A sweet deception capitulo 4 ♥

Sentí como su lengua trataba de jugar con la mía, el beso se sentía cada vez mejor, no estaba muy seguro de lo que hacía pero quería hacerlo así que comencé a rozar mi lengua con la suya, no podía dejar de besarlo hasta que nos hizo falta el aire. Al mirarnos el solo sonreía y me abrazo del cuello
-vaya, no pensé que aun seguirías aquí- dijo al aire
-a quien le hablas- por inercia me voltee a mirar soltándome de su agarre y ahí estaba ella, con unos grandes ojos mirándonos, acaso lo del beso fue para que ella nos viera?
-si ya entendiste no vuelvas acercarte a él- decía sin soltarme abrazándome de la cintura y posando su mentón en mi hombro

La chica salió corriendo de ahí sin antes decir que yo era despreciable y que me odiaba. Jaejoong no paraba de reír después de que la chica se fuera
-lo hiciste solo para que ella nos viera- como puede jugar con los sentimientos de los demás?
-no te quejes, agradéceme que te la quite de encima, además no me digas que no te gusto besarme- cuando dijo eso sentí como mis mejillas se enrojecían
-ya es tarde es mejor que volvamos a casa

Jaejoong se fue riendo casi todo el camino, en verdad no se sentía mal por esa chica? Cuando llegamos a casa no tenía ánimos de nada así que solo me fui a mi cuarto y me tire sobre la cama quedándome dormido en poco rato ya que la noche anterior no había podido dormir ni un poco de solo pensar en el beso que Jaejoong me había dado.
Después de aquello mi relación con Jaejoong fue cambiando, hablábamos mas aunque a veces igual me ignoraba sobre todo en la escuela

A veces no podía dejar de mirarlo, habían pasado dos semanas desde que nos besamos, me moría de ganas por besarlo pero no quería demostrarle que estaba comenzando a sentir cosas por él, quizás se reiría al igual como lo hizo con esa chica.
Estábamos en clases y yo tan embobado mirando a mi boo que no me di cuenta que yoochun me hablaba hasta que golpeo mi brazo
-porque me golpeas-
-porque te he llamado tres veces y al parecer no me escuchabas, tanto te gusta?- dijo muy tranquilamente mientras hacía corazones en su cuaderno
-de que hablas, a mi no me gusta nadie- me defendí, acaso tanto se me notaba?
-no me mientras, no a mí, sobre todo cuando eres como un libro abierto- me sonrió y siguió dibujando corazones
-y tu porque haces tantos corazones?- quise cambiar de tema, me estaba poniendo muy nervioso, no quería hablar de eso, no aun
-no estoy dibujando corazones- cerro su cuaderno lo más rápido y miro hacia fuera por la ventana
-aja y tú crees que me vas a engañar, dime a quien le echaste el ojo ahora-
-a nadie, ahora deja de molestarme o el profesor se dará cuenta

En cada recreo Jaejoong se perdía, me gustaría mucho hablar con él pero hoy me ha ignorado más de lo normal, y no para de recibir mensajes. Muy decidido fui detrás de él, quería saber a dónde iba cada vez que terminaba una clase. Con mi mala suerte lo perdí de vista. No lo pude encontrar y ya era hora de irme a casa.

Cuando llegue a casa estaba solo, aunque estaban los empleados pero con ellos es lo mismo que estar solo. Después de tomar un baño me senté en la cama con la toalla en la cabeza, no estaba de ánimos para bajar a cenar ni vestirme así que solo me había puesto el pantalón del pijama. Después de que Jaejoong llego a esta casa ya no soy el mismo de antes, solo llego a casa para tirarme a la cama a pensar en el, ya no salgo con chicas menos después de aquel beso. Si esto es estar enamorado no me gusta

Me recosté sobre la cama y me cubrí los ojos con mi brazo, estaba quedándome dormido cuando escucho la puerta abrirse
-yunho?
Esa voz me despertó por completo, era raro que Jaejoong entrara a mi habitación.. la verdad es que nunca ha entrado. Me hice el dormido esperando a que se fuera, escuche cerrarse la puerta así que me relaje, hablar con el ahora no creo que me hiciera bien, además cada día me costaba más mirarlo a la cara. Sentí un peso extra sobre la cama y como una mano acariciaba mi desnudo torso. Abrí los ojos pero solo veía una silueta ya que la luz estaba apagada
-jaejoong?- pregunte un poco dudoso de que fuera el
-sabía que no estabas durmiendo-podía sentir el olor a alcohol, había estado bebiendo-
Comenzó a lamer uno de mis pezones, no pude evitar que saliera un gemido
-aahh Jaejoong que haces
-acaso o es obvio- respondió como si nada sin detenerse, besaba mi cuello mientras que con su mano acariciaba mi miembro por sobre el pantalón
-uhmm porque haces esto.. estas ebrio-sentía su lengua sobre mi piel como si quemara, mi respiración se estaba agitando
-prefieres que me detenga?- respondió con una pregunta mientras introducía su mano dentro de mi pantalón
-si.. detente..aaahh-mi gemido no lo convenció para nada, no dejaba de acariciar mi miembro- detente..
-con esos gemidos no me convences- me beso y dejo de tocarme solo para desvestirse y sacarme por completo el pantalón, no sabía qué hacer hasta que me volvió a besar introduciendo su lengua, a quien quería engañar, besarlo era lo que más quería. Respondí a cada uno de sus besos, sentía mi cuerpo arder junto al de él, pude sentir su suave piel –mentiroso
Abrió mis piernas colocándose entre ellas
-que haces-
-solo déjame hacerlo, no te arrepentirás de nada- solté un gran quejido al sentir como introducía su miembro en mi
-duele.. sácalo- trate de alejarlo empujándolo de los hombros sine vitar enterrar mis uñas en ellos
-ya no puedo parar-tomo mis manos dejándolas sobre mi cabeza, por mucho que me quejara no salía de mi interior, me beso, no dejaba de besarme, el dolor no se iba y sin importarle eso comenzó a moverse, sentía que me iba a partir en dos
-jae..jaejoong..vasta..duele- no podía soltarme de su agarre
-uhmmm solo.. Relájate..- las embestidas las sentía cada vez más profundas, el dolor fue desapareciendo sintiendo placer, un placer tan grande que ahora no paraba de gemir, podía escuchar también sus gemidos, deje de forcejear. Acerco sus labios para besarme y me soltó. Lo abrace, el aumentaba el ritmo de las embestidas hasta que se corrió en mi interior y yo en mi abdomen, manchándolo a él también
Dejo caer todo su peso sobre mí, se había quedado dormido. Quizás cuanto había bebido y porque, me lo saque de encima y lo limpie dejándolo dormir en mi casa, por mucho que quisiera no podía dormir con él, no mientras miles de pensamientos pasaban por mi mente. Lo único que quería saber era porque lo hizo