Las reglas las pongo yo cap 3

Changmin

Le mire.
- Crees que no tengo ni idea de que como es este trabajo, y en eso te equivocas…me di cuenta antes de lo que crees…-me acerque a su oído y le susurre- aunque seas mi jefe, las “reglas de toqueteo”las pongo yo…, no tú- me separe de él y mire su rostro, al parecer no se esperaba una reacción así de mi parte.
Me incline.
- Si me disculpa, volveré al trabajo…-le mire y con una sonrisa, le dije-hay gente que requiere de mis servicios.-me di media vuelta y eche a andar.
Había dejado sin habla a mi jefe…he dejado una buena impresión ¿?
Sonreí victorioso. Este trabajo me empezaba a gustar aun más, ahora que tengo un jefe tan sexy y guapo, y al parecer de los que no se dan por vencido hasta conseguir lo que quieren.
Volví al trabajo, ya que me esperaba una noche muy larga y demasiado divertida.

Al día siguiente me lo pase prácticamente durmiendo, ni siquiera me levante para comer, el cansancio me ganaba. El inminente ruido del timbre me despertó.
Espere haber si se iban, ya que me daba pereza levantarme. Pero nada, seguían timbrando. Me levante de la cama, y en bóxer fui a abrir la puerta.
- sii ¿? -.-… - unos hombres de traje estaban delante de mi puerta.
- Es usted el señor Changmin ¿?-el que me hablo me miró de arriba a bajo.
- Si…-le mire la cara de confusión-es que me acabo de levantar…-hizo una sonrisa e medio lado.
- Va a venirse con nosotros a su nuevo piso en el club-hizo un gesto con la mano a los señores con traje negro, y estos entraron en mi piso y empezaron a recoger mis cosas- bueno, ellos se encargan de sus cosas.
- Vale… -.- - bostecé- pues vamos.
- Señor va a ir así ¿?
- …- me miré-bueno...-me duche y me vestí en el baño. Una camiseta azul a juego con las zapatillas y un pantalón negro.
Luego seguí a aquel tipo hasta una limusina aparcada delante del edificio. Me abrió la puerta y entre, el tipo entro detrás mia.
Me fue explicando porque me cambiaba de piso (al parecer todos los camareros viven en unos pisos lujosos que están en el mismo edificio donde esta el club), y que no se permitía salir del edificio sin permiso. Eso ya no me gustaba tanto.
Me acompaño hasta mi piso, mis cosas ya estaban en sus sitios correspondientes” O_O que rapidez”
- Yo me retiró- se fue dejándome solo, me tiré sobre la cama y miré la hora.
- Dios!! Aún son las ocho…faltan 2 horas para que entre-me levante de la cama y fui mirando por todas las ventanas hasta encontrar lo que buscaba, las escaleras de emergencia. Cogí una chaqueta, abrí la ventana y salte hacia fuera. Baje rápidamente las escaleras hasta llegar abajo, había unos tíos a varios metros de mi pero no les preste atención.
Me encamine hacia la ciudad, me puse la chaqueta ya que no quería cargar con ella y me mezcle entre la multitud.
Ya eran pasadas las 9, aquellos tipos que había visto en un callejón aún me seguían. Era hora de volver al club. A mi izquierda ví un callejón, me metí por él y eche a correr. Conocía bien el lugar por lo que sabía por donde meterme para ir a dar al club. Miraba hacia atrás de vez en cuando, aunque estaban un poco lejos, me seguían de cerca.
Logré llegar hasta la entrada del club, donde estaba uno de los porteros que se me acerco. Me conocía de la noche anterior, aunque había empezado ayer la gente empezaba a hablar de mí.
-Estas bien ¿?-lo mire cargando mis manos en mis piernas, estaba jadeando de tanto correr.
- Unos…haha…unos….-señale con el dedo hacia la dirección de donde venia corriendo-unos…tíos…seguían…-el portero miró hacia detrás y alzo una ceja.
- Ahí no hay nadie…-mire hacia atrás, seguramente se habían ocultado.-oye te están buscando, supuestamente no puedes salir, así que entra por la puerta del camerino…ahí aún no miraron.- le sonreí.
- Gracias- le dije y entre por la puerta del camerino como me había dicho.
En el camerino había una ducha, por lo que me duche rápidamente para quitarme el sudor. Mientras me abrochaba los pantalones, entraron lo demás a cambiarse seguidos por mi jefe y al parecer su secretario, era el mismo tipo que me fue a buscar a mi antiguo piso para traerme aquí.
Se me acercó el camarero que me hablo la noche anterior, Daniel, era su nombre.

