Boarding School cap 6

Después de su clase con el chico moreno que se la pasaba repitiéndole lo muy lindo que lucía, Junsu salió disparado a su siguiente clase donde sabia se encontraría con Yoochun y unos cuantos amigos más del internado. La verdad es que Yunho le había caído de maravilla, pero ya tenía suficiente de tantos sonrojos, digo aun que no sientas nada por aquella persona no se puede evitar sentirse alagada al ser tan ¿alabado?

Cuando llego hasta el salón donde tendría su clase, el chico comenzó a desacelerar su velocidad. Yoochun se encontraba como siempre recargado en la pared mientras conversaba con aquellos chicos de aparicioncita egoísta e hipócrita.

−Hola –hablo el chico tímidamente.
−Hola –contestaron muy pocos. Esta clase de personas no eran del tipo amable y atento, así que a Junsu no le sorprendió su falta de educación.
−Has llegado muy temprano, Junsu… ¿paso algo?
−Nada –contesta el pequeño mientras se sonroja al recordar los comentarios del moreno de su última clase. Esto no paso desapercibido por Yoochun, frunció el ceño levemente intentando no ser demasiado obvio.
−Bien, nosotros nos iremos a nuestra clase, nos vemos Yoochun –dijo uno de los chicos ignorando por completo a Junsu.
−Sí, nos vemos chicos.

Los chicos comenzaron a irse y como el primero, todos ignoraron al castaño que simplemente frunció el ceño. Ya cuando los chicos se habían perdido de vista, el pequeño les saco la lengua infantilmente. Yoochun rio ante el gesto de su mejor amigo. El sabía que a esos chicos no les agradaba Junsu, y sabia también que Junsu les odiaba, pero él no podía hacer nada ¿cierto?

−Deberías de intentar ser más amistoso con ellos.
−Ellos son los groseros, no sé por qué te juntas con esos tipos –menciono el pequeño en un tono serio.
−Junsu.
−No sé porque te molesta que lo diga, es la verdad.

Junsu entro al salón dejando a un sorprendido Yoochun, era cierto que a Junsu no le agradaban ellos, pero en ningún momento el pequeño se había quejado de esto, incluso se echaba la culpa a el mismo por el comportamiento de los amigos del pelinegro.

− ¿Te encuentras bien, Junsu? –pregunta el chico sentándose junto a su amigo.
−Sip.
−Te estás comportando algo extraño.
− ¿De verdad? Pues no lo creo, solo… solo estoy… estoy algo nervioso. –el rostro serio del castaño cambio a uno sonrojado.
− ¿Y eso?
−Pues… es que… es que…
− ¿Es que?
−Es que hay alguien que… alguien que me interesa. –Okay, ¿Por qué había dicho esto? La verdad es que lo primero que había pasado por su mente era contarle sobre Yunho, pero por alguna extraña razón su lengua se había trabado y al final había terminado diciendo esto.
− ¿Cómo? –el shock se notaba en el rostro de Yoochun, ¿Junsu estaba interesando en alguien?
−Yo… hay alguien que me interesa.
− ¿Alguien que te interesa?
−Si… oye no es necesario que lo repitas…
−Es… es solo que no lo puedo creer… Junsu, tu, tu nunca…
− ¡Oye! Que nunca haya tenido un novio no significa que nunca me hayan atraído algunos chicos –contesta el chico algo indignado.
−Lo sé pero… yo soy tu mejor amigo, y tú nunca me habías contado nada de esto.
−Perdón, es solo que nunca creí que fuera algo de importancias, pero…
−Pero con este chico si, ¿Te gusta mucho?
−Creo que si…
− ¿Se puede saber de quién se trata? –maldición, ¿Qué le iba a decir? Junsu sabia a la perfección sobre los sentimientos de Yoohwan, pero no quería usar los sentimientos del chico para hacerle entender a Yoochun que si quería tener su cuerpo, tenía que tener una relación más seria con él. Pero Junsu sabía muy bien que en eso él se contradecía, porque él era adicto a las caricias de su mejor amigo, el no podía vivir sin la pasión de Yoochun ahora que le había tenido, ahora que la había conocido y quería probar hasta la última gota.
−Yo… es que, no… no sé si sea buena idea decírtelo –contesta algo apenado, la verdad era que no sabía que decirle, pero quería que Yoochun pensara que era tímido y que por esa razón no quería contarle.
− ¿Por qué no?
−Me… Yoochun, es que…
− ¿Acaso no somos amigos? Junsu soy tu mejor amigo desde hace años, se supone que tienes que contarme todo.
−Pero… es algo difícil.
− ¿Por qué?
−Por favor, Yoochun, quiero estar seguro de esto antes de decirte de quien se trata, sabes cómo soy y yo… me siento apenado…
−auff~ okay, pero tienes que decírmelo, Junsu, se supone que no tiene que haber secretos entre nosotros. Junsu –el pelinegro tomo las manos del pequeño entre las suyas− tu eres la única persona que me conoce bien, eres mi mejor amigo y quiero que lo sigamos siendo, pero si me dejas de lado no… no me agrada. –Junsu no sabía si reír o ponerse a llorar. Su mejor amigo, eso era lo que el significaba para Yoochun, y lo peor de todo esto era que Yoochun no le necesitaba a diferencia de él. Yoochun podía estar solo con sus amigos o con chicas o chicos en cualquier momento y no acordarse de Junsu, pero el… el no podía estar sin Yoochun por mucho tiempo… moriría.
−Perdón, pero, te diré dentro de poco, no te preocupes.
−Eso espero, Junsu.
−Bien, comencemos con la clase, jovencitos.

