
−JJ no es una chica, appa –comenta una de las hermanas del mencionado.
−¡¡OYE!!
−Yo me refería a que no es necesario tanto arreglo si ni una sola chica ira con ustedes –corrigió el señor antes de que su hijo se pusiera a gritar y discutir con sus hermanas.
−No appa, no irá ninguna chica, pero aun así me gusta estar presentable.
−Si~ Kyahyahyah… −comenzó a reír Junsu sabiendo la verdadera razón del arreglo de Jae− perdón… -///-
−Como sea ¬¬ supongo que será mejor que nos vayamos ya chicos.
−Fue un placer hablar con ustedes −comenta Junho con una sonrisa en el rostro.
−Para nada mis niños. De hecho ya nos comenzábamos a sentir tristes porque no nos habían visitado.
−Vendremos pronto, Aunty, Uncle, lo prometemos –sonríe Junsu feliz.
−Bueno, ya nos vamos…
−Tengan cuidado chicos, si algo pasa tan solo nos llaman…
−Claro, Umma.

Los chicos por fin salieron de la casa del rubio que aun iba un poco molesto por los comentarios de su familia y amigos. Subieron a la camioneta del señor Kim y por fin partieron a los apartamentos de sus demás compañeros.

− ¿Por quién pasaremos ahora? –pregunta Jaejoong.
−Primero pasaremos a los departamentos y entonces a la mansión de Kame.
−Oh, ¿si pudieron contactar a Kame? ¿Por qué no fue a la escuela el viernes? –le pregunta a Junsu ya que Junho iba demasiado concentrado en el camino.
−Pues dijo que tuvo que ir al médico ya que un familiar estaba mal… no nos dio detalles, y no tenía muchas ganas de ir al día de campo, pero cuando le conté que iría mi Hyung no lo dudo ni un segundo.
− ¿Junho?
−Lo que pasa es que ellos eran muy buenos amigos en el colegio, ¿recuerdas que te conté?
−Ah, sí, si ya recuerdo.
−Pero… olvide decirle que irían los demás… −poso unos de sus dedos sobre sus labios pensando en aquel pequeño detalle.
−Bueno, ni que no quisiera ir con notros…
−Kyahyahyah~ tienes razón…
−Es aquí, ¿cierto? –los dos chicos que iban en la parte trasera se asomaron por la ventana y asintieron felizmente.

Por otro lado en el departamento 207, Yunho y Yoochun buscaban lo necesario para poder usar en su corto viaje. Mientras Yunho corría por el departamento, Yoochun revisaba las dos mochilas que usarían los dos jóvenes. Hacia una lista de lo que tenían que llevar, según Junsu ya que le había mandado un mail el día de ayer por la noche.

− ¿trajiste el repelente para mosquitos? –pregunta Yoochun.
−Sí, si…
− ¿Las botellas de agua?
−Listas…
− ¿La comida?
−Yoochun ya sé que no quieres quedar mal con tu nalgón, pero relájate…
−No le digas nalgón.
−Pero lo es.
−Pero es mi nalgón.
−Mh… ¿es un reto? –el pelinegro se le quedo viendo con cara de déjate de mamadas− solo bromeaba~ que poco sentido del humor tienes…
−Pues mejor cierra el pico.
− ¡ash!

El pelilargo volteo a ver el reloj que se encontraba en la pared y sin más rápidamente se levanto para que pudieran irse yendo, no quería hacer esperar a Jaejoong y sabía que Yoochun no quería que su nalgón y cuñado se quedaran afuera en la calle.

Cuando los dos salieron de su departamento se encontraron a Changmin que también iba de salida. El chico los miro algo sorprendidos por el… nerviosismo de ambos. Se venían algo agitados, no le dio demasiada importancia y sin más siguió caminando con los otros dos chicos detrás de el.

− ¡Yunnie!
−Jaejoong –sonríe el chico al ver al rubio mover las manos de un lado para otro.
−Parece que tu noviecito está feliz de verte, me pregunto si solo será por la forma en que lo coges.
−Pues tu novio se ve muy bien en esos shorts, me pregunto si será bueno a la hora de coger.
−Se callan –los dos chicos se quedaron de piedra, habían olvidado por completo que Changmin estaba a nada de ellos.
−Dense prisa –volvió a gritar Jaejoong.
−Perdón chicos, ¿los hicimos esperar?
−Claro que no Yoochun.
−Pareces lleno de energía, Jaejoong.
−Si~… Hola, Yunnie…
−Hola, lindo… −el rubio se sonrojo y Junho solamente hizo cara de ¿qué está pasando aquí?
−Hola chicos… −saluda Changmin.
− ¡Hola, Minnie! –saluda Junsu que ya se sentía raro por no haber hablado en un buen rato.
−Bueno, será mejor que nos demos prisa que si no Kame se molestara.
−Claro, hyung…

Todos comenzaron a entrar a la camioneta. Changmin fue rápido y subió en el asiento del copiloto. Jaejoong y Yunho habían subido atrás, obviamente, los dos de lado izquierdo de la ventanilla. Junsu y Yoochun también se subieron con los chicos un poco cohibidos por la cercanía que había entre ellos.

En unos cuantos minutos la camioneta llego a la mansión de los Kasuya. El lugar era precioso, no más grande que la mansión de los Kim, pero sin duda era un lugar bellísimo. Cuando llegaron ni siquiera tuvieron que anunciarse para que el guardia de seguridad les abriera la puerta. Primero porque ya estaban informados sobre la visita de los chicos y segundo, porque todos ya conocían muy bien a Kim Junho y Kim Junsu.

Los chicos no tuvieron que bajarse de la camioneta cuando el japonés ya se encontraba corriendo.