- Te han estado buscando…- me miró y se me acerco mas-saliste verdad ¿?-me dijo en un susurró. Yo le sonreí y él lo entendió como un sí, ya que sonrió también.-que capullo!!-y se echo a reír.

El secretario de mi jefe se me acerco con una mirada fría.

- Señorito Changmin, donde ha estado ¿?- Daniel se alejo para ir a cambiarse como lo hacían los demás y alguno ya estaban listos.

Miré a aquel tipo.

- Pues aquí en el camerino…cambiándome, o no lo ve?- el tipo parecía molesto…pero me daba igual.
- Termina de cambiarte y el resto a trabajar-dijo y salió con los demás camareros además de los guardaespaldas del jefe, dejándome a solas con él, que no dejaba de mirarme.
Aun no estaba completamente vestido así que fui a por una camisa.
- Cuantos eran ¿?-me sorprendió su pregunta.
- Lo qu-qué ¿?- me hice el tonto pero mi voz me delataba.
- Cuántos tipos te siguieron ¿?
- Cómo lo sabes ¿?- me gire para mirarlo.
- Vaya, el primero que me trata de tú…-sonrió.
- Te he preguntado que como lo sabes!! ¿?-sin poder evitarlo levante el tono de voz y eso hizo que se pusiera serio.
- Todo lo que me pertenece, lo tengo vigilado, muy bien vigilado…-me eche a reír y eso a él le molesto aun mas. Me puse la camisa y solo abroche uno de los botones, pero no en el agujero en donde le correspondía sino uno más para arriba. Cogí una corbata sin nudo y me la eche al cuello. Fui hacia la puerta….
- Qué tiene tanta gracia ¿?!!!-me grito, estaba realmente enojado.
- De tu propiedad ¿?..ja!!!- puse ambas manos a los lados de su cuerpo y me acerque a él. Me comía con la mirada…-yo…- pegue mi rostro al de él, sujetando su mentón y pegando sus labios casi a los míos creando un pequeño rose.-no soy de tu propiedad.- sonreí- tu serás el que dentro de poco me pertenezca a mi…-me lamí el labio superior y me separé de él.
Era realmente sexy: su mirada, sus labios, su cuello…todo en él era ya sexy, no se ni como podía resistirme. Tenía tantas ganas de devorar esos labios, besar ese cuello, acariciar ese cuerpo…pero, este juego de resistencia es muy excitante y se esta poniendo muy interesante.
Me incorporé y con una sonrisa, salí por la puerta para comenzar con mi trabajo.


Yoochun

Ya pasaron varias semanas desde aquel día en el que se atrevió a hablarme de aquella forma y de decirme que no me pertenecía. Cómo se atrevía!!! ¿? Dios, por culpa de él tengo un cabreo encima que no hay quien me lo saque, y ya hace unas semanas que no tengo una noche de sexo como dios manda. No puedo pensar en otra cosa, solo le tengo a él en la cabeza.
- Señor, ya hemos llegado al club- como siempre, llego dos horas antes de que se abra el club y antes de que los empleados comiencen a trabajar.
- Gracias- baje de la limusina, exhibiendo mi esmoquin negro con una camisa blanca abierta y una corbata floja y mal puesta.
Cuando me disponía a entrar, veo a alguien salir del callejón que da a la parte de atrás del edificio. Se me hace conocida su ropa por lo que decido seguirle, pero antes…voy junto al portero.
- Dame tu sombrero-él me lo da y yo le suelto 100 € que coge con una sonrisa
Me pongo el sombrero y sin hacerle caso a mi secretario comienzo a caminar detrás de aquel sujeto. Al parecer no era el único que lo seguía, desde hace un rato, cuatro hombres lo seguían muy de cerca.
De repente echa a correr por un callejón y aquellos cuatro tipos se dividen en dos grupos, dos de ellos le siguen y otros dos cogen por otro atajo. Los sigo hasta que se detienen, me escondo para que me no me vean y asomó la cabeza para saber el motivo.

