Experimentando el "Harem reverso" cap 11

¿Un beso de amor?

Esta situación…O más bien el sentimiento, es como si de esta tonta decisión dependiera el cambio radical de algo en mi vida.

¿Lo hago o no?

Por un lado está mi orgullo y por otro lado lo poco que me queda de conciencia después de trabajar este tiempo a lado de unas personas tan extrañas. Pero pensándolo bien…

¿Qué podría pasar?

Solo será una, digo a nadie le hace mal una vez en su vida, no conozco casos de gente que se haya muerto por eso. La música tan alta me aturde, haciendo que me cueste un poco más tomar ésta elección.

Ash, en primer lugar nunca debí aceptar esto. Pensé que al llegar a Japón, con las preparaciones del disco y todo eso se olvidarían del asunto, pero nada. Tomaron de pretexto el hecho de que pronto saldrían de la ciudad dividiéndose en grupos para la promoción del nuevo CD y que se extrañarían mutuamente y bla, bla, bla… viles escusas para venir a este exclusivo y lujoso club a ‘des estresarse’.

-¿Qué tanto piensas? ¡Es solo cerveza!- Me dice Jaejoong presionándome, yo solo observaba el recipiente en mi mano que contenía aquél liquido extraño para mi.

Estábamos todos sentados en una barra privada, un poco alejada de donde se encontraban las demás personas quienes también parecían pertenecientes al medio artístico. El sitio entero se veía iluminado por destellos plateados, que contrastaban muy agradablemente con el color rojo intenso de los acolchonados asientos distribuidos alrededor.

-No debieron traerla a la fuerza… No es necesario que bebas eso.- Dijo Junsu al momento en que intentaba retirar la copa de mi mano, pero en su intento su piel rozó con la mía haciendo que me hiciera para atrás bruscamente.

-No...- Dije algo desconcertada. Últimamente siempre me pasaba lo mismo, no podía soportar estar cerca de Junsu, todo por la maldita culpa de Hyesung, lo que me dijo me atormentaba a cada momento.-Yo la beberé.- como todos se me quedaron viendo por mi reacción, para intentar disimular mi nerviosismo tomé todo el contenido de un sorbo.

-¡Así se habla, Sora! Esa es la actitud que estaba buscando.- Yoochun puso su brazo alrededor de mis hombros, hacía ya un rato que habíamos llegado y el ya traía sus copitas encima.-Ten, aquí ésta algo un poco más fuerte.

-¿Qué?- Lo miré asustada. Todavía sentía cierta picazón en mi garganta a causa de aquel sorbo desesperado que di, y ahora me quiere dar algo más fuerte. Seguro quiere matarme.

-No tengas miedo, o que… ¿a caso piensas que te embragaremos para aprovecharnos de ti?- Esto seguro es un desafío… ¡Como detesto ser tan orgullosa!, eso siempre me lleva a hacer tonterías. Le arrebaté la copa que me ofrecía.

-No seas ridículo, Yoochun.- De nuevo tomé eso de un solo sorbo, y sí, evidentemente era más fuerte que lo de la vez pasada ya que la picazón en la garganta ahora fue casi ardor… Pero todo con tal de demostrarles que se equivocan.- ¡Ves, puedo beber cuantas yo quiera! Es más, quiero otra.

-Aquí la tienes, compañera de cuarto.- Me dijo Changmin dándome una copa más. Pensándolo bien esto no es tan malo, incluso comienza a gustarme ese sabor a alcohol, además, no me siento diferente.

-Bueno, en vez de que estén tomando a lo loco, ¿por qué no brindamos por el próximo CD de Tohoshinki?- Dijo Yunho poniéndose de pié también. Ah, que afortunada soy, brindando aquí con los cinco chicos más atractivos de todo el lugar…

-¡Si, brindemos!- Dije alzando mi copa con mi mano derecha, la otra descansaba en la cintura de Yoochun quien aún continuaba con su brazo sobre mi hombro. ¿Desde cuanto tengo esa familiaridad con él?

-Será la única que me tomaré.- Di Junsu acercándose a nosotros sosteniendo su bebida también.

-¿Por qué, Xiah?-Le pregunté quejosamente, se me hacía muy raro no verlo tan animado como los demás al estar aquí.

-Él no puede beber… se emborracha con la segunda jajá- Jaejoong también se veía muy feliz al igual que Yoochun y arrastraba las palabras de una forma peculiar.- No es como yo, que por más que tome no me emborracho.

