Experimentando el "Harem reverso" cap 12

Giro inesperado.

En una típica historia de amor dos personas, que incluso pensaron que no tenían nada en común, se conocen… aunque al principio pareciese uno de tantos hechos comunes en la vida… es diferente, hay algo en su ser que lo grita, algo en su mirada que les hace saber en el fondo que esa persona será especial… tal vez intenten negarlo por algún prejuicio extraño o poniendo el orgullo de por medio pero todo será en vano… porque así es el destino, así es el amor de raro y cruel que llega cuando menos te lo imaginas pero también cuando más lo necesitabas.

Pero que pasa cuando en ves de una persona conoces a cinco… las más únicas, maravillosas y… extrañas personas que jamás pensaste, que te cambian la vida, pero sabes que ninguna de esas personas podría fijarse en ti…

Porque, aunque hace unos meses no me lo hubiera ni imaginado, eso es precisamente lo que me ha pasado y solamente hasta hoy soy plenamente consiente de ello. ¿Cómo se puede llegar a ser tan estúpida?... Era más que obvio que algo pasaba.

Desde el principio, con mi hostilidad, quise negar el hecho de que me encantaba estar rodeada de chicos tan atractivos, solo me mentía a mi misma diciéndome que los odiaba… cuando en el fondo, desde el primer momento en que los vi quedé totalmente cautivada con ellos.

-Ahh…- Aún manteniendo mis ojos cerrados dejé salir un gran suspiro, no quiero abrirlos por que sé que en cuanto lo haga, la luz que de por sí ya me lastima mis ojos será peor.

-Vaya, vaya… ¿se puede saber a quién le pertenece ese suspiro tuyo?-dijo una voz cercana a mí (tal vez más cercana de lo que me hubiese esperado).

-¡Changmin!- No sé por que entré en pánico… me incorporé de golpe sobre mi cama abriendo los ojos, aunque tuve que cerrarlos de nuevo debido a una fuerte punzada en mi cabeza causado por la intensa luz (lo sabía).- ¡Auch!- Grité llevando ambas manos a mi cabeza, simplemente no lo pude evitar.

-Creo que alguien está conociendo las consecuencias de ingerir tanto alcohol.- esa entonación en sus palabras, tan peculiar en el cuando quiere molestar a alguien. Un momento…

-¿Qué haces en mi cama?- Cuando por fin pude abrir mis ojos bien, fue lo primero que llamó mi atención… él sentado a un lado de mí, metido entre las sabanas y, como es costumbre suya al dormir, sin playera.

-No me digas que no recuerdas lo que hicimos anoche…- Me dijo con voz ronca, yo por inercia me hice para atrás recargando mis manos en el colchón. ¿Anoche? ¿De que rayos habla?

-¿De que… hablas?-Dije tartamudeando un poco. No me gusta mostrar debilidad ante nadie y mucho menos ante él pero tenía la guardia baja. Traté de recordar pero… ¡este fuerte dolor de cabeza!

-¡Qué mala eres!-me reclama jaloneándome un poco.- Olvidar así nuestra gran noche… aunque, después de haber bebido tanto no te culpo.- ¿Bebido tanto? Oh, si… recuerdo haber estado con los chicos en aquél club...Yoochun y Jaejoong no perdieron el tiempo y empezaron a beber… entonces me ofrecieron y yo acepté… y después… lo último que recuerdo es estar bailando con Changmin muy… indecorosamente… ¡Pero debe haber más! ¿Por qué no puedo recordad después de ahí? ¿Será que…?

-No… ¡No puede ser!- Estando en la situación en la que estaba, con un hombre medio desnudo en mi cama y al no poder recordar nada lo único que pude hacer fue llorar como un bebé… ¿Cómo fui tan estúpida? No debí guiarme por mi orgullo, ahora creo que lo he perdido todo a lado de uno de mis jefes… ¡No! ¿Por qué el destino es tan cruel?- Sniff… Sniff…Aaaaa…-al principio creo que Changmin pensó que estaba fingiendo por que se rió de mi actitud pero, al darse cuenta de que no era así abrió los ojos enormemente y me abrazó.

-¡Perdón, no llores!- Sobaba mi espalda con uno de sus brazos cariñosamente, yo ni siquiera me molestaba en alejarlo de mí… ¿Qué voy a hacer? ¿Qué les diré a mis padres?

-¿Cómo puedes pedirme perdón ahora?- Le reproché aún sollozando en sus brazos. Nunca había llorado así en mi vida, así de la forma en que lloran los niños pequeños… muy ruidosamente. La verdad no me avergonzaba de ello, tenía cosas más importantes que pensar ahora… no puedo seguir con éste empleo… no después de esto y si hay… ¿consecuencias?