- Changmin ¿?- sabía que se me hacía conocida esa ropa- la que le va a caer cuando llegue la club-eche a andar, hasta que oí hablar a uno de los tipos. Me entró curiosidad de porque le perseguían…

- Mirar lo que tenemos aquí chicos-dijo el más alto de ellos.
- Qué es lo que queréis de mí ¿?-el rostro de Changmin no reflejaba tener miedo.
- Tu calla marica!!!-dijo el más canijo que tenía una nariz enorme…parecía un pepinillo O_O. Changmin se echo a reír, y los tipos pusieron cara de confusión y se miraron entre ellos. Estaban sorprendidos por la reacción al igual que yo.
- Marica ¿? Me has llamado marica ¿?- se puso serio- yo soy más hombre que todos vosotros juntos ni siquiera me llegáis a la suela del zapato.
-
Uno de los tíos se le acerca por detrás, Changmin se da cuenta demasiado tarde y recibe un puñetazo. Casi pierde el equilibrio pero se mantiene de pie. Tiene un corte en el labio.
- Qué ¿?, no devuelves el golpe ¿?
- No quiero mancharme…-sonríe. Pero este chaval es imbécil, quiere que le den una paliza…lo pide a gritos!!!Hasta yo se la daría si se me pone así de idiota.
- Sabes lo mejor del club donde trabajas….-el más alto comienza a hablar-que vuestro jefe es un marica de cojones, eso si que es ser marica…- -.- se echan a reír.
Qué ¿? Se están metiendo conmigo ¿? Ahora sí que no se irán sin su buena dosis del día. Esta rabia que tengo acumulada por culpa de ese niñato la van a probar esos 4 hijos de puta.
Cuando iba a salir de detrás de aquella pared donde estaba escondido, oí un grito y algo caer al suelo. Mire y quede sorprendido. Changmin tumbo al más alto de un solo puñetazo, tenía cara de pocos amigos.

- Quién te crees que eres para insultarlo ¿?- agarra al tío que estaba en el suelo por la camiseta y lo levanto.- ni siquiera te atrevas a nombrarlo.
Y después de decir eso, se peleo con los 4 tipos. Se las arreglaba muy bien hasta que le dieron con algo en la cabeza y lo dejaron tambaleando. Se apoyo con una rodilla en el suelo, pero aún así no podría hacer nada, estaba aturdido.
Cuando vi que el de la nariz grande saco una navaja, mi cuerpo reacciono por si solo y me metí en la pelea. Saque la pistola que siempre llevaba encima y apunte al de la navaja.
- Como os atreváis a volver a tocar algo de mi propiedad os mato.-Changmin cayo al suelo inconsciente y los otros cuatro tíos se fueron.

Llame a mi secretario, quien vino a recogernos en la limusina y nos llevo a mi casa. Después de que me ayudara a dejarlo en mi cuarto, le dije que nos dejara solos.
- Changmin ¿?, eh, niñato!!-le di palmaditas en la cara y pareció espabilar- desvístete…
- Eh!!¿?- ahora si que pareció espabilar.
- Que te desvistas, que te voy a preparar un baño y mientras te curó las heridas- fui a prepararle el baño y cuando volví a mi cuarto –voy a buscar….o/////O!! OMG!!-pero que espalda tiene este mocoso, que brazos, que cuerpazo…
Changmin se dio cuenta de que le miraba.
- Qué ¿?- me puse serio.
- Voy a por el botiquín…-cuando iba a salir por la puerta me llamo de nuevo.
- Si ¿?-dije.
- Dónde dejo la ropa ¿?- me giré.
- Hay en el suelo…-y salí por la puerta disparado.

A la vuelta, la ropa de Changmin estaba en un montón y podía oír su voz, tarareando una canción.

Siguiente