− ¿Y como se supone que cabremos aquí? –pregunta el chico ya después que saludo a todos sus amigos.
−Pues…
− ¡Ya se! –Jaejoong interrumpió a Junsu.
−No asustes, loco –comento Changmin.
−No seas malo, Minnie…
−Okay, ¿Cuál fue tu idea, Boo?
−Pues… obviamente no cabremos aquí, así que porque no unos se van en las piernas de otros.
−Taz’ loco tú… −Junsu sabía lo que tramaba su amigo y estaba muy loco si creía que caería.
−No hay otra opción, Susu-ah… Además, todos somos hombres, no le veo nada de malo.
−Mi Boo tiene razón.
−Por mí no hay problema –dice Kame ya que sabía que el iría cómodo en su parte del asiento.
−Pero…
− ¡Bien! Entonces, yo me voy encima de Yunnie y Susu se irá con Yoochun…
− ¿Cómo?
−No seas dramático, Yoochun. Jae tiene razón, además no creo que mi hermanito bello pese mucho.
−Verdad que si… −sonríe Jaejoong complacido.
−Bien, pues está decidido, ven aquí Boo…
−Claro Yunnie…

Junsu estaba más que sonrojado. Yoochun le miraba algo preocupado y sabia la razón, no quería presionarlo, pero bueno, aquello no era algo que se hubiese planeado, ¿cierto? Ya no lo sabía, al mirar aquella sonrisa en los labios de Jaejoong, Yunho y también Changmin se sentía como un conejillo de Indias o algo por el estilo. Suavemente comenzó a posar su trasero sobre las piernas de Yoochun, tratando de no tocar ni una sola parte intima del chico, casi solamente sentándose en las rodillas del pelinegro.

Jaejoong por otro lado se había sentado completamente en el pelilargo. Yunho mantenía sus manos en el estomago bajo del rubio no dudando en tocar de vez en cuando aquella parte del chico que tanto le encantaba. Pero claro, tenían que ser discretos por Junho y tampoco era como que fuesen unos exhibicionistas.

La camioneta por fin partió. Junho coloco la radio en su estación preferida y pronto todos comenzaron a cantar la canción que se encontraba en aquellos momentos. Las risas no se hicieron esperar, todos estaban muy felices de cierta manera. Kame no dejaba de ver a los dos chicos que iban en los asientos de enfrente, no le agradaba la forma en la que Junho miraba a Changmin ¿Qué estaba pasando entre ellos dos? Frunció el ceño, pero ahora que se haba cuenta no sabía ni que pensar. Ya luego averiguaría que era lo que se traían aquellos chicos.

El viaje había estado tranquilo pero después de unos minutos de camino la carretera había comenzado a ponerse algo ‘complicada’. Junho comenzó a conducir más rápidamente cuando salieron a la carretera que llevaba a las montañas del norte, los baches si hicieron aun más presentes.
Junsu tuvo que respirar antes de hacer lo que había estado pensando, pero era mejor que caerse y partirse la madre en alguna de esas vueltas.

Yoochun casi muere al sentir el trasero de Junsu sentarse sobre él, y de verdad sobre el ya que sentía muy bien su virilidad siendo aprisionada por el trasero del pequeño.
El también tuvo que colocar sus brazos en el estomago del castaño para que el pequeño no cayera y se lastimara. Dios, podía jurar que sangraría en cualquier momento.

Changmin: <<.Oh por dios, Yoochun hyung debe de estarse muriendo con el trasero de Junsu hyung sobre de él.>>
Yunho: <<.Ese es Yoochun, sin duda ya está volviendo a ser el mismo amigo pervertido que respetaba.>>
Jaejoong: <<. ¡Juncito Fighting! Mi amigo ya merece saber lo que es la madures.>>
Kame: <<. ¿Por qué Junsu esta tan nervioso? ¡Ah! ¿Qué pasa con Junho y Changmin?.>>
Junho: <<.Algo no me está agradando. ¿Por qué Yoochun tiene que estar agarrando de aquella manera a mi niño?.>>

Los pensamientos de cada uno de los chicos no dejaban de dar vueltas en sus cabezas. Bueno, por lo menos eso hasta que pasaron como dos horas y sus cuerpecitos ya comenzaban a doler.

Changmin: <<.Tengo hambre.>>
Yunho: <<.Boo, ya me lastimaste mi pobre amiguito TOT, pesas más de lo que pensé, aun así eres sexy u.u.>>
Jaejoong: <<.Me duelen las caderas, Yunho tu miembro es muy grande T_T.>>
Kame: <<.Uso, Uso, Uso .>.<. Me duele mi potito.>>
Junho: <<. Ya no aguanto mi cuello… Susu-ah quiero un masaje T_T.>>
Junsu: <<. Okay, este será un buen comienzo para el plan Mickey, ¿Verdad? .>>
Yoochun: <<.Junsu se ha estado moviendo demasiado, ¡Dios ayúdame!.>>

Los minutos siguieron pasando poco a poco. Junsu ahora ya no se encontraba tan nervioso como al principio aun que a diferencia de el, Yoochun estaba que se moría por la cercanía de su hermoso niño.
Poco después los chicos comenzaron a divisar el templo entre los árboles y montañas de aquella zona.
El lugar era hermoso de eso no cavia duda pero se encontraba un poco descuidado, se notaba que no habían ido personas en un largo rato.

Junho estaciono la camioneta frente del templo solamente no estorbando para que si por alguna muy extraña razón alguien más venia, no se molestase. Los primeros en bajar fueron Junho, Changmin y Kame. Después Junsu y Jaejoong y por último los dos que faltaban. Yunho y Yoochun se quedaron unos segundos más en la camioneta masajeando sus pobres pies que habían estado soportando todo aquel peso y tampoco como que fuera tanto, pero habían estado así por horas, así que los pobres ya estaban entumidos.