-¿Qué pasa?...- el estruendo del rebotar de la puerta contra la pared, al ser abierta repentinamente, resonó en toda la habitación haciendo que Changmin y yo saltáramos un poco.

-¡Jaejoong!... Casi nos matas de un infarto, ¿qué manera de entrar es esa?- Jaejoong había entrado armado con una sartén, miraba a todos lados de la habitación como buscando algún peligro.

-¡infarto es el que casi me da a mí!... Imagínate ser despertado por un llanto tan desgarrador,… Pensé que se había metido un ladrón o un secuestrador, o un violador, ¡o una de las fans!...- Jaejoong hablaba lo más rápido que podía y utilizando ese acento tan raro característico de él.

-¡Pues aquí está el delincuente que buscas!-dije empujando a Changmin mientras tallaba mis ojos para despejar mi vista. Él me miro con cara de ‘¿yo que hice?’… encima de aprovechado ahora finge que no sabe nada.

-¿Qué? ¿Pero qué le hiciste ahora, Changmin?...- Jaejoons se acercó hasta mí, sentándose en mi cama y ayudando a limpiar mis lágrimas maternalmente. En ese instante uno a uno fueron apareciendo los demás miembros en la habitación.

-Jae, ¿qué le pasa a Sora?- Preguntó Yunho en tono recriminatorio hacia en mayor y el menor. Yo trataba de contener mis sollozos pero no podía… incluso el malestar de la cabeza se me había pasado.

-Es lo mismo que le acabo de preguntar a Changmin…- Ahora los dos mayores veían a Changmin quien por mi empujón cayó en medio de su cama y la mía.

-Yo… es que es un malentendido… yo solo quise hacerle una broma… y…

-¿Broma?... En verdad… ¿era una broma?- Que diga que si, por favor… el enojo que tendría por la broma tan pesada no se compara con el sentimiento de ultraje que tengo en éstos momentos. Me acerqué hasta Changmin con algo de complicaciones debido a mi ajustado vestido negro.

-¡Claro que era una broma!... Como caíste así de simple, ni siquiera te diste cuenta que traes la misma ropa de ayer.- es cierto, incluso mis leggins estaban en su lugar. Suspire aliviada y me dejé caer en mi cama de nuevo mirando al techo… feww, eso en verdad me asusto.

-Que alivio…

-¿Nos podrían explicar de que hablan?- Habló Yoochun, se notaba somnoliento y fruncía el seño mientras se acercaba a mi cama y la luz le daba de lleno a la cara… si, seguramente el tiene el mismo dolor de cabeza que tuve hace unos momentos.

-Nada… Simplemente aproveché que Sora no recordaba nada de lo da ayer para jugarle una pequeña proba… pero no pensé que reaccionaría así, ¿es que acaso tengo cara de violador?- De nuevo todo regresa a la normalidad para mí, la voz fingida de niño pequeño de Changmin haciendo pucheros ante las miradas acusadoras de sus mayores.

-Pues… ¿quién nos puede garantizar que no le hiciste nada?- Cuestionó yoochun inquisitivamente, ya un poco más acostumbrado a la luz del incesante sol. Al escuchar su voz de sospecha mi inquietud regresó…

-¡Oye! ¿Cómo te atreves a pensarlo?...

-Tienes razón Yoochun…-Ahora era Jae el que hablaba y por la mirada que tenía Yunho también estaba dudoso sobre el asunto.

-¿¡Qué!? Yo solo soy culpable de hacer una broma… ¿entienden? UNA BROMA.- Changmin se defendía hablando en voz alta y moviendo sus manos al compás de sus explicaciones.

-Bueno, creo que hay alguien que puede ayudarnos a esclarecer nuestras dudas…- la mirada del líder se desvió hacia la única persona que aún seguía en el marco de la puerta, esa persona con la que últimamente las cosas han estado incómodas.

-¿Qué tiene que ver Junsu en esto?-preguntó Yoochun extrañado, acercándose hasta su amigo esperando una respuesta. Junsu estaba serio, debido a su misma seriedad no me había dado cuenta de su presencia en el cuarto además, su mirada era fría y distante… nada perecida al Junsu que conozco.

-Él fue el que trajo a Sora al departamento, después de que yo y Changmin los trajéramos a ustedes, par de bebedores desmedidos.- el líder aprovechó el momento para llamarles la atención discretamente acerca de su comportamiento de anoche.

-En ese caso también deberías de decirle lo mismo a Sora, ella estaba igual o peor que nosotros…- ¿Qué? ¿Porque tiene que inmiscuirme también a mí?

-Pero ustedes la incitaron a hacerlo, además ese no es el punto aquí…Junsu, ¿podrías decirnos qué pasó anoche?- yo, que había estado recostada, me senté de nuevo en mi cama, a un lado de Jaejoong. Yunho estaba de pié frente al ‘yoosu’ y Changmin seguía en el piso esperando a ser absuelto de las acusaciones, todos estábamos ansiosos por la respuesta de Junsu.