-Jajá, más bien eso te dices a ti mismo para seguir bebiendo.- Changmin no perdió oportunidad en molestarlo, no pude evitar reírme, de hecho creo que es la primera vez que me río de una broma de él. Es muy gracioso, me pregunto por qué no lo había notado antes.

-¡Ya, Changmin! ¡Respétame que soy tu mayor!...

-No empiecen una de sus peleítas aquí… ¿vamos a brindar o no?- Preguntó Yunho empezando a exasperarse por el comportamiento de el menor y el mayor.

-Si, ya hay que brindar… ¡Por “The secret Code”!-dije saltando un poco, haciendo que Yoochun aflojara un poco su agarre sobre mi cintura… ¿A que horas pasó su brazo a ese sitio?

-¡Por “The secret Code”!- Respondieron todos al unísono, después tomamos nuestras bebidas, yo de nuevo, de un solo trago.

-Pues yo no se ustedes, pero yo quiero bailar hasta caerme… ¿vienes conmigo?- Me preguntó Changmin extendiendo su mano. Que guapo se ve hoy, con esa camisa color vino un poco desabotonada y esos pantalones negros ajustados. ¿¡Como me negaría a su invitación!?

-¡Claro!- Le contesté sonriendo, tomando la mano que me ofrecía, intenté avanzar hacia él pero no pude, un repentino abrazo con mucha fuerza hizo que me detuviera.

-¡Oye, no es justo! ¿Por qué te la llevas si está conmigo?- Dijo Yoochun haciendo un lindo puchero mientras me abrazaba con mas fuerza.

-Lo siento, pero ella ya aceptó así que si me permites…- volvió a extender su mano hacía mí, misma mano que hace unos momentos me vi forzada a soltar.

-¡No me dejes!-me suplicó haciendo una expresión tan adorable que enloquecería a cualquiera. ¡Ah! No quiero dejarlo, pero tampoco quiero desairar al apuesto Changmin... ¡¿Cómo es que he vivido todo este tiempo con chicos tan guapos sin haberme dado cuenta de lo afortunada que soy?!

-Ya le dije a Min que bailaría con él… perdón.-Me disculpé con Yoochun, estábamos el uno frente al otro, yo tenía mis manos en sus hombros y el tenía las suyas en mi cintura.

Está bien,… pero a cambio de dejarte ir quiero un beso.-Me dijo en un tono sexy, acercándose más a mi rostro… ah, estoy a la deriva y sin salvavidas… no pude resistirme y concedí su petición, pero no como él esperaba, solo le di un sonoro beso en la mejilla izquierda y aprovechando el desconcierto que le causó me libré de sus brazos y por fin tomé de nuevo la mano de Changmin.

-¡Hey! En ese caso yo también exijo uno…-¡jajá, Jaejoong habla tan gracioso cuando está pasado de copas! A no, pero según él nunca le pasa eso jajá.

Fingí ignorarlo y aún tomando la mano de Min, lo guié hasta el espacio entre los barandales de metal que indicaban la salida de la zona privada, pero antes de salir me volteé y le di un beso rápido a Jae quien se encontraba sentado en una de las acolchonadas sillas rojas. ¡No piensen mal! También fue en la mejilla, aunque por algunos instantes la idea de besarlo en otro lado fue muy tentadora…

Lo último que vi de aquella zona privada fueron las estupefactas miradas de Yunho y Junsu, que hasta el momento habían sido los más ‘serios’. Después me fui con mi pareja de baile a la pista… creo que así se le llama al lugar donde baila la gente, aunque en verdad que importa.

Nos fuimos adentrando en la multitud, en su mayoría eran jóvenes, chicas o chicos, muy atractivos todos…creo que casi todos son famosos porque sus caras me parecen familiares, o si no son hijos de alguien con una cuenta muy grande en el banco. Ah, me siento como flotando, ni siquiera percibo mis propios pasos. ¿Por qué todos nos miran? ¿O será que tengo delirio de persecución? De seguro es por Min, y es que ¿quien podría evitar ver a alguno de mis asesorados? ¡Son tan guapos!

Que bonita noche es esta… la música es genial en este lugar, y los movimientos de Changmin ni se digan, no por nada es miembro de la boyband más famosa de toda Asia. De vez en vez viene un meserillo a traerme otra bebida, solo a mí, ya que Changmin dijo que él ya no quería más… pues él se lo pierde.

