El Infortunio de Changmin cap 16

Key: Nada de lo que ven en la televisión es real

Intento recordar los días donde bailar en un escenario sólo era una cosa que mi madre me obligaba a hacer en los concursos de talentos pare presumirme a sus amigas, o cuando SHINee sólo era una palabra que me sacaba mal en un examen de ingles, esos días en los que no tenia que huir despavorido de un grupo de mujeres (por lo general mayores que yo) gritando cosas que jamás me atreveré a repetir. Esos días tan tranquilos...



... y jodidamente aburridos.



Por alguna enfermiza razón prefiero empezar mi semana con un operativo creado por la diva Kim Kibum para proteger la poca sanidad mental de la persona más imbécil que conozco.



Ustedes ya saben de quien hablo.

FLASH BACK

Mi sueño es interrumpido por algo vibrando bajo mí almohada, volteo a ver mi reloj de mesa para ver como marca las seis con dos minutos.



— Justo a tiempo. —Sonrió al ver como en la pantalla de mi celular marca un mensaje recibido.



Taemin-ah~
No quiero levantarme, es muy temprano (D':)

Tengo sueño.



Me dan ganas de reír al imaginármelo bostezando y siendo sacudido por Jaejoong-hyung para que se despierte.



Pero sino te levantas

Yoochun-hyung volverá a poner un vibrador

Bajo tu almohada para despertarte. (=^w^=)



Aun me rió recordando ese incidente, fue gracioso hasta que Changmin por el susto tomo el susodicho aparato y lo lanzo contra la pared y por lo que Junsu-hyung me dijo esa perdida fue llorada una semana. Use toda mi fuerza de voluntad para sentarme en la cama, pero el olor de tostadas quemadas me dice que Key decidió hacer el desayuno otra vez.



— No voy a comer eso. —Me tiro de nuevo en la cama para dormirme otro rato aunque se que en cualquier momento Minho entrara por esa puerta y me pondrá en su hombro como saco de papas para obligarme a desayunar.



La puerta se abre.



— Podemos hacer esto por las buenas o por las malas. —Que bárbaro, si esto de ser idol no me funciona trabajare de adivino en un circo.



— Cárgame, de todos modos no planeo caminar. —El más alto me levanto después de que yo tomara mi celular para leer lo que Changmin me había respondido.


¿Minho ya te esta cargando

a la cocina? Yo también quiero

que alguien me cargue para

desayunar (t.t)



Minho me deja en una silla frente a un plato con tostadas quemadas, huevos destrozados y una cosa que juro me esta mirando.



— Kibum, por el amor de Cristo… ¿Qué diablos es esto? —Sobra decir que una espátula termino embarrada en la cara de Jonghyun.



— Es tu desayuno, ahora traga. —Onew y veíamos con miedo nuestros platos, pero aun más horrorizados veíamos como Minho estaba comiéndolo como sin nada mientras leía las noticias.



Aprovecho que Key esta demasiado ocupado golpeando a Jonghyun para escribirle una respuesta a Changmin, o más bien una llamada de auxilio.



Le diré a Minho que te cargue

todos los días, si tu le dices

a Jaejoong-hyung que le enseñe

a cocinar a Kibum, su comida

da miedo hyuuung~ (DD:!)



— Nadie aprecia mis esfuerzos más que Minho, él no se queja de mi comida. —Todos los volteamos a ver pero nos arrepentimos cuando nos lanzo su mirada llena de carisma.



— Taemin, tal vez quieras leer esta noticia.



— No me gustan las noticias hyung, son demasiado deprimentes. —Tomo un buen trago del jugo de naranja que se supone era de Onew-hyung.



— Creo que esta te interesara. —Quito la pagina del periódico y me la paso.



— Pequeño ladrón, devuélveme mi jugo. —Intentó quitarme el vaso de las manos pero yo fui más rápido y me hice para atrás poniendo el periódico frente a mi cara.

¿Choikang Changmin se acuesta con su jefe?

Escupo todo el jugo que pretendía tomarme sobre Onew al leer el titular haciendo que Key me regañe por mi falta de modales para después seguir golpeando a Jonghyun.



