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Arualthings

Love In The Ice: cap 12

Contándote la verdad.

Pasaron unas semanas desde que Yunho y Yoochun empezaron a vivir juntos y la vida, era demasiado maravillosa. Tanto que hubieran dejado todo atrás para disfrutarse más el uno del otro. Como cada mañana Yoochun se levantó temprano para ir a entrenar, puesto que el entrenador Lee no le dejaba ni a sol ni a sombra y quería que todos los días tuviera una preparación física constante para preparar el Campeonato Nacional.

Tan sólo quedaban unos 6 meses para que este empezara y los nervios ya estaban incluso a flor de piel. Yunho sin embargo no tenía mucho que hacer así que ultimó los detalles para abrir la que sería su escuela de patinaje, toda ella dedicada al cien por cien para los niños. Habló con unos cuantos gestores y ya tenía el edificio en concreto donde la iba a montar. Ahora tan sólo faltaba arreglar los papeles y poner el dinero para que la pista de patinaje junto a las otras instalaciones fueran construidas. Semanas atrás Yunho había hecho una entrevista junto a una sesión fotográfica para ‘1st Look’ y gracias a ese dinero y al de un par de entrevistas para las cadenas deportivas de TV, le iban a venir de perlas para poder realizar su sueño.

Sobre la investigación que su agente estaba llevando acabo sobre el entrenador Lee, aún no habían encontrado nada en concreto, pero había varios cabos sueltos por unir y después de hacerlo, estaban seguros de que encontrarían algo de lo más sucio.

Después de despertarse, desayunar y vestirse, arregló un poco la casa y metió todo en su maletín para ir a firmar los papeles que iban a hacer realidad aquella academia. Subió en su coche y en media hora se plantó en el Oeste de Seúl.

- Señor Jung, veo que ha preparado todo con rapidez – le dijo el señor Kim, encargado de llevar todo el papeleo.

- Quiero empezar con todo esto cuanto antes – Yunho sonrió – si pudiera ser me gustaría que estuviera todo para antes del Campeonato Nacional, así podré llamar la atención de los futuros alumnos.

- No se preocupe, nuestros empleados destacan por la rapidez en sus trabajos así que no creo que tarden más de cuatro meses en montar las pistas y las demás zonas. Puesto que el edificio es grande y esta bien edificado, no nos dará demasiados problemas.

- Bien entonces pues aquí tiene – Yunho abrió su maletín y sacó un sobre donde estaban todos los papeles que había que firmar junto a un cheque para cubrir todos los gastos de la construcción.

- Gracias señor Jung – dijo sonriendo el señor Kim – pronto podrá realizar su sueño realidad.

- Eso espero.



Estadio Nacional.

Yoochun no era el único que se estaba preparando para los Campeonatos. Sus amigos, Jae y Changmin tambien lo estaban haciendo y ahora tenían que preparar muy bien la exibición que iban a dar por parejas en salto y en natación. Durante aquel tiempo Jae tuvo que dejar de trabajar para la empresa de su padre en sus ratos libres todo para poder concentrarse en la competición y Changmin gracias a que su trabajo de modelo no requería que fuera a diario estaba bastante más tranquilo.

La verdad es que en los últimos meses todo había sido bastante tranquilo, ambas parejas hacían su vida feliz en sus casas y después iban a realizar sus entrenamientos, los cuáles les llevaban bastantes horas al día. En el mundo del deporte cuando había competiciones importantes se sabía muy bien que el tiempo era algo que debían sacrificar por conseguir sus logros.

Horas después de haber empezado a nadar y de mejorar sus tiempos, ambos chicos decidieron terminar por hoy, esa misma tarde se iban a encontrar con sus amigos para ir juntos a comer y como todos se merecían algo de tiempo libre no iban a estar todo el día dedicándolo al deporte.

- Yunho me dijo que hoy iba a arreglar todos los papeles para su escuela – comenzó a decir Changmin mientras se terminaba de secar.

- ¿Ah sí? Que rápido ha ido todo... me alegro mucho que por fín pueda hacer algo que le gusta.

- Sí, ya era hora de que pudiera hacerlo. La verdad es que cuando nos lo contó no me sorprendió nada Jae, no sé, siempre me extraño mucho que dejara todo porque sí y más cuando ama el patinaje como lo ama.

- Pienso lo mismo – comenzó a decir Jae – pero no creo que sea necesario preguntarle nada, mientras tenga nuestro apoyo le sobrará.

- Sí, ¿sabes? A veces me pregunto que haremos tu y yo el día en que dejemos de competir.

- Bueno,nosotros tenemos estudios y tambien otros trabajos, supongo que nos dedicaremos a eso – respondió Jae sonriendo mientras se terminaba de vestir - ó Jae sonriendo mientras se terminaba de vestir – Yo ya estoy, ¿nos vamos?

- Sí, que no quiero llegar tarde.



Horas después los cuatro chicos se encontraron en su restaurante favorito, estaba en un lugar más o menos distante del centro de Seúl y es que allí podían aprovechar para hablar de lo que quisieran si tener que pensar en quien les estaría oyendo o viendo.