−Es muy lindo.
−Lo es, Min, lo es…
−Por cierto, hyung. Creo que tu ratón pervertido estuvo a punto del colapso.
−No te rías, eso no es cierto –hizo un lindo puchero.
−Claro que si, después de un tiempo comenzaste a moverte más de la cuenta, la camioneta ni siquiera se tambaleaba y tú ya parecía que… espera ¿Lo hiciste apropósito?
−¡¡Kyahyahyah!! No lo sé…
− ¿Cómo que no lo sabes?
−Bueno…
−Cierto, Junsu, Minnie tiene razón ¿Lo hiciste apropósito?
−Lo que pasa es que pensé. Si voy a poner a prueba al ratón pervertido este, una buena forma es saber si ya saben, si se controlaría… ya saben, no me hagan decírselos.
−Ósea que piensas seducirlo y cuando… *O* Junsu-ah, no sabía que eras tan perverso.
−Se me acaba de ocurrir ahorita.
−Entonces, Hyung, ¿Cuál era el plan Mickey Mouse de antes?
−El mismo, es solo que pensaba hacerlo de otra manera.
− ¿Hacer que, Susu-ah?
−Nada, hyung –le sonrió el chico a su hermanito− Tengo hambre, hyung…
−Sí, pues si Jae nos dice a donde está el lago supongo que nos podremos instalar.
−Claro, pues es fácil de llegar, me acuerdo como si fuese ayer –suspiro el chico melancólicamente.
−Ya déjate de tonterías y dinos por donde…
−Pero… aquellos dos aun no han salido del auto. ¿Qué demonios hacen? –murmuro Jaejoong molesto. Por algún momento en su cabecita cruzo la idea de que Yunho le engañaba con Yoochun, así que se apresuro para ver qué era lo que tanto hacían esos dos chicos. − ¿Qué hacen? –abrió la puerta sin siquiera avisar.

Los ojos de Jaejoong se abrieron muy, pero muy grandes cuando vio como su chico masajeaba su miembro que estaba completamente erecto y duro. Yoochun por otro lado simplemente sacaba unas cosas de su maleta y salió de la camioneta dándole una mirada de ‘ahí te lo dejo’ y una palmadita en el hombro para poder ir a ver a su lindo niño.

Jaejoong se subió al asiento trasero y cerró la puerta aun no sabiendo que era lo que estaba pasando exactamente allí. Su mirada estaba clavada al frente mientras sus mejillas se teñían de un intenso pero realmente intenso color carmín.

− ¿Por qué te masturbas? –pregunto con voz triste.
− ¿Eh?
− ¿Qué hacían tu y Yoochun?
−Jaejoong, Boo… ¿crees que Yoochun y yo estamos haciendo algo inapropiado? –pregunta aun con su mano en su sexo y con la vista clavada en el perfil de su chico.
−Entonces ¿por qué te masturbabas con el aquí? ¿Te estaba masturbando?
−Claro que no, iiuu no, Yoochun es seme, Boo, yo nunca lo haría con otro seme.
− ¿Por qué no? –por fin volteo el chico a verlo.
−Porque son muchos problemas, luego no quiero tener una plática de quien será el uke y quien el seme… No, no, no.
−Okay, ya me quedo claro.
− ¡Ah, Boo! Si, se siente tan bien…
−Lo sé.

Jaejoong había quitado la mano del moreno de su sexo posando la suya en aquel caliente y duro miembro. Se sentía seco, Jaejoong miro a Yunho un poco y sonrió para luego agacharse hasta quedar frente a aquel gran pedazo de carne. Lamio sus labios y poco a poco acerco su lengua hasta la punta de aquello.

−Ah… hmm… Boo…

Primero eran pequeñas lamidas que solamente eran dadas en la punta del erecto pene del moreno. Yunho se estaba muriendo de placer al sentir aquella mojada lengua recorrer aquella pequeña parte de él. Jaejoong sonrió un poco y, lamiendo una vez más sus labios para poder saborear bien el sabor de Yunho, metió todo el prominente sexo del moreno en su boca.
Casi sentía que aquella cosa llegaría hasta my adentro de su garganta si la dejara. Yunho jalaba los cabellos del rubio dirigiendo un poco el ritmo en el que quería que Jaejoong lo complaciera. Era tan delicioso que aun que quería resistir los gemidos, no podía evitarlo y terminaba soltando aquellos libremente.

−Ahhm… yah! Boo… si… mmh…

Mientras tanto.

− ¿Por qué se supone que dijiste que teníamos que venir? –pregunto Changmin mas que confundido.
−Ya te dije, Changmin, Yunho y Jaejoong tenían que ‘hablar un poco’ –contesto Yoochun.
− ¿Hablar? ¿De qué? –pregunto Kame igual de cansado que Changmin.
−Pues esto no esta tan mal, ¿verdad Hyung? –Junsu iba agarrado del brazo de su hermano mientras caminaban en las partes que eran permitidas dentro de aquel antiguo templo.
−Así es, lindo.
−Ya deja de quejarte, Min, Yoochun dijo que Yunho y Jae no tardarían mucho, ¿verdad Chunnie? –volteo a ver al chico con una infantil sonrisa en los labios.
−Si…

Yoochun nuevamente escuchaba aquel ‘Chunnie’ de los labios de su adorado niño y no pudo evitar sonreír como idiota mientras seguía viendo la figura de Junsu caminar delante de él. Junho se quedo algo confundido por aquello, su hermano llama a ese chico Chunnie y el se pone como tonto, ¿Qué pasaba allí?

Ahora que los otros estaban distraídos con el ceño fruncido Kame se acerco a Changmin para poder hacerle plática y saber que estaba pasando en ese lugar, dios, solo se había ausentado un día y ya no entendía nada.