— No me refería a esto Taemin. —Onew se frotaba los ojos antes de pararse e ir a cambiarse de ropa.



— Lo siento hyung.



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— Entonces… ¿No sabe nada de la noticia? —Todos estamos en la camioneta dirigiéndonos al estudio para practicar nuestra coreografía.



— No creo, ya me hubiera mandado un mensaje todo histérico. —Y aunque es bien sabido que la vida de Changmin esta llena de momentos de histeria no ha habido nada fuera de lo normal.



— ¿Y qué planeas hacer? —Si Key estaba interesado en algo de lo que yo decía sabia disimularlo muy bien porque se la pasaba peinándose en el espejo del carro.



— Pues, para ser sincero no me gustaría que se enterara. —Aunque Changmin finja que nada le importa y se haga el frío se muy bien que este tipo de cosas de verdad le afectan.



Todos me voltearon a ver por algunos segundos, incluso el conductor lo cual me provoco un mini ataque de pánico porque la última vez que revise un conductor siempre debe estar viendo la carretera.



— Entonces haz que no se entere. —Por primera vez en todo el viaje Minho había hablado llamando la atención de todos— Dentro de algunas horas SME degollara a los dueños del periódico por poner eso de todos modos.



— Es un deporte para Lee Soo Man ponerle demandas a todo el que se deje. —Se que en algún lugar de Corea nuestro jefe esta estornudando.



— ¿Y cómo haré eso? —Hora de cambiar el tema.



Todos volteamos a ver a Key.



— ¿Qué harían ustedes sin mi? —Estoy seguro de que todos nosotros (incluso el chofer) podríamos pensar en la respuesta a esa pregunta. Todos sonrieron para después volver a ponerle atención al camino, pero yo logre ver como Key guardaba un pequeño calendario en su bolsillo.



¿Para que querría un calendario? En nuestros celulares dice la fecha.

FIN DEL FLASH BACK

Y así fue como Key llamo a la asistente de DBSK, que luego llamo a su manager, que luego llamo a Yunho para que el llamara a Yoochun para que yo pudiera hablar con él.



¿Entendieron? Si, yo tampoco.



Después de aclararle que no lo llamaba para tener un trío con el y Junsu (a lo que ambos sonaron decepcionados pero ignoremos ese detalle) y que tampoco tenia sentimientos encontrados por él, decidió ayudarnos al decirnos que Changmin efectivamente iría a SME.



— ¿Qué horas son?



— Tu reloj esta en tu muñeca Key.



— ¿Te pregunte donde esta mi reloj? Eso pensé, ahora dame la hora enano de jardín.



— Faltan quince para las nueve. —Casi podía ver como Jonghyun se encogía y hacia círculos con su dedo, Key si que sabia tocar fibras sensibles en nuestro amado vocalista.



— Ya, ya. No eres un enano de jardín, eres un gran cantante, nadie alcanza las notas altas, ni siquiera Key cuando lo esta haciendo con Minho. —Onew-hyung siempre era el encargado de subirle el autoestima a Jonghyun después de uno de los ataque terroristas de Kibum (Nunca dije que fuera bueno para ello. Sólo aclaro).



Y mientras analizo si la hostilidad de Kibum tiene que ver con que ahora tiene la mitad de la cabeza rapada siento como mi celular vibra.



Yoochun me dijo que te viera

en la entrada de SME

¿Paso algo?



— ¿Qué hiciste Key? —Nadie me informo de esto.



— Será mas fácil asegurarnos de que no se entere de la noticia si estamos con él y por estamos me refiero sólo a ti. —Esto es tan típico de el.



— ¿Y qué es tan importante que te impide acompañar a tu susodicho hijo a proteger la cordura de su amigo?



— Amber.



Y todos sabíamos que reclamar a eso era como pedirle a Onew que dejara de comer carnes blancas.

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— Lo primero que debes hacer es impedir que su asistente le de los titulares de hoy. —En vista de que Key se fue con Amber a probablemente recibir todos los chismes de la compañía, Jonghyun quedo al mando del operativo.



Si, yo también tengo miedo.