Pero él, estaba extraño… su mirada… específicamente dirigida hacia mí… era como si me quisiera decir algo, pero algo no muy bueno porque había un dejo de dolor en ella… no entiendo por qué.

-No pasó nada fuera de lo normal, yo la traje y ella se sentía mal por la bebida… así que en seguida que la dejé en su cuarto se quedó profundamente dormida.- Algo estaba mal… todos estaban satisfechos al escuchar la respuesta del segundo más joven pero yo no… tal vez porque mi preocupación desde que lo vi fue esa mirada y como al hablar no estaba presente su típica sonrisa o en medio de su relato alguna de sus peculiares carcajadas…

-Se los dije, ahora si me disculpan me voy a la ducha… porque si no recuerdan hoy empiezan las promociones del ‘Secret Code’.- dijo Changmin mientras se ponía de pie y salía de la habitación.

***

Después del malentendido todo fue algo presuroso, por estar dialogando tanto se nos hizo tarde y el turno por usar primero la ducha fue casi una pelea campal… pero como pudimos, sobrevivimos a tremendo ajetreo.

Llegamos al edificio de Avex y se llevó a cabo algo parecido a una rifa para decidir los equipos en que se dividirían los viajes de la promoción. A los mayores les tocó visitar Nagoya, mientras que a los tres menores les tocó visitar Fukuoka. Como es obvio que no podía acompañarlos a ambos algo se tenía que hacer.

-Lo mejor es que vayas con los bebés del grupo, nosotros podemos cuidarnos solos… pero no estoy seguro acerca de esos tres.-Me dijo el líder bromeando un poco para hacer enojar a los mencionados.

-¡Oigan! ¿No creen que ya me han maltratado mucho éste día?…- Desde el incidente que ocurrió en la mañana, Changmin había estado un poco sensible ya que aún no superaba que todo el mundo lo hubiera tachado de ultrajador.

-Jajá, ya tranquilízate Min…-Lo calmó Jaejoong antes de que empezara con otra de sus escenas.

-Bueno entonces tú irás con Yoochun, Changmin y Junsu a Fukuoka, en el primer viaje y en el segundo viaje irás con Changmin y Junsu a Hiroshima.- Oh, genial… Changmin y Junsu en los dos viajes, que mala suerte… y no es que me desagraden o algo pero, la situación con ambos está un poco incómoda.

Y ése fue el inicio de la situación más tortuosa de mi vida… claro, después de haber tomado éste empleo.

***

Para mi sorpresa Changmin no tenía el mas mínimo remordimiento por la terrible broma que me hizo (no se por qué sorprende) y en vez de hacerse a un lado o ignorarme, como la hace Junsu, se la pasó todo el tiempo pegado a mí.

En todo el camino, mientras Changmin me hablaba de mil incoherencias, yo no dejaba de dirigir mi mirada hacia los asientos del otro lado del pasillo… ahí donde estaban Yoochun y él… ¿por qué? ¿Por qué se comporta de ésta manera? ¿Acaso hice algo? Agh… por más que pienso no encuentro nada…

Llegamos muy rápido a Fukuoka, comparándolo con el tiempo que nos tardamos en los viajes a Corea. No había ninguna prisa por llegar, ése día no teníamos programada ninguna actividad así que podríamos disfrutar la tarde de la manera que cada quién prefiriera.

Como la compañía tiene que “ahorrar dinero”, solo alquilaron dos habitaciones en el modesto hotel…

-¿Les parece que lo decidamos por piedra, papel o tijera? –Preguntó Yoochun después de que la recepcionista del hotel nos informó de la situación de las habitaciones.

-No…que Changmin y Sora compartan cuarto, al fin ya están acostumbrados. – Si antes tenía alguna duda de que Junsu me estaba evitando ahora ha desaparecido… Ni siquiera nos miró cuando dijo eso, simplemente habló viendo a la nada y después de eso se fue rumbo al ascensor.

-¡Espérame, Junsu! Yo traigo al tarjeta de la habitación…– Yoochun tomó su equipaje y se fue tras él. Changmin y yo nos quedamos ahí viendo como los otros dos desaparecían al ser cerradas las puertas del ascensor.

Sentí como si alguien me hubiera dado una puñalada directo al corazón… Pero no vale la pena fingir conmigo misma, yo sé que lo que más me duele es que esa indiferencia de Junsu se de justo ahora… ahora que acabo de darme cuenta de la respuesta a mi pregunta… “si”, ésa es la respuesta… si me gusta Kim Junsu.

-¿Estás bien? – La voz de Changmin me recordó el lugar en el que estaba, ya que por un momento me desconecté de todo.