Que calor hace. No sé por qué se me ocurrió ponerme este tonto vestido negro con leggins… pero, hay una especie de brisa que llega hasta mi cuello, pero no es refrescante sino al contrario hace que mi calor sea peor, ¿qué rayos pasa? Ah, es cierto, el calor que ahora siento debe ser por tener el cuerpo de Min tan pegado al mío y la brisa aquella se trata del aliento de Min chocando contra mi cuello. Mi vista es algo borrosa… distingo algo que se acerca más y más… la brisa ya no se siente en mi cuello sino justo cerca de mis labios…

-Ehem… lamento interrumpir pero tenemos que irnos…

-Oh, Yunho… Me había olvidado de ti, te extrañé.-Es como si el tiempo que no lo hubiera visto fuesen años en ves de…amm no tengo idea de cuanto tiempo haya pasado pero lo extrañé tanto que le di un abrazo.

-¿Por qué tenemos que irnos ahora? Todavía es temprano.- Ah, que linda se ve la cara de Yunho cuando se sonroja, ¿será por mi abrazo? Lo solté al escuchar la voz de Changmin protestar.

-Hay una razón, bueno de hecho dos y tienen nombres propios.

-Ashh, ¿Jaejoong hyung y Yoochun otra vez?-Preguntó Changmin mientras ponía esa expresión que hace cuando está enojado. Que no le extrañe a Yunho si llegando al departamento el menor se encierra en el baño y deja un desorden como siempre que se enoja.

-Si, y no solo ellos, por lo que veo hay alguien más que está muy en ambiente.-los dos me miraron raro.

-¿Qué?...- Pregunté confusa.

-¿Por qué no nos dijiste que no sabías tomar?- no entiendo a qué viene esa pregunta, ni que estuviera ebria o algo así, yo me siento de lo más normal… es más nunca me había sentido mejor.

-Si sé… y además esta es la primera vez que lo hago.- dije muy orgullosa.

-¿¡Qué!? Definitivo, tenemos que irnos.- Yunho cambió su expresión de enojado por una de preocupado al escuchar que nunca había bebido, no se por que tanto problema con ello… ¡Oh, que bonitas luces de colores!

-Changmin, tú llévate a Yoochun… Junsu, tu llévate a Sora… yo me llevaré a Jaejoong.- Ordenó Yunho en cuanto llegamos a donde estaban los demás.

-¡No necesito que nadie me lleve, yo estoy bien!...

-Si, si Jaejoong, lo que tu digas.- La verdad era que Jae ya no podía mantenerse en pié y tubo que sostenerse en Yunho.- Bueno, nosotros nos vamos primero en mi carro, tu y Sora se van después en el tuyo, Junsu.

-¿Por qué no me puedo llevar yo a Sora?-Preguntó Changmin quien ya sostenía por debajo de los hombros al ebrio Yoochun… jajaj suena chistoso ‘ebrio Yoochun’.

-Tu eres el único al que Yoochun respeta cuando está así, si Junsu se lo lleva no se que le haría… Así que no discutas y vámonos ya.

-“Bueno, pero solo porque sé que Junsu es el único que no está enamorado de ella”- Min murmuró algo en coreano y después se fue con los demás arrastrando a Yoochun con el.

Se fueron y me dejaron junto con Junsu en aquella zona privada, nos sentamos en un cómodo sillón de cuero color rojo igual que las sillas de la barra. Ya no siento la incomodidad de los últimos días, de hecho ahora no puedo dejar de ver la cara seria de Junsu.

-Realmente eres muy guapo...-él se sonrojó un poco por mi comentario, si de por sí creo que ya se sentía incomodo porque lo observaba descaradamente.

-Es raro que pienses eso.- Me dice riéndose un poco nerviosamente.

-¡¿Por qué?! – No me esperara que dijera eso, es parte del grupo adorado por todo mundo y le parece raro que le diga eso.

-Sabes, la gente dice eso a menudo de Yunho, Yoochun, Changmin o Jaejoong… pero de mí casi siempre dicen “Oh, que lindo eres” o “Eres muy simpático”… -no podía dejar de observar cada rasgo de su rostro mientras él hablaba melancólicamente.

-Pues para mí eres las dos cosas, eres lindo… pero a la vez muy guapo…- Ah, esa pregunta de nuevo atormentándome, él se puso más nervioso con lo que le dije.