— ¿Y cómo hago eso? —Hace unos minutos habíamos llegado a SME y me alegro mucho ver que Changmin ya estaba en la recepción esperándome con dos chocolates calientes.



— ¿Cómo haces qué?



— No, nada. Estaba hablando con la voz en mi cabeza. —Changmin se me quedo mirando raro para después reírse y decir lo ocurrente que era, por suerte no vio cuando arregle el pequeño audífono en mi oreja.



Siempre me ha preguntado porque diablos Minho lleva estas cosas a todos lados.



— Yo que se, cuando la veas derríbala contra el piso. —Se escucho un poco de interferencia y varios gritos— Por el amor de dios Jong. —Era Onew-hyung— Sólo sonríe y mueve tu cabello, como lo que te hago hacer cuando no tenemos dinero para el pollo.



Eso esta demasiado cerca a ser prostitución.



Veo como una joven con falda hasta la rodilla y cabello mas corto que el mío se acerca. Por como Changmin la saluda asumo que debe ser su asistente.



— Buenos días Changmin-ah, tengo que hablar contigo acerca de... oh, hola Taemin-gun. —Es natural que no me viera, estaba atrás de Changmin.



— Buenos días noona, ¿Cómo dormiste? —Concéntrate Lee, tu sabes esto. Sonrisa inocente, mueve el cabello.



Izquierda, derecha, izquierda, derecha. Por favor que no crean que me esta dando una apoplejía.



— Bue... bueno… bien. —No puedo creer que funcione.



— ¿Le ibas a decir a Changmin que lo están esperando en su camerino verdad? —Piensa como Kibum, piensa como Kibum, manipular, manipular.



¿Por qué sigo repitiendo todo dos veces?



— Ah... si, claro. —Y así fue como descubrí que mi poder secreto no sólo sirve para conseguir pollo gratis para Onew.



— Bien, en ese caso no hay que hacerlos esperar, vamos hyung. —Por alguna razón sentí que tomarlo de la mano y salir corriendo era lo mas lógico, pero ya que íbamos a mitad de camino me di cuenta que pasamos por todas las oficinas, escritorios y salas de conferencia tomados de la mano.



Y no pude evitar sonrojarme un poco.



— ¿Por qué tanta prisa Taemin?



— No, por nada. —Baje la velocidad, y cuando iba a soltar la mano de Changmin, él me lo impidió sujetándola muy fuerte. No creo que pasar por un par de oficinas más así haga mucha diferencia ¿No? Caminábamos lento, sin mirarnos. Bueno, en realidad yo no quería que me viera con la sonrisa casi psicópata que tengo ahora.



Estoy tan feliz.



— Bien, ya que evitaste a la asistente ahora tienes que impedir que los demás le digan algo, Key ya se encargo de Yoochun-hyung pero no se nada de los demás y el maldito, cabeza rapada apago su celular ¿Qué diablos hace con Amber?



Por alguna razón siento el carisma flameante de Minho flameando un poco más de lo normal aun a través del audífono, no creo que sea buena idea darle razones al más alto de todos nosotros para que este celoso.



— Bueno. —La voz temblorosa de Jinki me da a entender que estaba en lo correcto— Estoy seguro que no es nada importante, probablemente se estén haciendo la manicura juntos o estén haciéndose faciales, ya sabes, cosas de chicas.



¿Todos concuerdan en que Onew debería callarse? Si, yo también.



Antes de darme cuenta ya estamos frente al camerino/vestidor/comedor/burdel ocasional de DBSK, y justo cuando iba a tocar para que nos abrieran Changmin me detiene.



— Espera. —Lo volteó a ver un tanto consternado, entonces se agacha y pega su oído a la puerta, solo transcurrieron unos segundos para que se separara todo rojo.



— ¿Qué sucede hyung?



— Tal vez, seria mejor regresar en otro momento.



— Está bien.


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DENTRO DEL CAMERINO/VESTIDOR/COMEDOR/BURDEL OCASIONAL.

— Espera... Jae. —Nuestro amado líder estaba sentado en uno de los tocadores, espalda contra el vidrio del espejo mientras su novio estaba entre sus piernas acariciando el claro bulto que se podía ver en la ahora expuesta ropa interior— ¿Qué te pico hoy? Nunca haces esto.