− ¿Changmin? –el menor volteo a ver a Kame.
− ¿Qué pasa? –sonrió el chico amistosamente.
−Nada, solo quería saludar…
−Lo siento… Hola.
−No seas tonto…
−Perdón.
−Okay, bueno ya…
−Okay~ ¿te pasa algo? –pregunta Changmin confundido por su comportamiento.
−No, bueno, es solo que quería preguntarte algo pero wow no sabía cómo hacerlo –sonríe algo apenado.
−Pues preguntando ¿Qué querías saber?
− ¿Qué paso el viernes? Es que ahora juro que no entiendo nada de lo que está pasando…
− ¿Eh? Pues nada, cuando llegamos Junsu y Junho llegaron y pues ya se presentaron y luego a Junsu hyung se le ocurrió la idea de venir aquí y pues ya…
−Todos parece que conocen a Junho muy… muy bien diría yo.
−Mm… pues Jae hyung lo conocía desde antes, ya sabes él y Junsu hyung han sido amigos desde el año pasado, y pues… pues yo lo conocí también en la mansión de Junsu poco antes, es que me perdí en su casa y él me ayudo a encontrar el camino y pues Yunho y Yoochun no lo conocían hasta ayer…
−Ya veo…
− ¿Por qué lo preguntas?
−Por nada, solo creía que se llevaban muy bien.
−Pues sí, es un chico súper buena onda y no se parece a su loco hermano…
−En eso tienes toda la razón, Junho es… Junho es increíble –sonríe feliz al recordar aquellos años en el colegio.
−Supongo…

Regresando al YunJae.

El miembro de Yunho se sentía de maravilla. Estaba caliente y ya comenzaba a derramar aquel liquido tan delicioso que volvía loco a Jaejoong. El rubio miraba la intimidad de Yunho de una forma que hacia estremecer al moreno. Pronto los dedos de Jaejoong comenzaron a moverse sobre la piel del chico. Se sentía duro y grande. Jaejoong no podía evitar sonreír al ver la forma en que su… chico mordía sus labios al sentir su mano en el. Los ojos de Yunho comenzaban a entrecerrarse al sentir tal placer y Jaejoong hacia el movimiento más lento, apretaba el pene de Yunho con más fuerza presionando lo suficiente para sacar suspiros de la boca del moreno.

Con cuidado el rubio jalo un poco más los pantalones de Yunho para poder mover su mano más cómodamente. Yunho ya no podía mas, Jaejoong lo estaba haciendo sufrir de desesperación al no hacer lo que él deseaba… la lengua de Jaejoong sobre su intimidad. El mayor sabía que eso era así, pero quería hacer esperar un poco más a Yunho, quería que aquel momento durara por lo menos un poco más ya que si iban a estar todo el día con los chicos, esto no se podría volver a repetir.

Con cuidado Jaejoong comenzó a acercar su rostro al pene de Yunho, el último trago saliva al saber lo que vendría luego y sabía que le encantaría. Al acercase al sexo de Yunho, Jaejoong pudo ver más claramente como de la punta de este salía aquel liquido casi transparente. Oprimiendo un poco el pedazo de carne, el rubio comenzó a pasar el pene de Yunho por todo el contorno de su rostro lamiéndolo de vez en cuando, cuando este pasaba por sus labios.
Yunho estaba que no se la acababa, Jaejoong podía ser inocente de vez en cuando, pero cuando se trataba de hacerlo encender el era el número uno. Jalando no muy fuerte los cabellos del rubio, Yunho dirigió la boca del chico hasta su miembro el cual seguía a pocos milímetros del jovencito. Jaejoong sonrió ante eso y tomando el miembro del chico con las dos manos metió este en su boca tragándolo todo de una sola vez. Yunho gimió fuertemente al sentir como la boca de Jaejoong comenzaba a succionar su pene presionándolo deliciosamente. La mojada cavidad bocal del chico pronto dejo de la misma manera el pene del moreno. Jaejoong podía sentir como el miembro del moreno se ponía aun más duro, seguramente estaba a punto de llegar así que cuando escucho que los jadeos del pelilargo incrementaron, comenzó a mover el pene de Yunho pasándolo nuevamente por el contorno de su rostro. Su boca estaba completamente abierta esperando recibir toda la semilla de Yunho en esta.

− ¡Ahhmm!...

Jaejoong comenzó a tragar el semen que caía en su boca mientras que algo de aquella sustancia se derramaba por sus mejillas y contorno de los labios. Yunho estaba completamente sorprendido por los actos de Jaejoong, esto había sido lo más erótico que nunca hubiese visto.
El rubio cerro por unos momentos uno de sus ojos ya que algo del semen de Yunho había caído cerca de este. El moreno sonrió un poco y jalando el cabello de Jaejoong, acerco el rostro del joven al propio para poder lamer aquello que aun sobraba de su semilla. Jaejoong ayudo al chico pasando su lengua por todo el contorno de sus labios y antes de que pudiera volver a meter su lengua a su propia boca el moreno atrapo está comenzando a lamerla por fuera de ambas cavidades bocales. Jaejoong intento incorporarse para poder juntar sus labios con los de Yunho. El ultimo tomo el rostro del chico con sus dos manos para así terminar aquella tarea que Jaejoong había comenzado.

−Delicioso…
−Lo hiciste de maravilla, Boo… ¿Cómo aprendiste a hacer eso?
−Hehehe… no lo sé, supongo que solo se me ocurrió ahorita.
−Pues fue realmente bueno.
−Gracias…

Los dos volvieron a juntar sus labios en un apasionado beso. Estaban tan concentrados en aquel acto que no se dieron cuenta que Junsu tocaba por la ventana esperando que alguno de los dos le abriera. Dado que esto no pasaba el chico acerco su rostro a la ventana para ver que estaba pasando allí. Se sonrojo un poco al ver como los chicos se comían el uno al otro, pero eso no había sido lo que hizo que hasta sus orejas se pusieran como dinamita, sino que al inspeccionar a los chicos se dio cuenta que el miembro de Yunho aun seguía fuera de su pantalón y que la mano de Jaejoong aun sostenía este.

Junsu trago saliva y comenzó a tocar más fuertemente despegando su rostro del vidrio. En está ocasión los chicos si escucharon así que rápidamente se desapartaron para poder comenzar a arreglarse. Yunho abrocho nuevamente su pantalón asegurándose que su cierra estuviese arriba, por otro lado lo que Jaejoong quería era lavarse el rostro, porque aun que Yunho ya había lamido todo el semen de este, no podía evitar sentirse apenado.