Los dos chicos se acomodaron en sus asientos ‘prestando’ atención a lo que su profesor les decía. Junsu se sentía tan… mal, esperaba que al confesarle esto a Yoochun el chico por lo menos se sintiera algo celoso, pero no había sido así, para Yoochun, Junsu no era más que su mejor amigo, aquel con el que podía descargarse, física y emocionalmente.

−Joven que horas son estas de presentarse a clases –se escucho la voz del profesor mientras observaba la puerta que se había recorrido.
−Perdón, profesor, es que me había perdido.
−Está bien, joven, solo porque es la primera semana de clases y es nuevo en este colegio se la pasare.
−Gracias, profe.
−Busque asiento.
−Claro. Oh, ¡JUNSU! –grita Yunho al ver al chico lindo de la clase pasada (el grito como en el The 3rd Asian Tour Concert, cuando ven al militar entre la audiencia ^-^)
−Yunho… −contesto Junsu algo apenado por grito del moreno, algunos de sus compañeros incluyendo a Yoochun los estaban mirando en aquellos momentos, así que eso logro que sus mejillas se sonrojaran levemente, así que bajo el rostro avergonzado.
−No haga ruido, joven, siéntese de una vez.
−Sí, profe, me sentare aquí junto a Junsu-ah.

Yunho se acerco a la banca que se encontraba a un lado de Junsu, a su izquierda, mientras Yoochun se encontraba a la derecha del pequeño castaño. Yoochun observo a Yunho mientras fruncía el ceño. ¿Era este el chico que le gustaba a Junsu? Pensó el pelinegro al ver como su amigo se avergonzaba ante la presencia del moreno, aun que por un momento el pelinegro pensó que Junsu se refería a su hermano.

−Bien, ahora si continuemos con nuestra clase.

La clase había pasado por demás incomoda. Junsu podía sentir la mirada molesta de Yoochun sobre su persona. Tenía miedo a voltear también, no le agradaba la forma en la que el chico le veía, como si fuera una clase de puta o algo por el estilo. Respiro profundo, relájate Junsu, relájate, se repetía el chico una y otra vez intentando concentrarse en su clase.

Yunho simplemente fijo su mirada en el profesor mientras este explicaba la clase, el estaba totalmente ignorante de lo que estaba pasando entre su nuevo amigo y Yoochun, así que aun que sentía la mirada asesina de Yoochun sobre su persona, no le tomo importancia.