— Hoy me desperté y decidí que le daría una buena sesión de sexo oral a alguien, sino te gusta puedo ir a dársela a mi otro novio. —Jaejoong seguía acariciando por encima de la ropa interior, sin dar tregua a Yunho para que al menos pudiera respirar normalmente.



— Dile a tu otro novio que se joda, hoy me toca a mi. —El mayor subió la camisa del otro para pasar sus dedos por los bien formados abdominales de su novio provocándole sensaciones eléctricas en todo el cuerpo— Jae, sólo hazlo.



— No me presiones, me gusta tomarme mi tiempo. —Bajo un poco la ropa interior de Yunho, pero seguía sin tocar completamente la erección de su novio, y esa sonrisa burlona no desaparecía, aparentemente Jaejoong disfrutaba demasiado torturando los penes de la gente.



— Te odi... —Se mordió el labio tan fuerte como pudo, un hilo de sangre corría por un lado de su boca y se había golpeado la cabeza con el espejo detrás de él pero nada de eso importaba porque Jaejoong le había bajado los pantalones completamente junto son su ropa interior a la velocidad que Changmin se tragaba una caja de pocky's.



Y hablando de tragar, Jaejoong le había cumplido el capricho a Yunho de por fin darle una mamada como dios manda. El bailarín hace varias semanas que no recibía ningún tipo de atención de su novio, y si bien había aprendido que esperar hacia que las cosas fueran aun mejores no le molestaría un Jaejoong con este tipo de humor más seguido.



Jaejoong seguí ocupado lamiendo la erección que estaba frente a él, podía sentir las manos de Yunho en su cabello marcando el ritmo que más le satisfacía, se sentía un poco culpable por ignorarlo todo este tiempo pero tenia que entender que una madre no siempre tiene tiempo para estas cosas.



¿A quién diablos estaba engañando? Sólo lo hacia porque le fascinaba ver a Yunho rogándole por un poco de atención ¿Y a quién no?



Abrió sus ojos y volteo a ver la cara de Yunho, estaba sudando y su pecho se movía rápidamente, tenia los ojos cerrados y se mordía el labio inferior para callarse a si mismo.



Y en ese momento Jaejoong supo que valió la pena la espera.



— ¿Qué... estas mi… rando…? —Apenas podía hablar y aun así quería buscar pelea. Otra cosa que Jaejoong disfrutaba de su novio.



— Nada, sólo como me suplicas mentalmente porque no pare.



— ¿Ahora me lees la mente? —Yunho sabía que tenia que aprovechar los pocos segundos que tenia para recuperar el aliento, pero ahora que veía a Jaejoong algo sudado y con los labios mas rosas que nunca por tanto trabajar era cuando más necesitaba que Jaejoong se pusiera a trabajar.



— Sólo cuando la tengo en mi boca —Jaejoong le dio una rápida lamida a la punta de la erección de su novio haciéndolo gritar un poco.



Y justo antes de que el vocalista principal regresara a su ardua tarea su celular comienza a vibrar.



— Ni se te ocurra contestar. —Pero Yunho no pudo evitar que se separara de él.



— Sólo es un mensaje, tranquilo. – Estiro su mano para alcanzar el aparato para luego regresar complacer a su novio después de leer el mensaje.



A eso es lo que verdaderamente se le llama multitasking.



No se que hiciste para distraer a Yunho-hyung

(bueno en realidad tengo una ligera idea)

pero te lo agradecemos

Taemin no hubiera podido con

él. Gracias hyung.

Onew (=^w^=)



Jaejoong quería sonreír por el mensaje, pero estaba demasiado ocupado, pero antes de que se pusiera a escribir una respuesta (porque no importa que es lo que estuviera haciendo, Jaejoong le juro a dios que cada uno de los mensajes que reciba en su vida serian contestados) Yunho le quito el aparatito.



— ¡¿Qué diablos?! ¡¿DISTRAERME?! —Jaejoong soltó la erección de su novio



— Se que estas enojado pero deja te explico, las cosas se salieron un poco de control con la noticia de Changmin y Taemin sólo quería…



— NADA. —Le puso la mano en la cara a su novio para evitar que hablara— Mira Jaejoong si esta es la única manera en que me vas a dar un poco de atención, aquí el dañado eres tu no yo.