−Chicos…
− ¿Qué pasa, Junsu? –las mejillas de Jaejoong estaban más rojas que un tomate, pero después de lo que habían hecho era seguro que estuvieran así.
−Que ya se han tardado, hyung y los demás chicos ya están desesperados, ya queremos desayunar.
−Lo sentimos, Junsu.
−Bien, asegúrense de bajar sus mochilas porque no regresaremos a la camioneta hasta mañana o solo que lo necesitemos.
−Claro…
−Kyahyahya…
− ¿De qué te ríes? –pregunta Jaejoong molesto.
−No de nada… dense prisa chicos.

Las personas que estaban enteradas de la relación de los chicos no dejaban de cuchichear entre ellos y reír al ver la forma en la que Yunho y Jaejoong habían llegado, sin olvidar que habían tardado mucho haciendo quien sabe qué cosa.
Changmin y Junsu eran los más animados con eso, Yoochun parecía solamente hacerle burla a su amigo Yunho al recordar la tonta razón por la que este había comenzado a masturbarse… bueno, ahora que lo pensaba bien no había sido una tonta razón del todo, es que su Junsu también se le había pasado saltando todo emocionado mientras sonreía al ver el hermoso paisaje desde la ventana de la camioneta.

−Te digo que si, Min… yo los vi.
− ¿Los viste haciéndolo?
−No bueno, no creo que hayan llegado hasta la última base pero cuando me asome por la ventana pude ver claramente como Jaejoong tocaba el… el ya sabes que de Yunho.
− ¿tenía su mano dentro de su pantalón?
−No, estaba fuera de su pantalón.
−Hajaha… ¿viste el mini Yunho de Jaejoong?
−Si… pero eso no importa el punto es que se estaban besando pero… realmente besando cuando los encontré y Jaejoong sostenía el… mini Yunho y se veía que estaba…
−Vacio…
−Bueno si, se veía… ya no me hagas decir estas cosas.
−Bueno lo que sea, ya te entendí no tienes que explicármelo con manzanitas.
− ¿Crees que se lo vayan a montar en la casa de campaña?
−Espero que no, no me dejarían dormir.
−Ya lo sé, bueno como sea.
− ¿Chicos saben que puedo escuchar todo lo que están diciendo? >.<
−Relájate, Jaejoong.
−Es que…
− ¡Hyung! –Junho que iba a algunos cuantos metros de los chicos se detuvo al escuchar el grito de su hermanito.
− ¿Qué pasa, Junsu?
− ¿Falta mucho para llegar? –el pequeño hizo un puchero, sus piecitos ya comenzaban a doler.
−Nop, según Jae ya no falta mucho. Por cierto, Jaejoong, no te alejes de mi, se supone que tu nos estas guiando.
−Lo siento –rubio se volvió a apresurar para poder alcanzar al gemelo.

Así los chicos siguieron molestándose unos a otros sobre lo que había pasado en la camioneta, Junho y Kame eran los únicos que no decían nada y aun que el último sospechaba lo que había pasado prefirió no decir ni una sola palabra. Changmin y Junsu seguían platicando sobre lo mismo, en ocasiones el menor le hacía comentarios sobre lo que había pasado entre Yoochun y el otro joven porque si mal no recordaba, Yoochun también le había hecho sexo oral a Junsu cuando estos salían. Junsu no dejaba de sonrojarse alegando que era mejor dejar ese asunto a un lado y concentrarse en Jaejoong.

−Pues creo que ya hemos llegado.
−Claro que ya hemos llegado, el lago es enorme…
−Tienes razón.
− ¡Chicos dense prisa, ya llegamos! –grito Junho a los otros chicos que se habían quedado atrás.

En cuando los chicos escucharon esto comenzaron a correr a donde se encontraban Junho y Jaejoong. Junsu fue el primero en llegar, su vista se abrió de sobremanera al ver el hermoso paisaje, era una suerte que casi la gente no fuera a ese lugar ya que seguramente echarían a perder tanta hermosura. Changmin al igual que el pequeño castaño se quedo admirando lo hermoso del lugar.

Después de buscar un buen lugar para poner sus tiendas de campañas y poder comenzar a almorzar ahora, Jaejoong se ofreció a preparar todo para que los chicos pudiesen alimentar sus propios estómagos vacios. Bueno casi los de todos estaban vacios excepto el de Changmin ya que el pequeño se había preparado algo desde la noche anterior para que en la mañana no se molestara en absoluto.

Mientras Jaejoong preparaba todo, Junsu, Junho y Changmin se encontraban en la orilla del lago jugando con el agua. El primero no había olvidado una pelota de Fútbol así que él y su hermano habían comenzado a jugar, Changmin ahora solo los observaba, en su opinión el Fútbol no era lo suyo así que prefirió solamente sentarse en unas rocas a la orilla del agua mientras los otros dos se divertían de la mejor manera que Junsu sabia.

Yunho y Yoochun se encontraban intentando descifrar como debían colocar las tiendas, no era tan difícil a decir verdad así que pronto ya habían terminado de acomodar una de ellas. Era obvio que nadie les estaba prestando atención así que decidieron acomodar las de sus demás compañeros. Jaejoong no contaba con una, ni Changmin, así que en total solamente eran tres tiendas… y siete personas.

−Jaejoong y yo en una… Tú y Junsu en otra, y los otros tres en otra –concluyo Yunho.
−Oye Yunho yo se que eres un enfermo mental, pero esto es demasiado.
− ¿Qué tiene de malo? –pregunto Yunho con un puchero.
−Junho no permitirá que Junsu y yo durmamos en una tienda solos, seguramente el está pensando en compartir esta con su hermano.
−Tienes razón, ¿entonces con quien… con quien dormirás? Si Jaejoong y yo vamos a dormir juntos, solos, y Junho y Junsu solos… entonces tú dormirás con los otros dos.
−No creo que Kame quiera tener a tanta gente con él, el trago su…
−A mi no me importa…
−Kame, nos asustaste… jeje…
−Lo ciento, chicos, bueno como decía, si tú quieres dormir con Jaejoong solos está bien. Además no tiene nada de malo que dormimos nosotros tres juntos, la tienda es muy grande.
−Cierto es un poco más grande que las otras dos.
−Bien, entonces no se preocupen tanto.
−Gracias, Kame.
−De nada.