¿Por qué estaba molesto? No lo sabía pero simplemente no le agradaba aquel chico moreno. ¿Quién se creía que era para hablarle de esa forma a Junsu? Él ni siquiera le conocía, Junsu siempre le presentaba a sus amigos. Además, el creía que su hermano era el que ocupaba los pensamientos de Junsu, aun que claro tampoco le agradaba esa idea.

Cuando el timbre sonó, Yunho le sonrió una vez más a Junsu despidiéndose de este, Junsu asintió sonriendo de igual manera. Cosa que claro, a Yoochun no le había agradado.

El moreno continuo caminando por el pasillo completamente ignorante de que ya se había ganado un nuevo enemigo. Y que mas daba, no era tampoco como si nunca hubiera tenido antes.
Changmin se acerco al chico mientras intentaba regularizar su respiración a causa de la carrera que había hecho. Respiro profundamente cuando se sintió mejor y abrió la boca para poder hablar.

−No me esperaste, hyung… −un puchero apareció en los labios del chico.
−Lo siento, Changmin, pero no sabía en donde te encontraría.
−Tienes razón. Bueno como sea, ¿en donde es tu siguiente clase?
−Creo que es un piso arriba.
−Genial, yo también tengo mi siguiente clase en el siguiente piso.
−Ven vamos.

Los chicos habían ido juntos a algunas de sus clases, Changmin estaba sorprendido de ver a Yoohwan en dos de aquellas clases, pero por alguna razón una sonrisa tierna se formo en su rostro al pensar en ser mas amigo del chico. Además este había sido muy amable la última vez que se habían visto.
Yunho tenía que soportar a Jaejoong en una clase mas a esas horas del día, tampoco era como que el rubio lo estuviese molestando en todo momento, el chico solía hacer comentarios no muy agradables sobre como goleaba a gente inocente o lo pervertido que era al espiar a gente mientras se vestían, ¿le había visto, cuando Jaejoong ponía crema corporal a aquellas hermosas piernas? ¿Hermosas? ¿El había pensado eso? Yunho sacudió su cabeza intentando lograr sacar aquellas imágenes del perfecto cuerpo de Kim Jaejoong, el no era un pervertido y no iba a comenzar a serlo con aquel rubio creído y mimado, no señor, el era Jung Yunho y Jung Yunho no era un débil hombre hormonal, no lo era ¿cierto?

Después del descanso, todos los jóvenes volvían a sus clases, Yunho caminaba junto con Changmin acompañando al más joven ya que el ya había visto donde se encontraba el lugar donde Changmin tomaría su siguiente clase, pues si, Yunho ya era un experto ya que había recorrido la escuela como cinco veces memorizando casi todos los números y letras que se encontraban en los carteles en las puertas de los salones.

Los dos jóvenes se detuvieron en aquel pasillo al encontrar finalmente el salón que le tocaría a Changmin. Yunho sonrió lindamente despidiéndose de su mejor amigo. Changmin le sonrió igualmente y sin pensarlo ni un solo segundo, el más pequeño le dio un fuerte abrazo al más grande. Yunho se sorprendió ante aquello, pero al ver la sonrisa de ¿agradecimiento? en el rostro de Changmin no se atrevió a decir ni una sola palabra.

Changmin sacudió su mano nuevamente despidiéndose de Yunho, y el otro hizo lo mismo…
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− ¿Pasa algo, Jaejoong?
−Nada.
−Pues por tu rostro no creo que en realidad sea ‘nada’
−Es que, es que… no sé qué me pasa, okay, mejor vámonos de aquí antes de que haga alguna tontería.
−Ah.

Joon estaba a punto de decir algo pero callo enseguida al ver que Jaejoong ya había comenzado a caminar alejándose de aquel pasillo sin importarle que su siguiente clase era en aquel lugar. Suspiro en resignación, no tenía sentido preguntar la razón del comportamiento del rubio ya que sabía, el chico nunca se la daría.