-¿Eh?... Ah, si. Creo que nosotros también deberíamos ir a nuestra habitación. –Tome mi maleta deslizable y el estuche que contenía mi computadora portátil, con un dejo de desgano... pero no era algo que pudiera evitar, estaba muy afligida por el comportamiento de Junsu…

Él había sido la primera persona a la que le tuve confianza después de haber venido a esta parte del planeta… siempre con su amable sonrisa y esa calidez que puede hacer que te olvides de tus mas grandes dificultades… cuando tenía algún problema con los demás siempre lo tenía a él para defenderme o si era yo la que estaba mal me hacía entrar en razón…

Como si fuera un robot y estuviera en automático, caminé hasta al ascensor en el que momentos antes se fueron Yoochun y Junsu… iba a lado de Changmin, quien de vez en cuando se me quedaba viendo de una forma extraña. Yo ignoraba su comportamiento, porque seguía pensando… concentrándome en averiguar el por qué…

Llegamos al tercer piso donde se encontraba nuestra habitación, recorrimos el pasillo…Changmin revisaba los números en las puertas para saber cual era la nuestra.

-Ésta debe ser la de ‘ellos’… entonces la de nosotros es esa que sigue…– susurró Changmin, no se si me hablaba a mí o estaba monologando, yo solo lo estaba siguiendo…

Él abrió la puerta y ante nosotros estaba una moderna pero simple habitación… era justo lo que necesitábamos para los tres días que estaríamos aquí…

-*suspiro*…– De pronto sentí unos deseos enormes de acostarme en mi cama, cubrirme con las blancas sabanas y permanecer ahí hasta que saliera el sol el día siguiente… y estaba por hacerlo cuando alguien sostuvo mi brazo.

-No pensarás quedarte aquí encerrada ¿o si? – Me preguntó Changmin mostrando una mirada preocupada… ¿Preocupada? Deben de ser figuraciones mías.

-La verdad… si…-le contesté con desgano. Traté de liberar mi brazo para volver a mi asunto pero Changmin hizo más fuerte su agarre, yo volví mi mirada hacia a él extrañada por su acción.

-Pues no te lo permitiré, ahora mismo saldrás conmigo.- Me dijo sonriéndome… pero no esa sonrisa maliciosa y traviesa de siempre, sino una más suave.

-¿Por qué haría eso?- Le dije retándolo en tono molesto. No estaba de humor para otra de sus bromas y esa actitud tan extraña solo hacía que desconfiara más.

-Porque de cierto modo yo soy tu jefe y te lo exijo.- Con que ahora quiere aprovecharse de la situación.

-Ni pienses que eso funcionará conmigo.-No se que planea, pero no me dejaré engañar dos veces el mismo día. Él me sonrió de una forma, que me hizo recordar aquél video del que tanto me reí, al ver su cara inocente al inicio de su carrera… era como si ese chico con el pequeño gatito en sus manos hubiese regresado.

-En ese caso, recurriré al plan “b”…- Su mano, que había estado sosteniendo mi brazo a altura de mi codo, descendió lentamente hasta llegar a mi mano, la tomó gentilmente y se hincó frente a mí… eso hizo que me sonrojara un poco por la situación tan incómoda.

-Changmin…- Pronuncié su nombre nerviosamente. El levanto su rostro hacia mí, aún con aquella inocente sonrisa.

-¿Quisieras tener una cita conmigo?- ¡Bang! Algo en mi cerebro se colapsó… simplemente no podía asimilar las palabras que el “Príncipe Changmin” acababa de decirme.

-No juegues Changmin… esta broma no es graciosa.- dije evadiendo su mirada.

-No es ninguna broma… ¿por qué piensas eso?- Se puso de pié, aún sosteniendo mi mano.

-¿Cómo que por qué?... Esto es ilógico... yo no te caigo bien y no hay ninguna razón por la que pudieses querer salir conmigo.- Hablaba rápido y luego me callaba de repente, su mirada tan profunda me causaba todo eso… no entiendo.

-Te equivocas… si hay una razón muy grande…-hizo una pausa y miró el suelo, entonces tomó mi otra mano también y me miró a los ojos.- Me gustas…

Mis ojos se abrieron como platos y mi mandíbula casi se va hasta el suelo de la impresión… nunca pensé que me fuera a ver en una situación como esta con uno de mis asesorados… ¿cómo soñarlo siquiera? Ellos son tan famosos y son deseados por una gran parte de la población asiática… y yo, solo soy una simple chica con suerte.

Ahora estoy aquí, frente a Changmin… viéndome y esperando por una respuesta… entonces, a mi cabeza llega el deseo de que no fuera él el que me lo dijera sino Junsu… mi corazón duele una vez más al recordar su comportamiento tan raro.