— No me salgas con es otra vez Jung, sabes perfectamente que soy más decente que Yoochun y Junsu, no puedo tener sexo cada vez que se pare espontáneamente.



— Pero al menos un par de veces a la semana, no cada vez que tengamos un día libre joder.



— Olvídalo, si estas tan enojado mejor me voy.



— Claro que te iras, pero cuando termines lo que empezaste, ya me harte de quedar todo seco y alborotado.



Jaejoong ahora si pudo sonreír, su novio no estaba tan enojado como creía.



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— ¿Qué paso Changmin? ¿Qué escuchaste? ¿Están todos bien?



— Deja de preguntarle Taemin, todos sabemos lo que estaba sucediendo ahí dentro.



Lo se hyung, pero es tan divertido como evita mi mirada y esta todo rojo mientras me arrastra a lo que parece ser la cafetería sin soltar mi mano.



— Mejor vamos a comer algo, yo pago.



— Oh, pide pollo para que me traigas. —Se escucha más estática y varios golpes— Estoy aburrido, ahora te ayudare yo Taemin. —Ese era Minho, que si lo conozco tan bien como creo conocerlo en realidad lo único que quiere es dejar de pensar en lo que Key probablemente este haciendo con Amber.



— Está bien hyung. —Nos formamos en una fila no muy larga, me fije para ver si reconocía a alguien que pudiera decirle de la noticia a Changmin, pero todos eran ayudante y trabajadores.



— ¿Qué quieres?



— Lo que tú pidas está bien. —Hasta ahora noto que me estoy muriendo de hambre, en definitiva Rising Idols no le hizo ningún bien a Key, conforme a habilidades culinarias se refiere.



— Bien. —Oigo demasiado alboroto en mi audífono, me esta lastimando el tímpano.



— Joder, cállense.



— Es Jonghyun, no deja de buscarle pelea a Minho. —Más alboroto y gritos, que original chicos, muy original. Pero entones el silencio.



— ¿Minho que hiciste?



— No dejaba de molestar, sólo le dije umpaloompa. —Eso de verdad que es gracioso, Minho tiene que empezar a escribir ese tipo de cosas en nuestro blog.



— Taemin, tal vez debas ir con un doctor acerca de esas voces en tu cabeza antes de que te empiecen a decir que debes matar a todos porque eres un mensajero de dios.



— Prometo que si las voces en mi cabeza me dicen que soy el Mesías tendrás el honor de meterme en un manicomio.



— ¿Gracias?

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Ahora agradezco que Changmin sea relativamente inocente para creerse alguna de mis mentiras, lo único que me preocupa es lo que todos están preparando en nuestro camerino.



— ¿Ya?



— No, espera. —Changmin tenia cerrados los ojos porque le dije que le tenia una enorme sorpresa en algún lado, todavía no sé donde, Minho, Jonghyun y Jinki se están encargando se eso... espero. Y mientras tanto sólo lo tengo dando vueltas por todo el edificio.



— ¿Ya…? ¡Ah! —Casi se cae por no ver un escalón, tal vez esto es más peligroso de lo que yo creía— Tengo una idea, acércate. —Hice lo que me dijo, entonces me volteo y me tomo de la cintura haciéndome sonrojar más de lo que yo creía poder— Listo, así tú caminas y yo te sigo.



— Taemin ¿Qué hizo? ¿Por qué no me contestas? ¡¿TAEMIN?! —Ya ni siquiera puedo escuchar lo que me están diciendo, el ruido de mi corazón golpeando mi pecho es demasiado fuerte.



Y creo que podría acostumbrarme a esto.



— Taemin, responde. Aquí Jonghyun, vocalista principal, tu hyung, tu sabes, el tipo adorable de poca estatura que es abusado psicológicamente por Key todos los días



No, no lo conozco.



— ¿Cuánto falta?



— Un poco. —Si tan sólo supiera que ya le dimos como cinco vueltas a SME, probablemente las personas viéndonos con una mezcla entre lastima y pena ajena van a querer una explicación de esto después.



