“Cuando la furia te supera”
“¿Qué, cuándo, cómo?” dije de forma nerviosa con el pánico recorriendo todo mi cuerpo.
“¿Por qué no mejor te sientas? La maestra me dijo con lástima.
Solo pude asentir con la cabeza y caminar a través de la clase, con todos pendientes de mis movimientos. Bajé mi cabeza para no hacer contacto visual con nadie. Me senté en el primer asiento vacío a la vista, en la segunda hilera de bancos del salón.
Tratando de no seguir llamando la atención, rápidamente me senté y saqué mi cuaderno comenzando a concentrarme en la voz de la maestra.
Al pasar 5 minutos, comencé a sentirme adormilado. La lección estaba siendo tan aburrida y el saber qué estaba enseñando la maestra lo hizo aun peor. Ya había leído el texto unas 5 veces, así que dejé que mi mente vagara hacía lo que haría después de clases. Lentamente comencé a ir hacia la tierra de los sueños.
Viéndome. Alguien estaba viéndome fijamente. Ya que soy sensitivo, cuando estoy dormido o cuando mi mente no está llena de cosas, mi subconsciente se encuentra en alerta, ayudándome, detectando cualquier peligro. Y ahora mismo, siento que alguien está mirando hacía mi, analizando cada detalle de mi cuerpo y haciéndome sentir incomodo. ¿Cómo puedes dormir sabiendo que alguien te mira?
Comencé a hacer que mi cuerpo despertara. Mi cerebro empezó a funcionar y lentamente abrí mis ojos. La luz me cegó por un momento, luego noté que el salón se encontraba vacío.
“Mierda” dije, cuando mi cerebro comenzó a funcionar completamente.
Escuché una risita tras de mi, así que volteé para ver de qué se trataba. Pude sentir la respiración de la persona en mi cuello. ¿Qué se supone que podía hacer en aquella situación? ¡Me congelé por supuesto! Mi boca se abría y cerraba sin emitir sonido alguno, esos profundos ojos cafés me tenían hipnotizado, no sabía cómo reaccionar…
“¿Disfrutaste tu siesta?” Yoochun dijo, con su picaresca sonrisa, sus ojos miraban directamente los míos y parecía que podía ver a través de mi alma.
Me abofeteé mentalmente. ¡Ahora actúo como una chica! ¿Qué tan embarazoso es eso? Yoochun solo se ríe al ver mi reacción. Sin que si quiera lo notara, él cerró la distancia entre nuestros rostros y toco mis labios. Lamió mis secos labios y jadeó al succionar mi labio inferior. Al abrir mi boca, el ingreso de su lengua a mi cavidad fue simple.
Soy sensible, pero al serlo esto también trae desventajas. Esto es porque puedo sentir las emociones más intensas que un ser humano normal, y ahora mismo la pasión y el calor es lo único que puedo sentir. Estoy tan perdido por el calor que sin notarlo puse mis brazos alrededor de su cuello y lo acerqué hacía mi. Comencé a mover mi lengua.
Me estremecí cuando comenzó a degustar cada parte de mi boca, como si yo fuera una especie de dulce caramelo.
Protesté cuando sacó su lengua de mi boca y rompió el beso.
“La próxima vez” dijo. Lo miré con expresión confundida.
Antes de que pudiera hacerle alguna pregunta, el salió del salón o más bien debería decir que se desvaneció, pues en un abrir y cerrar de ojos el ya no se encontraba.
Luché para recuperar la normalidad de mi respiración, tratando de ordenar mis pensamientos. Me calmé y comencé a ordenar las cosas dentro de mi bolso. Lentamente caminé fuera del salón de clases, aún pensando.
Gritos desde el corredor me hicieron mirar…
“¡DEJA DE ACTUAR COMO SI ESTA ESCUELA TE PERTENECIERA!”
“¡BUENO, LO SERÁ UNA VEZ QUE MIS PADRES MUERAN!”
Los alumnos se aglomeraron en torno a 2 estudiantes que estaban peleando. Pude sentir la ira de ambos. Tomando una gran bocanada de aire, traté de calmarme una vez más. Al ser sensitivo, siento al doble la ira que ellos sienten. Me he entrenado para poder mantener bajo control las emociones negativas por lo que no tengo problema para mantenerme bajo raya. ¡No es fácil ser sensitivo!
Traté con fuerza de concentrarme en mi propia mente, para poder controlar mi ira. Justo cuando estaba calmado, tratando de poder respirar con normalidad, una nueva onda de ira atravesó el lugar y llegó hacía mi Me encontré una vez más aturdido.
“¡NO ESTAS EN CONDICIONES DE LLAMARTE UN KIM!”
“¿ENTONCES, QUE PASA CONTIGO? IMBESIL”
¿Por qué había tanta ira entre ellos? No puedo creer que esta estúpida pelea este afectándome tanto. Como hay tanta furia pasando a través de mi, siento unas inmensas ganas de golpear a alguien. Miré alrededor del corredor, nada más que paredes. Otra ola de ira pasó a través de mi, sentí mi temperatura aumentar.