El chico volvió a irse tan rápido como había llegado. Se sentó junto a Jaejoong para ayudarlo un poco.

− ¡Chicos! ¡Ya todo está listo!
−Ya vamos, Jae hyung.

Como siempre Changmin había sido el primero en llegar. Las piedras eran algo incomodas para usarse como sillas pero que mas daba, no podían hacer otra cosa. Junsu y Junho también se les unieron y los últimos en llegar fueron Yunho y Yoochun.

El almuerzo había sido por demás delicioso, todos los chicos se encontraban riendo mientras Junho les contaba sobre las tonterías que solía hacer Junsu cuando estaba pequeño. Yoochun no podía evitar reír como los demás al imaginar a su niño cantando en el funeral de un ajusshi que no conocía porque le había parecido que los rostros de todas las personas estaban demasiado tristes. Las personas de hecho habían agradecido eso, nadie podía estar molesto con un niño tan simpático y mucho menos cuando cantada de aquella forma tan graciosa. Junsu tan solo tenía cuatro años así que su voz aun era algo infantil y desafinada, pero demasiado dulce sin duda alguna.

−También estuvo un tiempo donde no importaba lo que fuera, siempre se ponía a bailar en medio de la sala…
− ¿A bailar?
−Sí, tenía como un año, y no importaba si solo se trataba de un comercial o del estilo de música que fuera, el se ponía a bailar importándole muy poco quien estuviera alrededor. Incluso cuando comíamos en la cocina y mamá prendía la licuadora o cualquier otro electrodoméstico que hiciera ruido, tu seguro que veías a Junsu bailar.
− ¿De verdad? Eso es muy lindo… Pero tú tenias su edad, ¿Cómo lo sabes?
−Mamá me lo conto y tenemos varios videos de prueba.
−Ya me imagino a mi hyung…
−Si…
− ¡Bueno! Ya dejen de burlarse de mí, ¿okay? Era un niño y no sabía lo que hacía –se quejo Junsu aun mas apenado al saber que Yoochun estaba tan solo allí alado de ellos escuchando todo.
−No seas así, Junsu, ¿no recuerdas la vez cuando jugabas futbol y como terminaste estampado en uno de los postes de la portería?…
− ¡YAH! E dicho que se callen así que por favor dejen de hablar de mí, Jaejoong también…
−No, no, no, de mi no vas a ponerte a hablar niño…
− ¿Por qué no? No es justo…
−Pues nada… mejor ¿Por qué no vamos a dar un paseo? Seguro que será divertido.
−Jaejoong tiene razón, podemos ir a explorar un poco –comento Yunho que ya estaba algo cansado de tantos chismes. No quería llegar a él, porque Yoochun sabía demasiadas cosas suyas personales que prefería dejarlo de lado.
−Así es, por lo menos Yunho si es coherente –comento Jaejoong con una sonrisa en los labios.
−Si claro, ¿Quién era el que se estaba riendo como loco hace unos cuantos minutos? –pregunta Junsu sarcásticamente recibiendo solamente una mirada asesina de su amigo rubio mientras este le sacaba la lengua.
− ¿Creen que este bien que exploremos? –pregunta esta vez Junho algo dudoso al ver los grandes árboles del bosque.
−Bueno, de hecho yo conozco un lugar a pocos metros de aquí muy lindo… no hay muchos árboles, el pasto es verde y hay muchas flores, creo que es un lugar muy lindo para pasar el rato…
−Si vamos allí.
−Gracias, Yunnie, tu si me entiendes.

Todos solo miraron a Jaejoong algo confundido, Yunho solamente sonrió al pensar que el rubio se estaba comportando algo infantil por así decirlo, pero eso no importaba porque de hecho le agradaba esa forma en la que el chico actuaba y aun más si se trataba de… de actuar inocente mientras tenían su intimidad.

Y no cabe decir que en cuanto los chicos llegaron al lugar del que Jaejoong estaba hablando, estos se transformaron a unos pequeños niños como si nunca en su vida hubiesen salido ni al parque. Junsu y Jaejoong comenzaron a correr por todo el lugar al encontrarse con cientos de flores moradas que salían volando al momento que los dos chicos corrían entre ellas. Changmin comenzó a sonreír un poco pero a diferencia de los otros dos chicos él prefirió ir a sentarse a un lado de aquel hermoso y pequeño arrollo que cruzaba la pradera. Junho, Yunho y Yoochun se sentaron bajo la sombra de un árbol para descansar un poco y tener una mejor vista de los dos hermosos chicos que no dejaban de reír y saltar por todas partes sin importarles que ellos les vieran de aquella forma. Kamenashi prefirió subir a la rama de aquel árbol en el que los otros tres chicos descansaban. Busco la rama perfecta para poder recostarse en ella y descansar un poco respirando aquel perfecto aire fresco.

Después de algunos cuantos minutos, Changmin volteo a ver lo que hacían sus amigos… la imagen era perfecta. Con una gran sonrisa en su rostro el moreno saco su cámara digital para poder tomar fotografías de tan hermoso momento. Una, dos, tres… el menor casi lleno la tarjeta del aparato haciendo varias tomas para después borrar las que no le habían gustado o las que habían salido algo mal por culpa de la luz o el movimiento.

