Sayonara

Título: Sayonara
Autor: KaiNet
Pareja: YunJae
Género: Slash, Angst
Extención: Oneshot
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Y aquí estoy, frente a un inmenso y profundo océano, tan salado como mis lagrimas, tan ruidoso como mi dolor. Con el MP3 a todo volumen, intentando que todos mis pensamientos y dudas desaparezcan; con el viento en mi rostro e intentando que el potente ruido de los audífonos me aleje de la realidad. Desde siempre me gustó hacer eso: subir todo el volumen y sentarme a observar como el mundo continuaba girando incluso si yo me detenía; siempre me gustó huir del ruido de aquel mundo en el que tanto dolía existir y esconderme en mi silencio; siempre me gustó aislarme y esconderme detrás de una sonrisa tonta. Pero parece que hoy es lo que más lastima y aflige a quien más amo y no consigo sentirme bien y ¿Cómo hacerlo si lo único que puedo dar es dolor? Camino de lado a lado en esta playa desierta. Suavemente el agua moja mis pies, como duele la soledad de a dos y como destruye mi inseguridad.

Y es que simplemente no puedo concebir que me ames tanto como yo a ti, no cabe en mi cabeza que puedas ser capaz de sentir lo que yo he sentido a tu lado. Destruiste todo, absolutamente todo ese mundo que tanto me costo crear, me hiciste querer aprender tantas cosas, me hiciste querer dejar de ser yo y aunque a tu lado fui feliz ya no lo soy y a pesar de que digas que me ama siempre estará la sombra de una tercera persona. Vivir bajo la sombra de un mejor amigo y ex enamorado mata, te hace sentir tan miserable esa desconfianza; te hace querer desaparecer de la faz de la tierra, el sentir celos de alguien que te agrada. Y yo empecé a morir con el pasar de los días, lentamente empecé a desear desaparecer y a encerrarme en mi silencio incluso cuando estábamos a solas.

Yunho, no tienes idea de cómo duele sentarme frente a ti y no poder articular palabra alguna. Yo amo mi silencio, pero tu pareces odiarlo con toda tu alma y creo que en un momento yo también empecé a odiarlo. Y quisiera ser capaz de llorar pero no puedo, mis lagrimas no son como las de los demás, o como las de él: tu mejor amigo. El, quien corre y se aferra a ti cuando las lagrimas lo embargan, no, mis lagrimas son solo palabras esparcidas sobre un papel a las que muchos le llaman "una bonita canción". Mis lagrimas son melodías escritas en silencio, con una luna llena como compañera y una noche insuficiente para terminarlas.

Y me siento solo a tu lado, casi tan solo como cuando nos conocimos, y quisiera borrar de tu vida todo rastro de mí para no lastimarte más pero no puedo borrar el pasado y lo sabes. No puedo pretender que tus besos no existieron, ni que aún te amo. Por eso creo que lo mejor es alejarme de todo y sobre todo de ti. Y por más que quisiera volver atrás y negar mis sentimientos creo que volvería a besarte como aquella vez en la que me tomaste entre tus brazos. Volvería a acariciar tu rostro y volvería a observarte dormir, no, no es porque me duela a mi este amor, es porque te duele a ti. Es porque siempre el va a estar entre los dos, incluso si tu no lo nombras el siempre está presente en mi pensamiento recordándome lo que nunca podré ser. No existen miedos ni arrepentimientos ahora, solo un sabor amargo en mis labios, un amor confuso y un poco enfermizo, un amor grande muy grande y doloroso, tan doloroso que ambos empezamos a autodestruirnos en cierto punto. No, no pienso volver, solo quiero que me olvides, aunque probablemente yo nunca te pueda olvidar.

Y las horas se han hecho noche y estoy en el mismo lugar, esperando quizás que vengas por mí, rogando talvez que nunca más me vuelvas a ver. Mi silencio ha vuelto, pero aún lastima; mis ojos están cansados, cansados de guardarse las lagrimas y mi mente simplemente está en blanco, no puedo llorar tampoco escribir; creo que me voy a volver loco y ni siquiera te he empezado a olvidar. El viento se hace más frío, como mis palabras cuando empezamos a alejarnos; el viento lastima mi piel con su gélida esencia como mis gestos toscos cuando tratabas de acercarte. Y me desesperabas cuando intentabas forzarme a decir las cosas, me desesperabas cuando pretendías que todo estaba bien. Sabías que sentía celos, pero nunca, nunca fuiste capaz de decirme que no sienta celos. Tu simplemente te mantenías ahí, esperando que mis indirectas sean sinceras, sabes que me cuesta mucho hacerlo pero aún así me forzabas a ser fuerte.

Y mírame, una vez más estoy pensando en ti, intentando odiarte, intentando reprocharte en mi silencio lo mucho que me dolió. Si, mi silencio dolía, pero tu indiferencia también. Recuerdo aquella vez en la que me preguntaste si estaba bien salir con el, sonreí hipócritamente y te dije que si; por mi parte busqué refugio en Junsu y Changmin e intenté sacarte celos, pero simplemente no te importó, no te importó como cuando te dije para terminar esta relación. Solo caminaste y dijiste que si esa era mi decisión entonces la respetarías. Quise correr y llorar, quise correr y golpearte, pero no, eso sería solo tiempo perdido. Y así como la noche va oscureciendo gradualmente, mi amor irá escondiéndose muy profundo y quizás algún día sea capaz de volver a ese grupo, y quizás sea capaz de volver a ser el mismo JaeJoong que tu conociste alguna vez; entonces seremos amigos y todo será normal. Podré olvidar lo que siento por ti, pero eso no implica que deje de sentirlo. Quizás para entonces mi corazón ya no duela tanto; y tu corazón ya haya sanado cuando nos volvamos a ver y tu me recibas con esa enorme sonrisa, que durante mucho, fue mía.

Sayonara, Yoonho.

FIN