Yunho llegó algo tarde ya que se entretuvó un poco en arreglar los papeles en el gestor, pero veinte minutos después los cuatro ya estaban reunidos de nuevo, sin saber que no muy lejos de allí, para su desgracía había alguien observándoles. Aunque en realidad eran a Yoochun y Yunho a los que observaban y sacaban fotos mientras los chicos empezaban a disfrutar de una maravillosa comida.

- Dios mío, que cansado es ir de papeleos – comenzó a protestar Yunho – pero ahora ya se puede poner todo en marcha.

- ¿Cuánto van a tardar? – preguntó Changmin con curiosidad.

- Para unos meses antes del Campeonato Nacional estará listo, o al menos eso es lo que me han dicho.

- Entonces genial – sonrió Yoochun mientras ponía una de sus manos en la pierna de su novio – así podrás publicitarla en el Campeonato, y yo te ayudaré.

- Gracias cariño – en ese momento se acercó para darle un beso en el cuello mientras aquella persona a lo lejos sonreía al ver que había sacado unas maravillosas instantáneas.

- Todos te ayudaremos en realidad, si tenemos que ponernos en contacto con alguien o necesitas ayuda en algún sentido, sólo tienes que decirnoslo – continuó Jaejoong.

- Lo sé, no os preocupeis.

Después de un par de horas hablando mientras comían algo sencillo, los chicos se despidieron ya que todos ellos tenían que volver a los entrenamientos por la tarde y después a preparar una sesión fotográfica de presentación que tenían con todos los participantes de Corea en los Campeonatos. Y es que aunque aún faltaran algunos meses para que todo se celebrara el país ya se estaba poniendo manos a la obra con los preparativos, incluso los deportistas extranjeros ya estaban empezando a hacerse con las instalaciones, el tiempo e incluso la zona horaria.

Cuando esta clase de juegos se iban a celebrar en una ciudad, aunque no fueran los Juegos Olímpicos y sólo permitieran la participación de extranjeros si tenían alguna vinculación con el país, todo parecía volverse patas arriba.

Yunho acompañó a su novio hasta el estadio donde entrenaba ya que esos últimos días tan sólo se veían para cenar y depués ir a dormir. Así que, como era normal, le echaba bastante de menos y más teníendo en cuenta que Yunho estaba casi todo el día desocupado. Ambos se despidieron y poco después Yunho recibió una llamada de teléfono, era de su agente, el cuál seguramente, tendría alguna noticia.

Mientras Yunho respondía su teléfono antes de marchar a casa y Yoochun iba a coger su bolsa de entrenamiento, este último se quedó algo pensativo.



- Mierda... estoy cansado de entrenar a todas horas... – musitó mientras volvía a cerrar su taquilla – hoy me tomaré la tarde libre, me importa una mierda que me diga el entrenador Lee...

Yoochun se levantó y cuando fué hacía la salida del Estadio se dió cuenta de que Yunho aún seguía allí hablando por teléfono. Fué despacio para evitar hacer ruido y darle una sorpresa. Lo que este no se esperaba es que en ese momento, Yoochun se daría cuenta de la verdad de su retirada.

- Ya veo... – comenzó a decir – bueno, supongo que no va a ser fácil encontrar algo para quitar de enmedio a ese cabrón. Dios, me da tanta rabia... doy gracias a que Yoochun no sabe que me retiré por culpa de un chantaje de su entrenador sino...

- ¿Qué? ¡¿Qué?! – gritó practicamente este sorprendido.

- Yoo... Yoochun – Yunho se giró sorprendido mientras seguía sosteniendo su teléfono y observó la cara de sorpresa de su novio – tio, tengo que colgar ya hablamos y gracias.

- ¿De que va esto Yunho? ¿Es verdad? – Yoochun comenzó a hacer preguntas mientras seguía sorprendido.

- Yoochun, espera y cálmate. Puedo explicartelo, pero vamos a casa por favor.

Ambos subieron al coche de Yunho y sin mediar palabra durante todo el camino fueron a casa. Después de llegar, Yoochun aún enfadado subió y dejó las cosas en la mesita para cruzarse de brazos y pedir explicaciones a su novio.

- Habla... – le dijo sin más.

- Yo... – Yunho puso su mano en la cabeza sin saber muy bien como empezar – fué cuando tuvimos aquella pelea, yo... al día siguiente fuí a ver a tu entrenador y no se cómo el me amenazo. Me dijo que si no lo hacía te destruiría y yo no quiero que te pase nada. Pensé que como yo ya tengo una lesión que nunca dejará que vuelva a patinar como antes...

- Pues pensaste mal, ahora mismo voy a hablar con él – Yoochun se levantó enfadado pero Yunho tuvo tiempo de cogerle de un brazo.

- Yoochun por favor, no hagas nada, lo hecho hecho está.

- ¿Me estás pidiendo que simplemente permita que ese cabrón mande tu carrera a la mierda como si nada?