Jaejoong por otro lado mordió su labio inferior ¿se había molestado? Pero ¿Por qué? Okay, esta bien que odia a Jung Yunho, pero lo que sintió no fue precisamente agradable, se suponía que su plan era alejar a Changmin de Yunho, porque odiaba a Yunho, pero por alguna razón tenía la necesidad de alejar a Changmin de Yunho porque no le había agradado para nada la forma en la que Changmin le abrazaba.

Okay, sin duda esto no estaba nada bien, el rubio sacudió su cabeza repetidamente esperando sacar aquellos pensamientos de su cabeza. Joon solamente le siguió sin decir ni una sola palabra, él entendía a Jaejoong como nadie podía, y en esos momentos algo golpeo su mente, el conocía a Jaejoong mas que a nadie, el conocía a Jaejoong pero no conocía tan bien a su exnovio. Cerró los ojos al recordar el triste rostro de HyunJoong aquel día cuando habían discutido terminando así su relación. El había tenido la culpa de todo, no solo por haber estado con alguien mas, pero también por haber hecho sufrir a su antes pareja ignorándolo cuando el chico más lo necesitaba.
Joon odiaba meterse en los problemas de otros, pero en ocasiones olvidaba que las personas no buscaban ayuda, sino apoyo, alguien con quien hablar y desahogarse, alguien que les comprendiera. Si, sabía que había sido su culpa, y sabia que esa era una de las razones por las que ahora siempre estaba allí para solucionar los problemas de Jaejoong, aun que fuera algo egoísta, ya que no pudo hacer esto con su novio.

−Joon –se escucho la suave voz de Jaejoong.
−Dime.
−… tengo hambre.

Joon sabía que eso no era lo que Jaejoong quería decirle, pero no pensaba cuestionar a su amigo si este no estaba dispuesto a contarle lo que le pasaba. Los dos chicos caminaron hacia la cafetería nuevamente, como las cocaineras no se encontraban en aquel lugar ya que la hora de lunch había pasado y no servirían comida hasta dentro de una hora, los jóvenes fueron hasta las maquinas de botanas donde compraron algunas galletas unas frituras y unos caramelos. Joon estaba más que sorprendido al notar la gran cantidad de dulces que el rubio había comprado, normalmente el chico nunca compraría caramelos en la escuela ya que apreciaba demasiado su figura como para hacer esto.

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La timbre acaba de sonar por lo cual Yoochun se encontraba colocando sus cuadernos y lapicero dentro de su muy pequeña mochila. Respiro algo cansado, después de todo, ese día no le había ido muy bien. Primero, Junsu le confesaba que estaba enamorado, ¿y eso que le importaba? Pues que si Junsu comenzaba a salir con alguien, ya no podrían divertirse juntos por las noches. Segundo, no había visto a Jaejoong en todo el día, pero por alguna razón no había intentado buscarle. Tercero, el año escolar acababa de empezar y ya tenía tarea suficiente para toda la semana.


−Yoochun –Junsu salía de su clase que se encontraba casi al lado de la de Yoochun.
−Hola, Junsu.
− ¿Por qué esa cara?
−Nada, es que no quiero hacer mi tarea.
−Hehe, ya veo, si quieres luego podemos hacerla juntos, después de todo los profesores dejan lo mismo.
−Sí, eso sería buena idea.
−Bien.

Los dos chicos comenzaron a caminar un piso abajo, donde se encontraron a Yoohwan hablando con un chico moreno alto, un chico muy guapo a los ojos de Junsu.
Yoochun volteo a ver a su amigo esperando encontrar alguna reacción de celos o dolor, pero no encontró nada de eso, al contrario, Junsu de verdad parecía curioso y de cierta forma feliz.

En ese momento Yoohwan volteo, dándose cuenta por fin de que allí se encontraban su hermano y el chico que le gustaba, y no solo eso, también se dio cuenta de la cercanía que había entre Changmin y el. No como que eso le molestase, pero de todas maneras no sería bueno que Junsu pensara algo que no era y el de verdad quería ganarse el corazón de aquel lindo castaño.
Disimuladamente comenzó a alejarse de Changmin mientras el chico seguía conversando con él sobre aquel proyecto de Biologia que tenían juntos.