-Yo…- no sabía que responder, la impresión era muy grande…

-¡Hey chicos, quieren ir a…-como pudo… ¿Cómo pudo Changmin dejar la puerta abierta? ¿O acaso fui yo?-… perdón, no quise interrumpir.- dijo Yoochun al ver a Changmin sosteniendo mis manos, yo por acto de reflejo solté mis manos de su agarre avergonzada.

-¿Qué en TVXQ nadie toca la puerta antes de entrar?- Ahí estaba de nuevo el Shim Changmin que todos conocemos, haciendo berrinche como niño chiquito.

-Perdón, perdón… Junsu y yo solo queríamos preguntarles que si querían venir con nosotros a pasear por ahí.-Oh no… por mi situación bochornosa no me había dado cuenta que Junsu venía con Yoochun… y ahí estaba de nuevo esa mirada fría, que hacía que un grande dolor creciera en mi pecho.

-Creo que ellos ya tienen sus propios planes, Yoochun… mejor vámonos…- […] Que el chico que te gusta te diga eso… es lo peor que puede pasarte… sentía una impotencia enorme y un dolor indescriptible al escuchar su tono y esa frialdad… ¡Ese no es el Kim Junsu que yo conozco!

-Junsu, espera…-La desesperación habló por mí… y antes de que Yoochun y él abandonaran la habitación lo detuve.- Quiero hablar contigo…

-No tengo tiempo ahora… ¿nos vamos Yoochun?- No fui la única, los otros dos también se extrañaron de la actitud de Junsu… él no es así, jamás, desde que entré a trabajar aquí, lo había visto de éste modo…

-Amm… si. Bueno, nos vemos más tarde.- Nos dijo Yoochun apresurándose para seguir a Junsu, cerrando la puerta tras ellos.

El clic del cerrar de la puerta retumbó en la habitación, seguido por un silencio extraño… mis ojos me ardían por mi intento de contener las lágrimas… es que no entiendo todo esto y es peor para mí el sentirme de éste modo, es como si no fuera yo, jamás había experimentado algo así… jamás me había gustado alguien de este modo…

-Ahora entiendo todo…-un murmullo de Changmin y su sonrisa extraña me recordaron la situación en la que estaba y, sobre todo, lo que había pasado antes de que Junsu y Yoochun irrumpieran en la recámara.

-…-No entendí lo que había dicho antes, así que no respondí nada, sólo giré mi rostro hacia el lado opuesto a él para poder limpiar cualquier rastro de lagrimas de mis ojos discretamente…

-Yoochun nos dijo ‘no subestimen a Junsu’…-Su expresión de incredulidad y ese gesto de burla… Sería tonto pretender que no entendí eso, por lo menos no me mentiré a mi misma una vez más… pero ante él lo mejor será fingir.

-No te entiendo…-Me dio la espalda un momento, llevando una de sus manos a su cabeza masajeando un poco sus sienes. Después, se volvió hacia mí con una expresión totalmente distinta y una gran sonrisa dibujada en su rostro.

-Nada, olvídalo…Entonces, ¿aceptarás mi invitación a salir?

Viéndolo de manera objetiva tenía dos opciones, una era quedarme en la habitación por el resto de la tarde, sola y lamentando mi cruel destino de haberme fijado en un imposible… o puedo ir con este chico loco que siempre está molestándome y que ésta mañana era sospechoso de haberme violado…

Ya que mi sentido de lo que está bien y mal últimamente ha cambiado mucho, escogí la opción de salir con el presunto violador… no tenía nada que perder, además tal vez con sus ocurrencias podría olvidar un rato éste sentimiento de niña enamorada con el corazón roto.

Changmin quería ir a dar un recorrido por el centro de la ciudad, pero obviamente siendo tan famoso no puede andar la calle así como así (sobre todo con la altura que tiene)… pero para eso estaba yo, que soy experta en ropa y en disfrazar a mis asesorados también. Bastó salir un momento y gastar unos cuantos yens en una tienda popular de ropa, para conseguir el mejor de los disfraces… ropa común y corriente.

-Me siento tan raro…- Dijo Changmin mientras se veía en el espejo de la habitación con el seño fruncido.

-¿Tu crees?... Yo digo que te ves bien.-No es que la ropa fuera tan rara, pero comparado con lo que usa normalmente es casi todo lo contrario… es así como un look de estudiante… unos jeans simples, una playera en colores fríos y una sudadera combinada.

-¿Bien? Me siento como un niño… pero ¿sabes que?, lo único bueno de este disfraz es que los pantalones nos están tan ajustados de la entrepierna.-cuando dijo eso por inercia volteé a ver al lugar mencionado, pero en cuanto reaccioné desvié mi mirada avergonzada…

-No necesitaba saber eso…

-¡Já! ya deja de sonrojarte, mejor vámonos.