- Sí, escúchame – Yunho le pidió que se sentara – ahora tengo otros sueños, sueños contigo a tu lado y sueños de futuro. Ahora quien tiene que demostrar que eres el mejor eres tú.

- Pero... – volvió a protestar Yoochun.

- Cariño hazme caso, Lee recibirá su castigo tarde o temprano, eso te lo prometo.

- ¿Por qué no me lo dijiste antes? – le volvió a preguntar.

- Para que no cometieras una locura como la que has pensado hacer ahora mismo.

- Y lo pensaba a hacer – Yoochun suspiró de manera profunda y desués se tiró a los brazos de Yunho – siento que por mi culpa hayas tenido que sufrir.

- Chunnie, contigo soy feliz, lo demás no me importa. Simplemente con tener tu sonrisa me es suficiente y si así la voy a tener a diario, haré lo que sea por mantenerla.

- Te quiero – y después Yoochun le besó.

Mientras Yunho sentía los labios de su novio sintió una tranquilidad y calidez en su corazón inimaginable. Por fín Yoochun sabía la verdad y ojalá se lo hubiera dicho antes, todo habría sido más fácil en realidad. Pero ahora estaba completamente tranquilo y feliz, porque de seguro que el futuro les traería cosas muy buenas para ambos y ya estaba deseando tenerlas.

Sin saber como después de ese largo beso, ambos chicos quedaron completamente tumbados en su sofá. Yunho miró a los ojos de Yoochun que estaba encima de él con esa maravillosa sonrisa que tanto le caracterizaba, después este último se lanzó a su cuello para besarlo completamente y hacer que todo el cuerpo de Yunho se erizara completamente. Se llegó incluso a poner nervioso y sin apenas darse cuenta, segundos después estaba con su torso desnudo debajo de su novio, que se deleitaba con cada poro de su piel mientras escuchaba como Yunho empezaba a respirar entrecortadamente, algo que realmente le volvía loco por completo.

Yoochun tomó el control por completo y terminó por quitarle los pantalones y los boxers poco después. Completamente paralizado, Yunho cerró los ojos mientras dejaba que su novio disfrutara de su cuerpo por completo. Este comenzó a besarle desde la parte más alta de su pecho hasta llegar a la zona de su pelvis para después rozar con sus labios ese maravilloso vello que Yunho tenía, su miembro no tardó en reaccionar poniendose completamente duro al sentir los labios de Yoochun muy cerca de allí. Y no pudo evitar sonreír ante la rapida reacción de su novio y esperó a oírle gemir en el momento en que lo rozó con su lengua, despacio y suavemente, de arriba a abajo, acariciando tambien con sus manos la parte mas oculta del cuerpo de Yunho.

Y así fué, Yunho se estaba volviendo loco por completo entre gemidos que incluso podían hacer eco en aquel salón mientras su novio seguía jugeteando con su lengua sobre su miembro el cuál practicamente ya estaba empapado por su saliva. No se lo pensó siquiera dos veces cuando poco después lo introdujo completamente en su boca para cubrirlo de una manera dolorosa y viril, moviendose de arriba a abajo mientras movia su lengua para hacer que Yunho empezara a sentir espasmos por todo su cuerpo. No tardó en correrse de una manera increible y Yoochun se relamió los labios ante ese magnífico sabor, pero la verdad es que quería aún más. Se incorporó un poco para poder besar los labios de Yunho y volver a sonreírle, después se desnudó ante los ojos del chico y cogió una de sus manos para llevarlo hasta su propio miembro que ya pedía ser saciado. Mientras hacía que Yunho le tocara de forma fuerte, Yoochun se preparó para que Yunho se introdujera dentro de él una vez que su miembro estuviera de nuevo preparado y cuando vió que ya lo estaba hizo un movimiento para ponerse de horcajadas encima del chico y hacer que Yunho se metiera completamente dentro de él.

Yoochun no pudo evitar lanzar un grito desués de sentir el miembro de su chico, tan duro y tan grande en su interior pero le gustaba tanto que empezó a moverse como loco encima de él, haciendo que su novio empezara a gemir y a gritar junto a él ante aquellos movimientos. Junto a esos movimientos Yoochun rozaba su miembro erecto en la zona del vientre de Yunho, lo que empezó a volverle loco tambien ya que a ello le acompañaba la mano de su chico tocandole la zona más baja de su miembro.

Ambos se agarraron donde pudieron ya que no podían aguantar los espasmos que sus cuerpos estaban sufriendo. El sudor se hizo presente en ambos mientras sus respiraciones se ahogaban por completo entre gemidos y minutos después lo inevitable se hizo presente en ambos. Yunho y Yoochun se corrieron practicamente a la vez, dejandose empapados por completo. Fué tan grande que Yunho llevaba practicamente todo su vientre lleno de Yoochun y este último pudo notar como la corrida de su novio se iba deslizando entre sus muslos.

Acabaron agotados y después de coger una manta que tenían en el respaldo del sofá, ambos se quedaron durmiendo de la manera más dulce que pudieron imaginar.

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