El pequeño se encontraba muy animado ya que esa clase la tenía con Yoohwan y ahora que les había tocado hacer aquel proyecto juntos, podría conocer al pelinegro aun más. Tan concentrado estaba en eso, que no se dio cuenta del nerviosismo del chico que se encontraba en frente, así como tampoco se dio cuenta de dos chicos que se aproximaban a ellos.

−¿Yoohwan?
−Ah, Hyung, hola. Hola, Junsu.
−Hola, Hwannie.
−¿Quien es el, Yoohwan? –pregunta Yoochun curioso.
−Mi nombre es Changmin –dijo el chico sin esperar a ser presentado por su compañero.
−Sí, el es un compañero, hablábamos de un proyecto.

Yoochun vio a su hermano confundido, digo, no solo lo que decía Yoohwan pero también en la forma en la que lo hacía era confuso, ¿acaso quería hacerle entender a Junsu que no tenía nada íntimo que ver con este tal Changmin?

−Oh, qué bien.
−Si quieren los dejamos para que sigan discutiendo sobre su proyecto –interrumpió Junsu lindamente.
−NO, no, nosotros ya terminamos, ¿verdad, Changmin?
−Ahh~ de hecho, no, pero podemos hablarlo luego.
−Sí, esa es mejor idea.
−Okay.

Yoochun volteo a ver a Changmin por última vez, el chico lucia desconcertado, seguramente no sabía sombre los sentimientos de su hermano hacia su mejor amigo. Por otro lado, Junsu parecía ni siquiera haber notado aquello. El seguía caminando con una hermosa sonrisa como si nada hubiese pasado… espera, ¿el dijo hermosa sonrisa?... okay~ el siempre había pensado que su amigo era… bien parecido, pero nunca se había puesto realmente a enlizarlo o algo por el estilo, claro que solia decirle algunas palabras dulces cuando se encontraban en el acto sexual, pero nunca fuera de eso, además hermoso no era una palabra muy adecuada para un chico… un chico no podía ser hermoso, aun que Jaejoong lo era… okay, Park Yoochun, deja de pensar en eso, te estás matando las neuronas. Pensó el chico al darse cuenta que de repente no dejaba de ver a su amigo de arriba abajo.

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−De verdad que es extraño… −murmuraba Changmin seriamente al ver como los tres chicos se alejaban− ¿Me estaba evitando? Pues eso parecía.
− ¿Desde cuándo hablas solo, Shim Changmin?
−Yunho hyung, me has asustado –decía el más chico mientras colocaba una mano en su pecho.
−Lo siento, Changmin, pero parecías demasiado concentrado en tu… charla.
−Hehe, no era nada, de todas maneras… vamos a comer algo, tengo hambre.
−Okay, yo también tengo algo de hambre.

Yunho y Changmin se dirigieron hacia la cafetería en esos segundos. Changmin había olvidado el incidente con Yoohwan y se había concentrado en contarle a Yunho lo bien que su umma cocinaba, la cantidad de platillos que le preparaba al día y como solía chantajearlo con comida todo el tiempo, aun que eso a Changmin no le molestara en absoluto.

Yunho se la había pasado riendo en todo momento ante las anécdotas de su amigo, pero más que nada en la forma en que contaba aquellas historias, aun que Changmin era masculino y bien parecido, no podía evitar pensar que en ocasiones era infantil y lindo, pero estaba bien, eso hacía más interesante a Changmin.

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− ¿Qué esos nunca se separan? Parecen lapas… maldición.

Jaejoong refunfuñaba desde una de las mesas de la cafetería. Mordió su labio inferior mientras intentaba detenerse para no ir y empujar a Changmin lejos de Jung Yunho. Okay, lo admitía, le tenía ganas a Jung Yunho, sí, eso era, le tenía ganas…

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