Iniciamos una de nuestras típicas discusiones debido a eso, pero no duró tanto como veces pasadas. Salimos del hotel, algo desconfiados y mirando para todos lados, temiendo que pudieran reconocer a Changmin… pero al parecer mí plan fue todo un éxito, ya que sin tanto fijador de cabello y ropa holgada mi asesorado parecía una persona común y corriente. Por mi parte, el atuendo que me correspondió era el más típico vestuario de una chica japonesa: un uniforme escolar… debo decir que luce muy bien en mí, y sumándole que no traigo una gota de maquillaje hace que me vea más joven.

…

Al principio, no sabía si estaba bien aceptar la propuesta de Chabngmin, sobre todo después de que dijo aquello tan extraño, pero como no ha vuelto a mencionarlo he de suponer que se trataba de una más de sus bromas pesadas.

Pasadas tres horas de andar de aquí para allá por las calles más peculiares de Fukuoka, estábamos totalmente agotados… así que compramos unos helados y nos sentamos en un cómodo lugar cerca de ese lago que pasa por en medio de algunas calles.

-Aquí será la grabación de mañana.- Me comentó Changmin mientras comía su helado, sin dejar de ver el reflejo de la puesta del sol reflejada en el agua.

-¿A si?... Es un lugar muy bonito.-La gente pasaba en ambas direcciones de la calle, unos veían estresados el reloj y otros parecían que iban en estado automático por su falta de expresión. La poca luz que quedaba se desvaneció… ¿qué estará haciendo Junsu en estos momentos?

-¡Oh, Sora tienes algo de helado en la cara!- Esa voz de niño pequeño que hace Changmin a veces es tan chillante que me aturde.

-¿Dónde?- Le pregunté algo desesperada por su risita burlona, pero cada vez que pasaba la servilleta por alguna parte de mi rostro el negaba con la cabeza.

-Ahí tampoco es…-Me dijo una vez más mientras mi desesperación aumentaba, entonces…- Es aquí…

Se acercó a mí, y yo como supuse que me ayudaría a limpiar el helado de mi cara no puse ninguna resistencia… aunque si hizo eso, no fue de la forma en que yo me esperaba… para cuando pude reaccionar sus labios estaban sobre un punto muy cercano a mis labios y, después, pude sentir su lengua deslizarse un poco sobre mi piel… ¡Sentí que se me erizaron hasta las uñas! Exhalé inquieta y empujé a Changmin…

-¿¡¡Por qué hiciste eso!!?- Dije nerviosa posando mi mano en el lugar que momentos antes fuera profanado por Changmin.

-Te lo había dicho antes… pero creo que en cuanto viste a Junsu mi confesión quedó en el olvido…

-…-

-No necesitas decirme nada, el silencio habla por ti…

-Chanmgin…- Puse mi mano en su hombro y de nuevo mis lágrimas se hicieron presentes… me siento como una tonta.

-Perdón, no quise hacerte llorar.- Tomó mi mano que estaba en su hombro y con la otra limpió mis lágrimas.- Sabes, no me importan tus sentimientos por Junsu, ni la razón por la que él se está comportando así… admito que cuando aceptaste salir esta tarde conmigo me sentí realmente feliz… con estos atuendos y vagando por ahí, era como si fuéramos un par de jóvenes comunes… sin conciertos, grabaciones, sesiones fotográficas, entrevistas… y yo fuera un chico común quien invitó a salir a una chica a pesar de saber que le gusta uno de sus mejores amigos…

-¿Por qué me hablas de esta manera? Si sabes de mis sentimientos… ¿por qué?...

-Porque “soy un estúpido”...ya sabes, como la canción… soy ese chico de los dramas que consuela a la protagonista siempre que el principal la hace sufrir… aquél tonto que por más que se sacrifica y sufre por ella al final nunca consigue su amor…- Ahora veo la razón por la que se había obsesionado con ese drama últimamente.

[Canción: http://www.youtube.com/watch?v=4zOXVP0x21I]

-No quiero que te sientas así… no fue mi intención pero, es que yo jamás me imaginé que tú pudieras fijarte en alguien como yo…- Me siento mal por ello, porque no puedo evitar pensar en que me gustaría que hubiese sido Junsu quien sintiera eso.

-¿Lo dices por mi profesión o por la forma en que te trato comúnmente?- Este chico es increíble, aún en circunstancias así puede llegar a hacer cada comentario y decirlo de tal modo que hace que sea tan peculiar.

-Por las dos cosas… -dije en voz baja, sintiéndome verdaderamente como una chica de escuela que está recibiendo una declaración de amor.

-El ser cantante no me hace diferente… aún soy un hombre normal, ¡también tengo sentimientos!, y desde la primera vez que te vi me gustaste…

-Pero tú siempre me molestas y…- Era imposible para mí creerlo, después de todas las bromas y las miles de travesuras que me ha hecho.