-Emm… aa…gracias… ya deberíamos… irnos

Salimos del lugar cuidándonos de alguna cámara, ya que tenemos experiencias muy malas con ello. En todo el camino, mientras Junsu conducía se mantuvo el silencio, como también se mantuvieron las mejillas sonrojadas de él (¡Que apuesto se ve!). Yo me quejaba constantemente ya que de pronto un terrible malestar en todo el cuerpo me atacaba, a veces eran nauseas y otras eran mareos o dolores…

Entramos al edificio igual cuidándonos de alguna acosadora o reportero. Como mis malestares no bajaron Junsu tubo que llevarme de la misma manera en que Changmin y Yunho se habían llevado a los otros. El departamento estaba en completo silencio, seguramente cuando los otros llegaron se durmieron de inmediato.

-Junsuuuu… me siento mal, todo me da vueltas.- Le dije bajito para que los demás no se despertaran, pero extrañamente me reía mientras se lo contaba.

-No debiste beber, te lo advertí.-Me respondió en la misma forma baja, atravesamos la sala y abrimos la puerta de mi habitación cuidadosamente para no hacer ruidos, todas las luces estaban apagadas, en la cama contigua a la mía se podía distinguir una figura cubierta hasta la cabeza.

-No me regañes Junsu… yo que te quiero tanto.- otra vez se puso nervioso, pero ahora su nerviosismo hizo que tropezara y que calleáramos los dos.

Afortunadamente ambos caímos sobre mi cómoda y acolchonada cama. ¿Así que estas cosas si pasan en la vida real? Eso de que bajo determinadas circunstancias te vez en la incómoda situación de que la persona que te confunde o algo así termine cayendo encima de ti… aunque ahora falló un poco ya que la que cayó encima de él fui yo.

Las luces de la ciudad que se colaban por la ventana era lo único que nos brindaba algo de visibilidad. Nos mirábamos fijamente…tal como en las películas, solo que se supone que él debería de estar arriba, para que así, ÉL fuera el que me besase. Porque eso es lo que quería en estos momentos, lo que más deseaba… era un beso de Kim Junsu.

“¿Te gusta?”

Esa era la pregunta que se presentaba casi a diario en mi cabeza, y ahora, viendo a esa persona tan de cerca con sus hermosos y únicos ojos, su piel, sus labios… ¡Al diablo! Si la ley dice que en este tipo de situaciones el que besa a la otra persona es el de arriba… pues eso haré.

-Pero que…-llevé mis manos, que habían estado apoyadas en la cama, hasta ambos lados de su rostro e ignorando lo que fuese a decir lo besé… o más bien puse mis labios sobre los suyos y me quedé así, sintiendo la suavidad que éstos poseían.

Ah… esto es el cielo, pero de pronto llamó mi atención que Junsu no se moviera, ósea que me aventara o algo. Con mis manos aún en sus mejillas, me separé de él lentamente, solo unos milímetros, abrí mis ojos y me encontré con los suyos llenos de confusión. Por un momento la razón llegó de golpe a mi cabeza, ¿qué estoy haciendo?

La locura, o lo que sea que me pase el día de hoy, regresó a mí cuando sentí como Junsu ponía sus manos en mi cintura y, girándose con brusquedad hacía un lado, hizo que intercambiáramos posiciones. Iba a preguntar que pasaba pero en eso sentí de nuevo aquella suavidad de antes, pero ahora era distinto, porque los labios de Junsu se movían al compás de los míos…

Si, ahora si se trataba de una escena como en las películas… él estaba sobre mí con sus manos aún en mi cintura, y las mías se habían movido de sus mejillas a alrededor de su cuello, atrayéndolo más a mí. Mareos, confusión, desorientación, ansiedad, adrenalina... ¿qué no son todos esos efectos de las drogas? Porque todo eso es lo que estoy experimentando con el beso de Junsu… ¿Será que él es una droga? Si es así, no me importaría vivir [i]intoxicada [/i] por siempre.

Las sensaciones son tan buenas que un sonido raro sale de mi boca, ¿qué me pasa?... Junsu aprovecha eso y lleva la intensidad del beso a un nivel más alto… no puedo pensar en nada ya, es demasiado para mí.

Pero todo lo bueno acaba, y sobre todo por algo tan importante como respirar. Nos separamos respirando presurosamente, y nos miramos de nuevo.

-Creo… que la respuesta a la pregunta que ha rondado mi cabeza… es ‘si’…- dije tratando de normalizar mi respiración.

-¿Qué?...

Todo se volvió negro para mí, en contra de mi voluntad fui atrapada en el mundo de los sueños.

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