Sueño Eterno Intro

En la antigüedad Dios entregó una tabla con diez mandamientos a los seres humanos. Al mismo tiempo también creó un reglamento para los ángeles del cielo.

Estas normas estaban a la vista de todos a la entrada del Palacio Celestial, palacio que Jaejeong, el ángel mas hermoso del cielo y favorito de Dios visitaba diariamente.

Ese dia se dirigió al palacio por llamado de Dios. Al llegar a la puerta se detuvo ante la tabla tallada, admirando como siempre los mandamientos impuestos siglos atrás.

I- Nunca darás a conocer tu naturaleza a un ser humano.
II- No bajarás a la tierra sin permiso de Dios.
III- No usarás tus poderes para dañar a ningún ser vivo o prójimo.
IV- No descenderás al “Submundo” bajo ningún concepto.
V- Obedecerás sin dudar cada una de las ordenes de tu Dios.

Tras leer estas normas Jaejeong se adentró en el palacio a pedido de su señor.

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Jaejeong, un ángel hermoso atravesaba el vestíbulo del palacio del Cielo. Sus largos cabellos dorados ondulaban rozando su cuerpo esbelto y de hombros anchos, cubierto por una túnica blanca con bordados en color azul, que hacían juego con sus grandes ojos del mismo color.

Entró en la sala de recepciones en la que Dios lo estaba esperando envuelto, como siempre, en un resplandor que impedía a los ángeles ver su figura.

-¿Me ha llamado Señor?- preguntó Lucifer haciendo una reverencia ante Dios.

-Mi querido Jaejeong, tengo una importante misión para ti.- habló Dios con una voz ronca pero que irradiaba ternura.

-¿De qué se trata Señor?- preguntó nuevamente el ángel.

-Debes viajar a la Tierra- Ante esa frase Jae levantó la mirada turbada por la duda. Al darse cuenta de esto Dios continuó..- Sé que no has viajado nunca pero necesito de tu dulzura para convencer a un humano de que cambie su forma de vida antes de un año.-

-¿Por qué un año?- indagó el ángel intrigado.

-Porque dentro de un año morirá y a menos que su forma de vida cambie, su alma será enviada al submundo para el olvido eterno.-

-Está bien Señor, haré todo lo que esté en mi mano- dijo Jaejeong.

En ese momento un ángel de cabellos cortos y rostro infantil se acercó a Jae con un pergamino en la mano entregándoselo.

Jaejeong deslió el pergamino, encontrando en el los datos y la fotografía de el humano al que debía proteger.
Nombre: Shim Changmin.
Profesión: Cantante.
Datos: Sin familia, ni amigos cercanos. Vive en un apartamento de un lujoso barrio de Seúl.


Junto a esa ficha había una fotografía de un joven de unos 20 años con una media melena oscura, unos oscuros ojos rasgados y unos finos labios. Sin embargo ese rostro que a primera vista se apreciaba atractivo, incluso hermoso no reflejaba ningún tipo de sentimiento.

-Ese es el joven al que debes ayudar. Ve ahora pequeño mío, se que solo tú con tu amabilidad serás capaz de salvar a ese joven. Confío en ti Jaejeong.-

-Como ordeneis mi Señor- Jae hizo una reverencia - Con vuestro permiso- Y diciendo esto salió del palacio y se dirigió hacia las puertas del Cielo mientras oía de fondo los dulces cantos de los ángeles que los acompañaron hasta que abandonó el que había sido su hogar por siempre y del cual nunca había salido

Continuara... (Yuuki: u_u con el dolor de nuestras almas.. pero si jaejoong es lucifer yo quiero que venga por mi *o* le entrego todo)