-Aishh… En serio creí que eras más inteligente, ¿no te has dado cuenta que yo molesto a todas las personas que me importan?... Y si a ti te molesto más que a los demás es porque me importas más, además de que me encanta ver tus adorables caras cuando te enojas… Por eso te pregunté el otro día que si podrías enamorarte de alguien como yo…- Ya era tarde, se supone que debíamos de estar en el hotel antes de que los del staff preguntaran por nosotros.

-Changmin, esto no podría ser… yo soy tu asesora y, no estoy segura de poder corresponderte…- llevé ambas manos a mi pecho, como si tocara mi corazón que late lenta y dolorosamente desde el distanciamiento de Junsu.

-Yo no soy tan tonto como los chicos de los dramas, no me daré por vencido tan fácil… es por eso que te dije de mis sentimientos… solamente necesito una oportunidad para demostrarte que yo puedo ser todo lo que necesitas…

Mi corazón latía rápido otra vez… dejó de estar en el estado vegetativo que la indiferencia de Junsu le había causado, pero no era por amor sino por angustia, de no saber que hacer ante ésta proposición inesperada… No quiero aceptar a Changmin solo porque sé que Junsu no corresponde mis sentimientos, porque tengo la sospecha de que esa es la causa de su distanciamiento, seguramente el notó algo en mí que le indicó lo que sentía y por eso ahora se aleja de mí… esa teoría duele, pero no puedo forzarlo a que me quiera…

Mis ojos se encontraron con los de Changmin cuando por fin me atreví a mirarlo a la cara, él seguía expectante por mi respuesta y yo aún con las manos en mi pecho, casi suplicándole a mi corazón que me ayudara a hacer lo correcto… No quiero arrepentirme después, de no haberle dado una oportunidad a alguien que tal vez podría hacerme feliz… si él dice que no quiere ser ese chico tonto de los dramas, yo tampoco quiero ser la protagonista llorona que se la pasa sufriendo por un mal amor, porque sé que en la vida real las cosas no siempre tienen un final feliz si te aferras a un imposible…

***

[Punto de vista del narrador]

Después de que se fueron de la habitación de Changmin y su asesora, el par de amigos se dirigió a un restaurante cercano a comer un platillo típico del lugar. Las cosas habían estado un poco silenciosas a comparación de las otras veces en que los dos han salido juntos, y todo se debía a Junsu, quien se limitaba a contestar con palabras monosílabas a todo lo que Yoochun decía.

A él le preocupaba la actitud de Junsu, ya que como su mejor amigo hay cosas que es imposible dejar de notar… el hecho de que su plato estuviera casi intacto era una de las evidencias más grandes, que agudizaban su sospecha.

El restaurante no era muy exclusivo, y no había mucha gente, ellos estaban sentados en una de las mesas de la esquina. Aún la poca clientela los veía con sumo descaro, las chicas se sonrojaban cuando eran descubiertas y algunos hombres denotaban envidia, sobre todo los que acompañaban a las sonrojadas chicas, ellos estaban acostumbrados a ello así que no le daban tanta importancia.

-¿A ti también te llamaron por teléfono, verdad?- Preguntó Yoochun a su amigo, reservando el otro tema para más tarde.

-Ahh, si…-contestó Junsu después de un suspiro de molestia.- Jaejoong hyung dice que lo mejor que podemos hacer es ir a hablar con él lo antes posible.

-Yo también pienso que es lo mejor, pero no dejo de pensar que es injusto…- Yoochun mareaba un poco su comida, para no sentirse incómodo después solo viendo comer a su amigo.

-Ya me he acostumbrado a la injusticia.- dijo entre dientes Junsu. “Ése no es un comentario que Junsu diría” pensó Yoochun preocupado.

La situación ya era insoportable para Yoochun, aunque una parte de él no quería saber… era su deber de amigo apoyar a Junsu, así que lo abordó con la pregunta directamente:

-¿Qué pasa con Sora?- Junsu tragó con dificultad el caldo que tenía en su boca y sin mirar a su amigo le contestó.

-¿Qué pasa de que?...

-Junsu, no eres bueno mintiendo… y mucho menos a mí.- A Yoochun le parecía casi una burla que su mejor amigo tratara de ocultarle algo, siendo que él conoce perfectamente cuando está mintiendo.

-No se de que me hablas…- Dijo Junsu, fingiendo interés en su comida.

-Hablo de la forma en que has estado ignorándola desde ésta mañana.- Yoochun seguía con su forma directa de hablar, no había otra forma de tratar éste tipo de asuntos con Junsu ya que a veces suele ser tan cerrado a sus propios sentimientos.

Junsu pretendía ignorarlo, pero llegó a un punto en que no pudo seguir soportando la insistente mirada de Yoochun sobre él.