— Jonghyun quítate, es mi turno en el micrófono. —Era la voz de Onew— Bien, Taemin ya lo puedes traer, Key llego y se encargo de todo.



Óiganme todos, dios existe y se llama Kim Kibum.
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— Bien, abre los ojos Changmin. —Veo como casi al instante de abrirlos los entrecierra para acostumbrarse a la luz del lugar y su cara se ilumina al ver como todo SHINee y DBSK están como sardinas a su alrededor.



Pero logro notar que Yunho tiene un semblante relajado y tranquilo, mientras que Jaejoong no deja de masajear su mandíbula. Al parecer acerté en lo que estaban hacendó allá dentro.



— Queríamos darte esta pequeña fiesta de agradecimiento hyung. —Key había puesto su mejor sonrisa falsa al sostener el un pastel de tamaño mediano entre sus manos que por lo que veo acaban de recibir un buen manicura.



— ¿Por qué me agradecen?



— Por cuidar a Taemin todo este tiempo. — ¿Enserio eso es lo mejor que se les pudo ocurrir, aún con Key como mente maestra? ¿Quién en su sano juicio se creería semejante estúpi...?



— Oh no hay de que, no era necesario que hicieran esto. —Tengo un pequeño tic en el ojo al ver como el tipo del que estoy enamorado se siente en la nube nueve al ver todos los bocadillos y pastel que le trajeron.



Sólo mátenme.



Estoy hincado en el piso llorando imaginariamente ante la soberana estupidez de mi mejor amigo cuando siento como una mano me toma del hombro y lo siguiente que se es que un pedazo de pastel esta siendo estrellado en mi cara.



Oh, Shim Changmin no sabes con quien te has metido.



Aún cuando tratamos que la guerra de pastel no se saliera de control, antes de que nos diéramos cuenta todos estábamos llenos de cubierta de vainilla. Al parecer a Yoochun-hyung se le hizo muy gracioso meter el queso de los nachos que Jonghyun trajo, en los pantalones de Jaejoong que después le pago con la misma moneda estampándolo contra la ensalada misteriosa que de todos modos nadie iba a comer.



Gracias a todos los santos llego Amber con cubiertos y vasos, pero se quedo estática al vernos.



— Para peleas de comida me hubiera quedado en América. —Sólo dejo lo que traía en las manos en el piso y salio muy lentamente, no sin antes guiñarle un ojo a Key.



Alguien saldrá flameado en esta historia.


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— Gracias por dejarme usar el baño. —Me tiro en el sillón descansando mi cabeza en el regazo de Changmin, a causa de que nos quedamos en la fiesta demasiado tiempo nuestro chofer se fue sin nosotros así que todos nos subimos como pudimos al auto de Jaejoong.



— A Jonghyun le dará un ataque cuando sepa que te quedaste a dormir.



— Lo sé, aún no puedo creer que no haya notado que no me baje del carro junto con ellos.



— Probablemente la soda de naranja que Minho le tiro en la cara nublo su buen juicio.



— Buen punto.



Ese día si que me había matado, de hecho ese día lo único que tenia que haber hecho era ir a una reunión con nuestros representantes que no podría haber durado más de una hora y yo ya era libre. Pero al ver lo feliz que se veía Changmin mientras jugaba con mi cabello (ahora libre de pastel) me hizo pensar que no me molestaría hacerlo de nuevo.



Entonces pensé que prender la televisión seria una buena idea.



— En otras noticias, les informamos que el escándalo que hoy en la mañana un periódico amarillista esparció refiriéndose específicamente al integrante de TVXQ Shim Max Changmin ha sido aclarado, y su representante dejo muy en claro que la relación entre él y Lee Soo Man es estrictamente profesional, ninguna relación física.



¡LA MALDITA QUE LE PARIÓ!


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Había una vez un joven al que llamaban Almighty Key, era bien sabido por todos que el apuesto joven dominaba el arte de la danza, el canto, incluso era más inteligente que la mayoría de las personas. Pero cuando se le vio en una habitación de SME buscando en el piso, entre cubierta de sabores y ensalada nadie se podía imaginar que tipo de giro del destino lo habría llevado a esa situación.