− ¡Minnie! –se escucho la voz de Jaejoong mientras movía sus manos de un lado a otro para que el moreno volteara a verlo.
− ¡Min! Ven a ver lo que hemos encontrado –grito igualmente Junsu aun mas emocionado que su rubio amigo.
−Voy…

Era una lástima estar pisando tan hermosas flores, aun que sabía que volverían a crecer o que de todas formas estas morirían en invierno ya que esa fecha se estaba acercando, así que eso hizo que su culpabilidad no fuera tan grande. Corriendo un poco después de ver las caras de ansias de sus amigos, Changmin por fin llego hasta donde los dos jóvenes.
Era una hermosa y amplia familia de conejos. Changmin sonrió al instante cuando vio a los pequeños animalitos que se escondían junto con su madre y padre, seguramente asustados de sus presencias. Algunos de ellos parecían más aventureros ya que parecían verlos con curiosidad mientras Jaejoong y Junsu intentaban acercarse a ellos.

−Tomare unas fotografías.
−Sip, son tan lindos… Quiero llevarme uno, Min…
−No seas tonto, hyung, sabes que ellos tienen que quedarse en su casa con su familia –dice Changmin algo molesto por el comentario de Junsu.
−Okay, pero no te molestes conmigo.
−Lo siento, bueno ya… tomare las fotografías.

Volviendo a su estado de ánimo de antes, el moreno comenzó a tomar las fotografías. Algunas de los otros dos chicos que intentaban acercarse más a los conejitos, los cuales simplemente salían corriendo de ellos. Algunas otras eran de los dos jóvenes simplemente haciendo caras graciosas (todas lindas) y poses algo extravagantes. Sus risas eran tan fuertes que fue inevitable que los otros tres chicos se les unieran.

−Quiero tocar uno –dijo Junsu con un puchero en los labios.
−No dejaran que los toquen –razono Junho algo triste por no darle lo que quería a su hermanito.
−Pero…
−Yo intentare capturar uno –dijo Yoochun con una sonrisa en los labios. El haría lo que fuera por Junsu y si el chico quería tocar aquellos animalitos pues eso era lo que tendría. Junsu lo miro con una sonrisa aun mas grande que la de antes, mordió su labio inferior al pensar en lo lindo que era su Chunnie al estar haciendo eso por el… no cavia duda que ese era el hombre que mas amaba en la tierra.
−Gracias… −contesto el chico con un sonrojo en su rostro.
−No te preocupes…

Todos los jóvenes decidieron sentarse mientras veían como Yoochun intentaba capturar a alguno de los animalitos. Era gracioso ver al chico correr tras los pobres conejitos, los chicos reían un poco a excepción de Junsu que tenía los ojos completamente pegados al cuerpo del pelinegro. Lucia tan guapo de aquella forma, tan varonil y deportivo. Comenzó a lamer sus labios inconscientemente, tenia ganas de gemir y no entendía la razón. Dios mío ¿Qué carajos le estaba pasando?

− ¿Te sientes bien, hyung? –pregunta Changmin un poco preocupado al notar las mejillas sonrojadas de Junsu.
− ¿Eh?
−Que si te encuentras bien, te notas algo agitado –y realmente estaba preocupado, digo la mente de Changmin en esos momentos no habían asimilado que se trataba de ‘deseo’, lo que tenia Junsu.
−Yo… si, si estoy bien… es solo que tengo algo de sed, hace calor… eso es todo…
−Toma… −Changmin le ofreció agua de su cantinflora ya que había sido el único que había pensado y había llevado una.
−Gracias, Min.
−No hay porque, hyugn…

Minutos después de que Junsu sintiera su temperatura subir a medidas que nunca creyó al tan solo ver a Park Yoochun, el ultimo se acerco con una sonrisa en el rostro y uno de los conejos agarrado por las orejas. Junsu estaba más que feliz al ver al pequeñín en las manos de su ex novio, pronto corrió hasta donde se encontraba el chico para poder alcanzarlo y tomar al blanco animalito en sus brazos. Al principio tuvo que tomar la cosita con fuerza para que este no saliera corriendo de su abrazo, pero cuando el chico se sentó nuevamente con los demás jóvenes y comenzó a acariciar al peludo amiguito, el pequeño pareció tranquilizarse acomodándose aun mas en el castaño que no dejaba aquella sonrisa de sus labios.

Yoochun por otra parte estaba más que feliz al haber complacido a su lindo niño, se sentía orgulloso de su trabajo ya que el haría lo que fuera por Junsu. Jaejoong se acerco al gemelo más pequeño para poder ver de igual forma al conejito que ahora parecía estar quedándose dormido. Las sonrisas entre los dos chicos no podían faltar mientras miraban al pequeñín con ternura.

−Chicos…
−Oh, Kame… has dormido demasiado, ¿no crees? –comenta Changmin sorprendido de que el chico se hubiese quedado dormido en aquel árbol.
−Sí, es que no había dormido la noche anterior, digo, no muy bien que digamos y aun tenía algo de sueño, pero ya estoy bien…
−Sabes que tú no eres de los que aguantan una desvelada, Kame, deberías de dormir mas.
−Ya lo sé, Junho, pero es que mi perrita estaba enferma y estuvo llorando toda la noche.
− ¿Le paso algo a Kiki? (el nombre de una de mis perritas, su mami se llama katy)
−Se lastimo sus dos patitas traseras así que no ha podido moverse.
−Lo siento.
−No te preocupes, el veterinario dijo que estaría bien, que solo era el dolor, pero que no le había pasado nada de gravedad.
−Ya veo, bueno aun así iré a visitarla uno de estos días.
−Gracias, Junho.
−Yo también quiero ir –interrumpió Junsu con un puchero en los labios.
−Claro que iremos, tontito…
−No me digas así, hyung...
−Okay, ya, lo siento…
− ¿No creen que sería mejor si ya comenzamos a irnos? –hablo Changmin mientras veía el cielo.
−Tienes razón… okay, chicos creo que nos vamos al lago, ya…

Nadie dijo nada ante las palabras de Junho, todos se levantaron de sus lugares para poder seguir la caminata hasta donde se habían instalado antes. Junsu había dejado ir al pobre animalito blanco con todo el dolor de su alma, le había pedido permiso a su hyung para conservarlo, pero el chico le dio un rotundo no, así que sin más comenzó a caminar con los demás.