-No te preocupes… no es nada que afecte tu interés por ella.-La voz de Junsu sonó un poco enojada cuando dijo eso, entonces, el silencio se presentó por unos instantes…

-Ella ya no me interesa…- Yoochun trató de sonar lo más convincente que pudo al decirlo, a pesar de que no era cierto, pero él conocía a Junsu y esa forma de actuar solo significaba que también sentía algo por su asesora.

-¿Qué? Pero si tú…- Junsu abrió sus ojos grandemente… aunque él también quería mucho a Yoochun, su forma de ser tan distraída le impedía tener el poder de su amigo de saber cuando estaba mintiendo.

-Me di cuenta de que solo era algo pasajero… ya sabes, no por nada tengo la fama que tengo jaja…- Añadió una broma a su acto, para así poder ahogar el nudo de su garganta.

-¿Por qué no me habías dicho antes?- Tal vez Junsu no se percataba de la mentira de su amigo, pero lo que si le parecía extraño era que Yoochun no le hubiera contado eso antes.

-Porque no pensé que te importase.- Estaba acostumbrado, de hecho todos lo estaban… a fingir ante los demás felicidad aunque estuvieran pasando momentos difíciles, pero nunca se imaginó que sería tan complicado esta vez.

-¡Cómo no va a importarme, eres mi mejor amigo!- la forma ruidosa en la que habló empezaba a dar señas del Junsu que todos conocen.

-Lo se…- Dijo Yoochun sonriéndole tiernamente. “Justamente por eso hago esto”, pensó el susodicho.- Pero esa no es la razón por la que te interesa…

-¿Eh?- Yoochun rió un poco por la transparencia de Junsu, ya que no disimuló nada su nerviosismo.

-Te interesa… porque estás enamorado de ella…-Decir esas palabras fue sumamente doloroso para el pelinegro, pero estaba seguro de lo que hacía.

-Jajaja…claro que no… que a todos los demás les guste no significa…- Incluso su risa característica no sonó igual… había sido descubierto.

-Junsu, te dije que no me mintieras.-Lo miró directo a los ojos, con la expresión un poco severa para que se diera cuenta que era en vano seguir negándolo.

-Yo…-Junsu se sintió avergonzado al ser descubierto.

-Descuida, no le diré a los demás…-Yoochun le sonrió una vez más, para quitar esa expresión de incomodidad en el rostro de su amigo.

-Gracias…

-Solo quiero que me expliques, ¿por qué te estas comportando así con ella?...- antes de que junsu empezara a hablar él lo interrumpió.-Y quiero la VERDAD.

-Porque ella…-a Junsu se le tornó la cara de mil colores y las palabras no salían de su boca.-… ella… ella me besó.- al escuchar eso, Yoochun hizo un esfuerzo sobrehumano para ocultar su tristeza y mostrar una gran sonrisa.

-¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿A qué hora? … bueno eso no importa…-hizo una pausa para tomar algo de aire, ya que por hablar tan rápido casi se desmaya.- ¡Se supone que deberías de hablar con ella, no ignorarla!

-No… tú no entiendes…

-¿Qué es lo que no entiendo?... ¿Qué te gusta una chica y que te besó porque probablemente siente lo mismo por ti?- Algunas de las personas los miraban curiosas desde lejos al ver el repentino ‘entusiasmo’ de Yoochun.

-Suena tan genial cuando lo dices de ese modo… pero la verdad es que ella estaba muy tomada y me besó pensando que era alguien más…

-¿¡Cómo estás tan seguro!?- Yoochun estaba haciendo un gran sacrificio y le enojaba en suma que fuera en vano- Si… ella estaba algo pasada de copas pero… ¡no creo que haya sido al grado de confundir a alguien con otra persona!...

-Ella dijo… que sabía la respuesta y que era ‘si’… además, lo último que recuerda es haber estado bailando con Changmin…

-No pensarás que se trata de aquella tonta pregunta, ¿o si?-Recordó aquella pregunta sin sentido que hizo Changmin hace unos días que causó el disgusto de todos los seguidores de Sora.

-Estoy seguro…-que Junsu cambiara de parecer una vez que se aferra en algo es toda una misión imposible, pero eso decidió abandonar el tema por el día de hoy.

-Pues aún así pienso que te equivocas…- Junsu iba a debatir eso pero…-No… ya no digas nada… sea lo que sea que decidas hacer, quiero que sepas que yo estaré aquí para apoyarte.- Si la mesa del restaurante no hubiera estado de por medio hubieran compartido un abrazo fraternal, pero ahora, tuvieron que conformarse con una sincera sonrisa.

***

[Regreso al punto de vista de ‘Sora’]

En una típica historia de amor hay dos personas destinadas a estar juntos y vivir felices para siempre… ¿será que eso pasará también conmigo?

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