“Changmin…” Alguien dice mi nombre, pero me rehúso a voltear, mi nivel de ira es demasiado peligroso.
“Changmin…” Alguien toca mi hombro, pero ignoro la voz.
“Al-aléjate de-de mi…” digo, con la voz distorsionada por la ira.
“Changmin…” la persona se puso frente a mi, mirándome fijamente.
“¡¡ALEJATE DE MI MICKY!!” Grité, dando un paso hacia atrás, mi temperatura aumentando.
Nos quedamos así por un momento, pero eso no significa que mi furia disminuyera. Es imposible, la presencia de Micky aquí mismo frente a mí, solo me hace sentir más furia.
“¿QUIÉN DEMONIOS PIENSAS QUE ERES?” le grité, los pensamientos en mi cabeza comenzaron a dar vueltas y perdí el control.
“¡TRATANDO DE RECLAMARME COMO SI YO FUERA OTRO MÁS DE TUS JUGUETES! ¡¡SOY UN SER HUMANO Y SOLO PERTENESCO A MI MISMO. MALDITO SEAS POR HACER CREER A TODO EL MUNDO QUE SOY TUYO!!”
Le grité con furia, lo levanté de su camisa.
Ahora el bullicio se había silenciado. No había notado que ahora éramos nosotros quienes acaparábamos la atención de todos. Todo lo que yo podía procesar era a mi y Micky solos…
“Haz algo al respecto entonces…” dijo, lo suficientemente fuerte para que todos escucharan.
“No creas que porque eres popular en esta escuela…” apreté aún más mi agarre en su camisa.
“estoy asustado de lastimarte, porque créeme, no lo estoy.” Dije, mirándolo fijamente.
“Entonces lánzame un golpe. ¿Qué estas esperando?” el dijo, aún calmado.
Si él me hubiera gritado, probablemente habría podido retroceder. Pero al ver su calmado rostro, no pude controlar mi furia. Estaba más que enfadado y el tenía el descaro de mantenerse así de calmo. Levanté mi otra mano y le di con mi puño justo en el rostro. El se tambaleo por el golpe, pero mi agarre en su camisa lo previno de caer.
“TE ODIO” Lo golpeé en el estomago.
“ODIO ESTA MALDITA ESCUELA” Le golpeé la cara nuevamente.
“ODIO SER EL CENTRO DE ATENCIÓN” Le di en el estómago una y otra vez, lágrimas cayendo por mi rostro.
Todo el resentimiento que tenía desde que ingresé en la escuela, fue volcado hacía Micky. Cada golpe que le di fue duro, ya que soy cinta negra en karate. Mi odio sacó lo peor de mí y no puedo controlarlo. Cuando levanté mis manos para golpearlo por décima vez, alguien tocó mis brazos. Quise tirar esos brazos, pero el agarre se hizo más fuerte, obligándome a mirar de quien eran.
“Yo creo que es suficiente por ahora…” un hombre con cabello negro azabache, me dijo.
De pronto, todo estuvo claro para mí. Los estudiantes mirándome, ojos llenos de ira. Miré hacía Micky, al suelo. Estaba cubierto de golpes y con su boca sangrando, respiraba con dificultad. Me alejé de él. El se sentó en el piso, aun en dolor como pude notar. Miré hacía mi mano ensangrentada. La sangre de Micky.
Esto nunca me había pasado antes, nunca había perdido el control. Tropecé hacía atrás, cuando la realidad me golpeó de repente. Confuso, podía sentir mi mano y las miradas hacia ella. Con una última mirada a Micky, salí corriendo. No sabía dónde estaba, pero continúe corriendo. ¿Por qué me tenía que pasar esto a mí? ¿Por qué no puedo tener una vida normal? ¿No lo merezco a caso? Me detuve cuando sentí un dolor en mi estómago.
“¿Te sientes mejor ahora?”
Me volteé hacía la voz, que resultó ser del mismo chico de cabello negro, quien me miraba con una sonrisa. El debió haber salido corriendo tras de mi ya que su respiración era dificultosa, pero no podía apreciar sudor en su frente.
Me dejé caer en la acera del piso, pensando en lo que había hecho hace solo un momento.
“¿Qu-qué he he-cho?” dije, sin saber por qué lo había hecho.
“Shh…” el chico dijo, tocando mi frente.
“Todo estará bien…” pude sentir una especie de luz saliendo desde su mano, mi cabeza de pronto se sentía pesada y la oscuridad me envolvió.
“ Todo estará bien…” el chico le dijo al joven dormido, mientras lo levantaba.
waooooooooo este fic esta bueno con ganas
ResponderEliminaroooo quien sera ??? min le pego a yoochun ooo pobre min al tan sensitivo tiene a veces consecuencias
ResponderEliminarAigo!~ ya no entendi autora pero no importa seguire leyendo aver si me despejo las ideas kekeke
ResponderEliminara mi tb me confunde un poco pero me encantaaaaaaaaaaaaa!!!!! a siguiente cap :)
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