— De todos los malditos pantalones que tengo, justo estos tenían que tener agujeros, esta debe de ser otra mala jugada de dios, maldito bastardo. – Kibum sólo seguía revolviendo todo lo que encontraba, ya llevaba varias horas ahí y era sólo cuestión de tiempo para que alguien apareciera buscándolo.



Después de unos minutos decidió levantarse, pero el piso hizo que se cayera directamente en su trasero, dijo unas cuantas maldiciones más para después cubrirse la cara con su antebrazo y...



¿Llorar?



— Justo lo que necesitaba, todo es culpa de ese estúpido, se supone que las demás personas deben pasar por esto, YO NO. —Se recargo en una pared, el sueño y el cansancio le estaban ganando. Claro que hay que darle crédito, caminar desde su apartamento hasta acá y pasarse dos horas buscando entre pastel era la viva prueba de que Key si era todopoderoso.



Pero cuando sus ojos estaban por cerrarse lo vio. OH POR DIOS. AHÍ. ESTABA. Gateo hasta llegar el borde de una silla y lo tomo en sus manos, efectivamente esa pequeña porquería era lo que había estado buscando la mitad de la noche.



Tal vez dios no era un maldito bastardo después de todo.



— Juro que la próxima vez sólo comprare unas malditas vacaciones a Cancún. —Respiro aliviado antes de caminar con mucho cuidado hacia la puerta pero cuando estaba a punto de abrirla vio como la perilla se movía.



ESCONDERSE. ¡¿Pero dónde diablos te escondes e un cuarto de 4x4m con comida hasta en el techo?!



— Kibum, ¿Qué haces aquí?



— Sólo, perdí mis lentes de contacto, son mis favoritos así que regrese a buscarlos.



— Son las dos de la mañana, estas lleno de pastel, ensalada y... —Minho se le acerco peligrosamente, hasta estar a milímetros de su cara—...tu delineador esta corrido, estabas llorando ¿Por unos lentes de contacto?



— Te dije que eran mis favoritos.



—A menos que me digas esas cosas sean color arcoiris y tengan rayos X, creo que estas mintiendo.



— Olvídalo, sólo vámonos.



— Como quiera su alteza, pero primero dime que tienes allá atrás.



— Ya has visto mi trasero antes de Minho.



— No me refiero a eso, en tu mano.



— Nada, vámonos. —Minho no se movía— Choi, sabes que soy perfectamente capaz de patear tu trasero en este instante, quítate.



— No. —Se le acerco aun más, demasiado para el gusto de Key, sabia lo que iba a pasar así que no se sorprendió cuando la boca del más alto estaba contra la suya, tampoco se asusto cuando sintió como la mano del otro se deslizaba peligrosamente por debajo de su camisa lo que si lo tomo desprevenido es cuando el aprovechado de Minho le quito lo que tenia en su mano y salio corriendo como niño chiquito.



— ¿Qué es esto?



— ¿Qué el pastel te entro al cerebro? Es un anillo.



— Se que es un anillo, lo que no se es porque tanta desesperación por el, tienes toneladas de anillos. —Minho estaba inspeccionando el pequeño cilindro, no tenia nada de especial, era simple, de plata por lo que podía ver. Pero los grandes ojos cafés del que se apellidaba Choi se abrieron mucho más de lo posible al ver lo que tenia escrito en el interior.



100 days, and many more to come..~



— Es estúpido, no sé porque le hice caso a Amber, sólo los devolveré y usare el dinero para algo menos gay. —Key se quito el suyo e hizo ademán de quitarle de las manos el que Minho tenia.



— Espera, estoy decidiendo entre si salir a gritarle al mundo que tienes sentimientos y no sólo piensas en ti mismo, o empujarte contra la pared y no soltarte hasta que este satisfecho de ti.



— Espero que no sea la segunda o estaremos aquí para cuando necesitemos 10 de esos anillos. —Los dos sonrieron poniéndose sus anillos.



Y a Minho no le importo cuanto tiempo tuvieran que estar ahí y de todos modos escogió la segunda.