Mientras tanto en Seoul, LeeTeuk y KangIn se encontraban en un puesto de Ramen, un par de chicos acompañándoles mientras los cuatro reían divertidamente al recordar las cosas graciosas que habían pasado en la escuela esas últimas semanas.
LeeTeuk se encontraba sentado muy demasiado cerca de KangIn, y aun que sabía que al chico no le gustaba eso, al más grande no le importaba con tal de estar cerca de aquel chico.

−Entonces nuestro amiguito Yunho tiene competencia.
−Yo aun dudo que Jaejoong y Yunho estén saliendo.
−LeeTeuk, no hay que ser muy inteligentes para darse cuenta que esos dos se traen algo –le contesto KangIn algo molesto.
−Así es, es por eso que tengo que actuar lo más rápido posible.
− ¿Y de verdad te gusta ese rubiecito? Bueno no digo que no está lindo porque si lo está, pero a mí me gustaría solamente para coger.
−Claro que me gusta –contesto el chico algo molesto por la forma en que el joven se había referido a Jaejoong.
−Pues es divertido, Jaejoong seguramente ni siquiera sabe que existes.
−Es por eso que tengo que actuar pronto, no permitiré que nadie más se quede con él.
−Pues ten cuidado como ya te dije ese tal Yunho no te las dejara fácil.
−Pero… no lo sé, algo me dice que tengo oportunidad.

LeeTeuk estaba algo cansado de esa conversación, hablaban de Jaejoong como si se tratara de un trofeo y aun que él no le hablaba a este, aun así se sentía mal por él. El acompañante del pretendiente de Jaejoong se encontraba de igual manera que LeeTeuk, ni siquiera había hablado una sola palabra desde que KangIn y su amigo comenzaran a hablar de Jaejoong.

−Bueno yo creo que ya me retiro.
−Pero si acabamos de llegar.
−Es que había olvidado que tenía algo importante que hacer, pero nos vemos el lunes en la escuela.
− ¿Seguro que no quieres quedarte?
−No, de verdad tengo que atender esto, nos vemos chicos –LeeTeuk y KangIn asintieron.
−Tu amigo es algo raro, ¿no crees?
−En ocasiones.

Y aun que LeeTeuk sentía tremendas ganas de acompañar al chico fuera de aquel lugar donde esos dos solamente hablaban tonterías de Jaejoong, prefirió quedarse allí para poder compartir algo más de tiempo con KangIn.

Regresando al hermoso bosque los chicos ya se encontraban en donde se habían instalado en un principio. Junho, Yoochun y Yunho estaban intentando pescar algo delicioso, desde que Jaejoong y Junsu les dijeran que sabían cocinar pescado, pues se habían emocionado de tan solo pensar en el banquete que tendrían. Changmin y Kame se encontraban sentados en una roca mirando a los chicos aburrirse o de vez en cuando decepcionarse al no atrapar lo que querían.

Chngmin estaba seguro que algo andaba mal con Kamenashi, desde que habían ido por él a su mansión había notado algo muy extraño, pero ciertamente no se atrevía a preguntar, digo, que tal si se molestaba con el por estarse metiendo en lo que no le importaba.

Junsu y Jaejoong se encontraban descansando un poco en un tronco que se encontraba a la orilla del lago mientras miraban a sus enamorados y amigo intentar usar las cañas de pescar que de vez en cuando solían enredarse.( A/N: mi papá y tío son fanáticos de la pesca, así que todos los domingos que podemos vamos al lago que esta a una hora de donde vivimos, aun que claro hay mas, mas cercas, pero ese es el más lindo, y claro, yo también pesco de vez en cuando, digo es divertido lanzar la caña ^_^)

−Se ve que las cosas están más que bien contigo y Yoochun.
− ¿Lo crees?
−Sí, no entiendo la razón por la que quieres llevar a cabo ese plan tuyo si se ve que Yoochun muere por ti.
−Bueno, tienes razón por eso, pero no lo sé, siento que si no hago esto no podre sentirme completamente seguro.
−Deberías de confiar un poco más en el.
−Confió en el, en lo que no confío es en sus hormonas.
−De cierta forma tienes razón, los chicos son muy tontos…
−Jae, nosotros también somos chicos…
−Lo sé u///u pero somos ukes así que es diferente.
−Kyahyahyah, lo que tu digas, amigo.
−Ya pues, no te rías de mi que hieres mis sentimientos.
−Está bien.

− ¡Yunho!

Los dos chicos voltearon a ver lo que estaba pasando, Yoochun había gritado demasiado fuerte y los había asustado hasta la muerte.

−No lo dejes ir, idiota.
− ¡Pues ayúdame!

Yunho intentaba con todas sus fuerzas sostener la caña que estaba siendo jalada por un pez demasiado grande. Yoochun corrió hasta donde el chico para poder ayudarle a sostenerse y así poder traer al pez hasta la tierra firme. Junho al ver lo mucho que los chicos batallaban se les unió y con mucho trabajo los tres por fin terminaron sacando al gran animal que se movía de un lado para otro al ya no tener oxigeno para respirar, o agua, lo que sea.

− ¡Es enorme!
−Claro que es enorme, Changmin.
−Mira, Hyung, a Min ya se le está haciendo agua la boca.
− ¡Junsu hyung! No digas tonterías –por alguna razón las mejillas del menor se habían encendido.
−Okay, perdón…
−Yunho eres increíble.
−Gracias, Jae.
−Bien, ahora a nosotros nos queda cocinarlo.
−Sip, vamos Junsu.

Ese tarde los chicos comieron como nunca lo habían hecho. La carne del animal estaba tan deliciosa que los siete jóvenes habían sentido como iban al cielo ante tal exquisitez. (A/N: a mí no me gusta mucho el pescado ^.^)

0 Comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario \(*O*)/ ♥ ♥
o más bien... deja tus pensamientos pervertidos grabados en esta entrada XD